Nadie ha calculado cuánto puede valer la cruzada emprendida por Estados Unidos para combatir al Estado Islámico a través de una gran coalición internacional que ya cuenta con el apoyo de más de 30 países. La iniciativa podría acabar poniendo 5.000 militares sobre el terreno para finales de año, sin embargo, de plata nadie habla. De momento, la estrategia propuesta por el presidente Barack Obama se centrará en la extensión de los bombardeos selectivos, iniciados en Irak, a Siria, donde el grupo es más fuerte, así como en armar y entrenar a los rebeldes sirios moderados. A pesar de esta claridad en la estrategia militar, se desconoce el impacto económico no solo en la región sino para los países involucrados. ¡A sacar cuentas!