PODER VALLUNO
La colombiana Supertex conquista el mercado deportivo internacional
Fabricar prendas para clientes como Adidas, Nike, Patagonia y Under Armour es la mejor carta de presentación de Supertex, empresa caleña que se consolida en el exterior. Estos son sus planes.
Supertex se convirtió en uno de los grandes jugadores en el negocio de ropa deportiva. Con 33 años en el mercado, esta empresa –la más grande confeccionista del Valle del Cauca–, es uno de los principales proveedores de la región para las multinacionales Adidas, Nike y Under Armour, entre otras.
Inició operaciones representando a las marcas Adidas y Arena para el mercado nacional, pero pronto se dio cuenta de que la exportación resultaba más interesante y rápidamente le dio un giro al negocio. Hoy, 90% de su producción, que supera los 2 millones de prendas al mes, se va al exterior.
La fabricación de productos de alto desempeño le dio el diferencial que la consolidó como pieza clave en los negocios de las grandes multinacionales de ropa deportiva. Esto fue precisamente lo que le permitió mantenerse en el mercado durante el largo periodo de revaluación que afrontó el país y que generó la desaparición de muchas empresas del sector, dice Eduardo Herrera, su gerente.
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Pero no todas las movidas han sido exitosas para esta compañía. En su plan de expansión y con el fin de aprovechar un programa de ayudas que había puesto en marcha el gobierno de México, en el año 2000 decidió montar una planta de confección en ese país, la cual tuvo que cerrar tres años después.
La dificultad para conseguir mano de obra calificada –por el bajo nivel de desempleo que tenía esa nación en ese momento– y la competencia con otras industrias generó su cierre prematuro.
Una década después y con las firmas estadounidenses como sus principales clientes, Supertex decidió prepararse para aprovechar el TLC que se negociaba con el país norteamericano y montó una planta en Dos Quebradas, Risaralda, para ampliar su capacidad de producción.
También empezó a explorar Centroamérica, un mercado que, a juicio de Herrera, no era fácil, pues ya estos países tenían un TLC con Estados Unidos, lo que había motivado la inversión de empresas norteamericanas en esa región.
Aún así, la compañía decidió ingresar al El Salvador. Dos razones justificaban esta decisión: por un lado, había suficiente mano de obra y, por el otro, estaban dadas las condiciones económicas para un próspero negocio. Fue así como desde hace cinco años empezó a hacer presencia en territorio salvadoreño con una planta en la ciudad de Chalchuapa, con resultados que hoy superan las expectativas.
Proveedor de Nike
La llegada a Centroamérica ha sido una de las mejores decisiones para Supertex. Con las prendas producidas en esta factoría logró convertirse en proveedor de Nike. Ya tenía a Adidas, Under Armour y empezó a trabajar con el líder mundial de prendas deportivas, lo que potencializó la operación en ese país. Hoy cuenta allí con 2.000 colaboradores que producen más de 1,4 millones de prendas al mes, de las cuales unas 800.000 –algo más de 9 millones de prendas al año– son para Nike.
Actualmente, los productos que la empresa le vende a Nike solo se fabrican en la planta de El Salvador, aunque ya las directivas de la multinacional anunciaron una visita a Colombia con el fin de evaluar la posibilidad de que también se les exporte desde el mercado local. Según Herrera, Supertex es el proveedor de Nike de mejor calificación de calidad en la región y el número 11 en el mundo.
El buen momento que vive la confeccionista colombiana en El Salvador le permitió montar, hace un año, una segunda planta en Lourdes, que ya cuenta con más de 500 personas. De igual forma, puso en operación una factoría de estampados y otra de bordado con el fin de manejar una operación más vertical en la cadena productiva.
Herrera precisa que la cifra invertida por la empresa allí no es muy alta, pues el activo más valioso es el know how. El monto destinado en los últimos años a ese mercado es cercano a los US$10 millones.
La verticalidad es uno de los temas clave para la empresa y es precisamente una de sus preocupaciones en Colombia, pues aquí no cuentan con suficiente disponibilidad de materia prima. Por eso, uno de los proyectos para el presente año es iniciar el montaje de una operación textil en el país.
Para lograr este objetivo, la compañía –filial del Grupo Fanalca– está en la búsqueda de un socio inversionista, ya sea en Estados Unidos o en Brasil. El monto requerido para este proyecto es cercano a los US$40 millones, dice Herrera.
El plan es que esta textilera no solo supla las necesidades de Supertex, que sería uno de los clientes, sino atender las necesidades principalmente del mercado de exportación.
Por otro lado, la compañía tiene la licencia para Colombia y la región andina de Arena. Esto le permite producir la marca para el mercado colombiano y exportarla a Ecuador, Perú, Venezuela y Bolivia. Sin embargo, en este momento solo trabaja en los dos primeros mercados. Allí llega de forma directa con su propia red comercial.
En la marca Arena produce y comercializa trajes de baño y deportivos, y está abriendo una cadena de retail propia que ya cuenta con 12 almacenes en Cali y 5 en Bogotá. El objetivo es llegar a la Costa y a Medellín, al igual que llevar estos establecimientos a Perú y Ecuador.
En las dos plantas que tiene en Colombia, donde genera más de 1.000 empleos, Supertex produce alrededor de 800.000 prendas mensuales que provee no solo para Arena, sino también a Under Armour, Adidas, Patagonia y Zumba. En El Salvador les fabrica a Patagonia, Adidas y Nike, principalmente.
Los planes de la empresa apuntan a lograr un crecimiento de 20% para este año en Colombia y 60% en El Salvador. Con estas proyecciones y con los resultados que ya tiene, la firma se consolida como una de las grandes exportadoras de confección y saca provecho de la devaluación.
Negocio multinivel
Las metas de crecimiento y diversificación de esta firma vallecaucana no paran. A finales del año pasado se alió con socios caleños y paisas para montar un proyecto de ventas por catálogo, en el que ya cuenta con 2.000 emprendedoras. “La proyección es terminar el año con 8.000 emprendedoras, utilizando el conocimiento que tiene la empresa en fabricación y a futuro tener por lo menos nueve o 10 regionales en ciudades intermedias”, manifiesta Eduardo Herrera. Esta línea de negocio se centra en la producción y comercialización de ropa exterior masculina y femenina, para lo cual comenzó a trabajar con talleres satélite especializados en la confección de prendas para este modelo de negocio. “Son unidades productivas pequeñas que tienen gran habilidad de hacer productos en muy corto plazo”, concluye.