EDUCACIÓN
Calificaciones robadas en China: cómo cambió el destino de muchos
Puntajes buenos en el examen de estado son asignados de manera fraudulenta a otras personas, que acceden con ello a la universidad.
Casi 11 millones de estudiantes de secundaria chinos acaban de finalizar las difíciles pruebas del "gaokao". El examen de toda una vida, en particular para los más modestos, puesto que determina su posible ingreso a la enseñanza superior.
Solamente aquellos estudiantes con calificaciones muy altas pueden ingresar a las mejores universidades.
No obstante, tras una investigación durante dos años, las autoridades de la provincia de Shandong (este) descubrieron que más de 280 personas se encontraban involucradas en el robo de notas de candidatos a pasar el bachillerato.
En China, donde la prueba es considerada el principal ascensor social, este anuncio ha provocado una ola de repulsa. Los diputados, en particular, instaron a actuar con mano firme contra la corrupción en este ámbito.
El fraude es un problema frecuente en este país con 1.400 millones de habitantes, en el cual la competencia escolar es despiadada, la magnitud del escándalo ocurrido en Shandong ha causado un verdadero ‘shock‘.
Vendedora
La mayoría de los casos son anteriores a 2006. Para las autoridades, el origen del fraude se encuentra en los métodos defectuosos para la verificación de las identidades en la época en que fueron posibles estos hechos, que cambió el destino a muchos jóvenes.
Hasta ahora, 46 personas han sido sancionadas, de acuerdo al gobierno provincial, sin brindar detalles sobre la identidad de los timadores.
Una de las víctimas más mediáticas es Gou Jing, actualmente sobre los 40 años. La hija de un exprofesor de secundaria suyo usurpó su identidad en 1997 para sacar provecho de su elevado puntaje.
En aquella época, Gou, una excelente estudiante, recibió calificaciones decepcionantes. Sorprendida, vio entonces esfumarse sus esperanzas de alcanzar una educación superior.
Actualmente, es vendedora de ropa para niños online. En cambio, la hija de su exprofesor tuvo un destino diferente al suyo: pudo estudiar en una universidad de Pekín y se convirtió en docente. Pero, al estallar este escándalo, le fue retirado su diploma y despedida, de acuerdo a las autoridades.
‘Inconcebible‘
"En aquella época, no tenía la menor idea ni la experiencia como para sospechar que hubiera personas que manipularan las calificaciones del bachillerato. Para mí, era algo inconcebible", declaró Gou Jing a la cadena Phoenix TV.
Su exprofesor, quien asignó a su hija sus notas, le envió una carta pidiéndole disculpas en 2003, señaló. Pero este caso tardó más de 15 años en ser dado a conocer públicamente.
"Toda la malversación y corrupción que envolvieron este caso de fraude también deben ser objeto de una investigación", continuó Gou Jing. "Si no se revelan todos los eslabones de esta cadena, otras personas podrán continuar siendo víctimas de estos fraudes", añadió.
En la red social Weibo hashtags vinculados a este escándalo han tenido más de mil millones de visitas. "La justicia que llega demasiado tarde no es justicia", destacó un usuario. "Si este escándalo no hubiera llegado a a la red Weibo, ¿creen que (las autoridades) se habrían tomado la molestia de abrir una investigación?", subrayó.