Desplome en las aulas: ¿cuánto cayeron las matrículas en las universidades?

Cuando el 16 de marzo el Gobierno decidió suspender las clases presenciales, cerca de 40 universidades enviaron una carta al presidente Iván Duque para advertirle que la matrícula podría caer hasta un 50 por ciento. Luego, la Asociación Colombiana de Universidades (Ascún), que reúne más de 80 instituciones, alertó que la deserción para el segundo semestre estaría entre 23 y 25 por ciento, con un agravante: podría mantenerse en 2021 en un 20 por ciento.

Esta semana, la plataforma de empleo juvenil, WorkUniversity, reveló una encuesta en la que indagó a 1.500 estudiantes universitarios, técnicos y tecnólogos sobre su decisión de seguir o no estudiando en medio de la pandemia.

De acuerdo con los resultados del sondeo, el 24 por ciento de los consultados respondió que abandonará las aulas a partir de agosto del presente año, mientras que un 76 por ciento sí se matriculará.

Del total de estudiantes que por ahora no avanzarán en sus estudios, el 62,5 por ciento no lo hará por temas económicos; 20,8 por ciento, porque no quiere ver sus clases de manera virtual, así sea por medio del modelo de alternancia que propone el Gobierno nacional.

En un segundo renglón, un 12,5 por ciento de los jóvenes que no continuarán dijo que es porque no cuenta con los suficientes recursos, como internet o equipos de cómputo, para seguir su proceso académico de manera remota; y el 4,2 por ciento, porque aún no ha podido conseguir su práctica, debido a la difícil situación económica que enfrentan las empresas por causa de la pandemia y que ha generado que se cancelen este tipo de contratos de aprendizaje.

“El 80 por ciento de los encuestados, pese a que no se matricularán este semestre, señalaron que si lo harán en enero de 2021; sin embargo, preocupa el 20 por ciento que afirmó que no continuará con sus estudios de manera indefinida”, señaló Sebastián Obregón, director de WorkUniversity y quien estuvo al frente del sondeo.

De acuerdo con el informe, la deserción universitaria más alta (58 por ciento) se presentará entre el primer y tercer semestre; seguida del cuarto al sexto semestre (32 por ciento); y de séptimo en adelante (10 por ciento).

Con relación a las edades, los estudiantes que están entre los 21 a 23 años, serán los que más abandonarán las aulas, con un 40,5 por ciento; luego vienen los de 18 a 20, con 32,5 por ciento; y finalizan los de 24 a 26, con 27 por ciento. Respecto a la jornada de estudios, el mayor nivel de deserción se presentará en la diurna, con 65,6 por ciento; mientras que, en la nocturna, será del 34,4 por ciento.

Muchos han reclamado descuentos en el costo de matrículas debido al paso a la virtualidad. Algunas instituciones lo han hecho, pero otras han mantenido sus tarifas. El rector de la Universidad Javeriana, padre Jorge Humberto Peláez, aclaró que los costos se mantendrán dado que no se puede decir que la educación virtual sea más barata. “Hemos seguido pagando la totalidad de la nómina; bajar las matrículas significaría recortar personal y proyectos de infraestructura, desconociendo la inversión que estamos haciendo para brindar una virtualidad con los más altos estándares de calidad. Las cuentas de las universidades son transparentes”, dice.

A pesar de las circunstancias, la invitación de los diferentes actores del sistema es a buscar alternativas. El viceministro de Educación Superior, Luis Fernando Pérez, aseguró que dejar la universidad por la coyuntura podría crear el riesgo de no volver a engancharse. “El costo social de la deserción es muy alto, dos o tres semestres después es difícil que regrese. El costo en el futuro de ese joven será irrecuperable”.