OPINIÓN
Crisis financiera mundial en el 2023
De acuerdo con el más reciente informe del Banco Central de Rusia, este es un escenario altamente posible. La acumulación de deuda es una bola de nieve que se exacerbó con la pandemia y que al parecer no tiene marcha atrás.
Un interesante estudio ha publicado hace pocos días el Banco Central de Rusia, titulado ‘Las principales directrices de la política monetaria estatal unificada para 2022 y el período 2023 y 2024′. En él se contemplan cuatro escenarios para el corto plazo a nivel mundial, tres de ellos que podrían calificarse como negativos y uno positivo.
Empecemos por las buenas noticias. El mejor de los escenarios hace referencia a la normalización de la política monetaria, dejando de ser expansiva a nivel mundial en líneas generales. En materia de vacunación la mayoría de países cumplirían con sus metas, lo cual aceleraría el retorno a la normalidad.
Desafortunadamente, los otros escenarios son sombríos y preocupantes. En el primero de ellos se prevé una inflación global (глобальная инфляция) provocada por el deterioro de la economía. Asimismo, contempla que se logre sofocar la pandemia sin que esta termine de manera definitiva.
El segundo le apuesta a la intensificación de la proliferación del virus (усиление пандемии), por lo que aumentaría el contagio de manera vertiginosa, afectando seriamente la salud de las economías mundiales y de los habitantes de todo el planeta. Este escenario se presentaría como consecuencia de las nuevas mutaciones de la covid-19 y la resistencia de las nuevas cepas frente a las vacunas.
El tercero, plantea una crisis financiera global (финансовый кризис), pues le apunta a un colapso mundial del sector financiero procedente de la acumulación de deuda que se viene incubando desde hace años, y que se ha exacerbado con la pandemia. Bajo esta premisa las inversiones se verán mermadas, como consecuencia de la inestabilidad del sector financiero. Este sería el peor escenario de todos y es uno muy posible.
Luego de analizar una a una las previsiones del Banco Central de Rusia se concluye que:
1. Las metas de vacunación están lejos de cumplirse en la mayoría de países. Aquellos que tienen suficiente poder adquisitivo han logrado comprar vacunas para todos sus habitantes e incluso donarlas a otros. Sin embargo, este es privilegio exclusivo de las economías más desarrolladas, la realidad de la mayoría de naciones es bastante distinta.
Un modelo construido recientemente por la Unidad de Inteligencia de la revista The Economist, que aun no ha sido publicado pero al que tuve acceso y que será expuesto al público el próximo 9 de septiembre, señala que las demoras en los tiempos de vacunación costarán al mundo US$2.3 trillones entre 2022 y 2025. La inequidad del costo de las vacunas socava la recuperación económica de manera profunda y duradera. Datos disponibles emitidos a finales de julio por parte de el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Universidad de Oxford y la Organización Mundial de la Salud indican que deben tomarse medidas de urgencia para fortalecer los suministros y garantizar que todos los países tengan acceso a las vacunas. Esta problemática dificultaría que el mejor escenario no pueda cumplirse.
2. La inflación está presente en varias economías. Este año en Estados Unidos ha sido del 5,4 % y a pesar de que en julio empezó a frenarse sigue siendo una cifra preocupante. En la Eurozona la tasa de inflación anual subió al 3 %, siendo muy superior al 2 % que tenía como objetivo el Banco Central Europeo. En Colombia la inflación sobrepasó el rango del Banco de la República, llegando a un 4,44 % en lo corrido del año. Esto haría que, de continuarse esta tendencia, el primer escenario negativo sea posible.
3. La intensificación de la pandemia es una preocupación latente, ya que la existencia de nuevas variantes del virus como la delta, la delta plus, la africana y la mu, entre otras, hace que pueda llegar a pensarse que estamos lejos de acabar con la covid-19. A pesar de este panorama, hasta ahora se ha evidenciado que las vacunas son eficaces incluso contra las cepas nuevas, por lo que las probabilidades de que la pandemia se intensifique no son muy altas.
4. La crisis de deuda es una problemática real y muy preocupante. Este escenario es quizás el más grave de todos y está muy cerca de ocurrir, de acuerdo con el Banco Central ruso se prevé que se dé en 2023. La acumulación de deuda desde hace años está creciendo como una bola de nieve con la capacidad de destruir todo lo que encuentre a su paso.
Luego de analizar durante varios años el comportamiento de la economía, puedo afirmar que la crisis de deuda es prácticamente un hecho, que chamuscará la reactivación económica. Los gobiernos del mundo aun pueden tomar medidas para detenerla, no es del todo tarde. Sin embargo, lo más posible es que la crisis mundial de deuda tarde o temprano ocurra. Las personas, hogares, empresas y Estados debemos estar preparados para ello.