Misteriosa desaparición de una profesora y una estudiante de la Universidad de La Salle en Sibaté

Desde la mañana de este sábado nadie sabe del paradero de la estudiante de Medicina Veterinaria, Johanna Marcela Rincón y la egresada de la Universidad de La Salle, Aleida Garzon, quienes se encontraban en el municipio de Sibaté visitando una finca de la zona, en la que Johana realizaba sus prácticas profesionales. 

De acuerdo con Milton Rincón, el padre de la estudiante de décimo semestre, su hija llevaba cuatro meses viajando a este municipio, y como era usual, salió de su casa a las seis de la mañana para tomar el bus hacia Sibaté. Sin embargo, este fin de semana, Johana no regresó a casa. “Cuando llegó a Sibaté, creo que a las ocho de la mañana, me llamó y me dijo que estaba bien. Pero desde ese momento no volvía a saber nada más de ella”, explicó Rincón a SEMANA.

Rincón vajó hasta Sibaté para dar con el paradero de su hija, pero lo único que supo es que Johana se encontró con su jefe de prácticas, Aleida Garzón, quien iba en su Toyota Hilux, blanca de placas CNC 313. Al parecer, la estudiante y la profesora fueron solicitadas para revisar a un animal en una finca por la vereda Alto del Charco. 

“A pesar de que mi niña tiene 23 años, ella siempre pide permiso si se va a quedar en otro lugar. Esperamos que las autoridades nos digan qué sucedió”, aseveró Rincón. 

SEMANA intentó comunicarse con los familiares de la profesora Aleida Garzón, pero no ha sido posible hablar con ellos. Por ahora, algunos amigos también denunciaron por redes sociales su desaparición.

Esta mañana, el coronel Necton Lincon Borja Miranda, comandante de la Policía de Cundinamarca, aseguró que están realizando una búsqueda por las áreas rurales de esta zona, en especial en la carretera que de Sibaté conduce a Fusagasugá. También dijo que ofrecieron una recompensa de hasta 20 millones de pesos para quien ofrezca información que les permita ubicar a las dos mujeres. 

Entre tanto, el vicerrector de Promoción y Desarrollo Humano de La Salle, Hno. Diego Andrés Mora, expresó que desde el primer momento la universidad se puso en contacto con las dos familias y la información que tienen es la que ya se conoce a través de medios de comunicación. “En Colombia lo más importante es el cuidado de la vida, esperamos que las dos regresen a sus hogares sanas y salvas”.