La nueva estrategia del Citibank en Colombia

A comienzos de este año se concretó una de las operaciones más esperadas en el sector financiero: la venta por parte del Citibank de su cartera de consumo a Scotiabank Colpatria.

El Citi venía buscando un buen comprador para sus activos en dicho segmento y esa búsqueda se alargó un poco más de lo esperado. Por eso, muchos quedaron sorprendidos por el anuncio y se generaron diversas versiones equivocadas sobre el futuro del Citi en Colombia, país en el que la entidad de origen estadounidense ya completó 102 años.

Es claro que el Citi no se va de Colombia; por el contrario, reenfoque estratégico significa una mayor profundidad de su compromiso con el país. Vale la pena preguntarse cuál es su apuesta futura.

El presidente de la entidad, Álvaro Jaramillo, explicó que el giro estratégico tiene un sentido. "El negocio de banca de consumo viene evolucionando rápidamente y ese cambio presenta exigencias en materia de capital y regulación sumadas al desafío tecnológico. No hay una banca de consumo global, por eso nos enfocamos donde hay escala, posibilidades de crecimiento y así tiene sentido la inversión. Nuestra posición competitiva no justificaba mantener una inversión en este frente, con excepción de México, donde las operaciones de Citi en banca de personas se mantuvieron", explicó el ejecutivo.

Dada esa decisión, el nuevo foco estratégico se centra en cuatro segmentos: clientes corporativos locales, clientes corporativos multinacionales, entidades financieras y Gobierno.

"Trabajamos con clientes que tienen necesidades de conectividad global y con capacidad de operar localmente", comentó Jaramillo. En ese sentido, hay tres líneas de servicios claves para la entidad.

La primera se conoce como treasury and trade services, donde se incluyen todos los servicios de cuentas corrientes, pagos y recaudos, así como los servicios para comercio que consisten en financiación de capital, comercio exterior, manejo de proveedores, carteras y cartas de crédito.

La segunda área de servicios es tesorería, que incluye las operaciones de cambios, derivados y estructuraciones de operaciones financieras.

Finalmente, la entidad seguirá vigente en sus operaciones de créditos en el que este año ha sido actor principal en muchas colocaciones de distintas empresas.

Jaramillo insistió en que el compromiso con Colombia queda reflejado en que hoy no solo cuenta con las operaciones en el segmento empresarial, sino que la entidad tiene un centro de proceso regional con más de 400 empleados donde se consolidan las transacciones que el Citi realiza en otros países de la región.

Jaramillo explicó que ahora la meta es convertirse en el banco corporativo por excelencia y la mejor entidad para sus clientes.

"El enfoque en digitalización nos permite ofrecer nuevas opciones como la eliminación de papel en muchos procesos, por ejemplo en tesorería", comentó el alto ejecutivo.

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Un primer frente en el que la entidad quiere seguirse destacando es en las operaciones de tesorería y derivados, donde ha jugado un papel clave. Por ejemplo, han sido actores de primera línea en el programa de creadores de mercado del gobierno nacional, para profundizar el mercado de capitales con las transacciones de deuda pública. Además, cuenta con una base de inversionistas institucionales a los que les está ofreciendo una gama de productos para tomar riesgos diferentes.

¿Cómo va Colombia?

Jaramillo insistió en señalar que las relaciones del Citi con Colombia son de largo plazo y el interés por el país es hoy más fuerte que nunca. Destaca la magnitud del mercado colombiano, con una población cuyo nivel de educación viene creciendo.

Además, los sectores con potencial son cada vez más como salud, petróleo (donde la recuperación es evidente), minería, comercio, consumo masivo e industria; todos ellos son segmentos destacados.

“Este es cada vez más un país internacional e integrado y ahí se pueden encontrar muchas oportunidades”, comentó.

Señala, por otra parte, que el país ha venido sofisticando su regulación para el sistema financiero. Para él, la evolución del marco regulatorio es positiva, con conceptos muy avanzados y un ente de vigilancia muy fuerte. “El país se ha alineado con los estándares internacionales, lo que es positivo. Vemos a Colombia como una gran oportunidad, pues cada vez tiene más capacidades para procesamiento, hay gente muy calificada e infraestructura disponible. Estamos viendo cómo profundizar procesos de servicio, aumentar nuestra base de clientes multinacionales a los que podemos ofrecer un conocimiento del mercado global”, comentó el directivo.

El Citibank juega un rol clave en el comercio exterior de Colombia, pues es una de las entidades más activas en la liquidación de operaciones de este tipo. Ese es otro de los frentes fuertes en los que la entidad, según Jaramillo, va a seguir sirviendo a sus clientes.

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Una de las más importantes entidades financieras internacionales que hoy opera en Colombia está dando un giro estratégico a su negocio local. Mientras que muchos sectores se siguen destacando, tanto en la industria como en los servicios, el Citibank va buscar oportunidades de crecimiento en los segmentos empresariales que van a seguir impulsando el desarrollo del país. En este frente, el rol de la banca sigue siendo determinante, ya que sus hombros pesa el hecho de mantener abiertos los canales del crédito. Esa es la gran apuesta del Citi.