SECTOR AUTOMOTRIZ
El difícil momento por el que pasa la industria automotriz en el país
Los bloqueos a las principales vías han hecho más evidentes los problemas de abastecimiento y comercialización para este sector estratégico del país.
No son buenos momentos los que vive la industria automotriz colombiana. En 2020 se juntaron varios factores adversos que todavía no se han resuelto: por un lado, el desplome en las ventas de vehículos luego de las cuarentenas adoptadas por el Gobierno nacional para contener los contagios de covid-19; a esta difícil situación se sumó la mayor participación de productos importados, que tienen arrinconados a los fabricantes de piezas y partes para los vehículos. Y desde finales de abril, el paro nacional, cuyos bloqueos tienen semiparalizada esta industria debido al desabastecimiento de algunos insumos y materias primas.
Se trata de un sector de gran importancia dentro del aparato productivo nacional. De acuerdo con datos de la Encuesta Anual Manufacturera del DANE, en el país más de 164 empresas que forman parte de esta industria generan una cifra superior a los 25.000 empleos directos y su participación en el producto interno bruto (PIB) es del 2,5 % por ser una actividad de importantes encadenamientos.
Camilo Llinás, presidente de Acolfa, sostiene que la conjunción de varios factores adversos tienen en serias dificultades a esta industria. Por un lado, el directivo gremial se queja porque desde inicios de la década pasada “la situación de la industria automotriz colombiana viene sufriendo una pérdida de participación en el mercado local, como consecuencia de la creciente importación de vehículos que se ha venido registrando año tras año en el país”.
Tendencias
La puesta en marcha de tratados de libre comercio con países como México, Brasil, Corea del Sur, Estados Unidos y países de Europa, que son grandes productores de vehículos y sus partes, comenzó a desplazar la producción nacional. “Aprovechando la desgravación de los TLC, esos países han aumentado sus exportaciones de vehículos a Colombia, en detrimento de las finanzas del Estado, del empleo y de la industria local, toda vez que el erario público ha venido dejando de recibir ingresos y las empresas locales, al producir menos, ven reducidas sus ventas, lo que ha afectado tanto sus ingresos como su posibilidad de generar empleo”, aseguró el presidente de Acolfa a través de un comunicado.
Las cifras de participación de mercado que hoy exhiben los vehículos producidos en el país son preocupantes: actualmente menos del 25 % de los vehículos que se venden en territorio nacional son ensamblados localmente. Esto significa que consumen menos piezas, partes y accesorios producidos por compañías colombianas. Llinás se queja de que hace apenas un par de años la participación de vehículos de ensamble nacional era superior al 50 %.
Para terminar de complicar la ya difícil situación económica del sector, el descontento social de este año, que derivó en una convocatoria de paro y los frecuentes bloqueos de las principales vías del país, han causado enormes dificultades “para la movilización de materiales e insumos para la manufactura, así como para el suministro de productos al mercado local y para exportación, llegando incluso a la parálisis de las actividades de las ensambladoras de vehículos y de los autopartistas”, asegura.
Ante esta compleja situación, el dirigente gremial lanzó un llamado de auxilio al Gobierno pidiendo mayor atención a la industria nacional “para que esta genere mayor valor agregado, más empleo formal, calificado y estratégico”.
Entre las medidas que plantean estos productores están la implementación de beneficios similares a los que se aplican a las empresas ubicadas en las zonas francas, el CERT (Certificado de Reembolso Tributario) a las exportaciones y estímulos a las compras de productos colombianos.
Finalmente, los productores de piezas y partes piden que “el Gobierno apoye a la industria nacional para generar empleo”. Un llamado de auxilio que, de ser atendido, permitirá que un número importante de empresas de todos los tamaños y miles de trabajadores garanticen su sostenibilidad.