EDUCACIÓN

¿Qué es el ciberacoso y cómo detenerlo?

El anonimato, la facilidad de acceso y abundancia de interacciones online puede provocar que las personas que acosan y hieren a otros se sientan alentadas a hacerlo.

29 de abril de 2021
A diferencia del bullying en mundo real, el acoso cibernético puede ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento, a través de teléfonos, computadoras y consolas de juegos.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) el acoso escolar es un problema que afecta a uno de cada tres estudiantes en todo el mundo. Un tercio de los alumnos y alumnas de entre 8 y 24 años (el 32 %) ha sido intimidado psicológicamente por sus compañeros en la escuela al menos una vez.

A través del tiempo, el bullying ha evolucionado adaptándose a los cambios del mundo y, desafortunadamente, la tecnología ahora juega un rol importante en varias formas de acoso entre jóvenes.

Por este motivo, ESET, compañía especializada en detección proactiva de amenazas en la red, a través de su iniciativa Digipadres, explica los conceptos más importantes del ciberacoso: qué es, cómo se manifiesta, por qué es importante conocerlo y, sobre todo, cómo detenerlo.

A diferencia del bullying en mundo real, el acoso cibernético puede ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento, a través de teléfonos, computadoras y consolas de juegos. El anonimato, la facilidad de acceso y abundancia de interacciones online puede provocar que las personas que acosan y hieren a otros se sientan alentadas a hacerlo.

“Ahora que la virtualidad forma una parte crucial en nuestras vidas, es de suma importancia entender cuáles son las formas más comunes de ciberacoso para poder combatirlas y todos juntos ayudar a mantener seguros a los jóvenes en Internet”, comenta Camilo Gutiérrez, jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.

El ciberacoso o cyberbullying es definido por la ONU como “acoso o intimidación por medio de las tecnologías digitales que busca atemorizar, enfadar o humillar a otras personas”.

Que el bullying ocurra en los centros educativos, y que en algunas ocasiones los profesores no hagan nada por miedo o indiferencia, es peligroso.

Este comportamiento esta presente en todas las redes sociales (incluyendo Facebook, Twitter, Reddit e Instagram), en las plataformas de mensajería como WhatsApp, las plataformas de juegos y en múltiples sitios de Internet.

La difusión de fotografías sin consentimiento de su protagonista, mensajes hirientes o amenazas a través de las plataformas de mensajería, hacerse pasar por otra persona y enviar mensajes agresivos desde esa cuenta falsa son solo algunas de las conductas de esta problemática.

Con todas estas herramientas disponibles, el ciberacoso puede esparcirse rápidamente, con bullies acosando a sus víctimas a través de múltiples plataformas, dejándolos con la sensación de que no hay escapatoria posible.

Puede ser difícil distinguir las problemáticas adolescentes de los síntomas del ciberacoso, por lo que se recomienda prestar atención a cualquier sospecha para detectar y detener el ciberacoso. Estas señales pueden ser claros indicadores de bullying:

  • Cambios físicos visibles
  • Repentinos cambios de humor o pérdida de interés en actividades habituales
  • Eliminación de sus cuentas de redes sociales
  • Aislamiento social anormal
  • Pérdida o extravío de objetos en situaciones extrañas

Si un niño o niña manifiesta estos síntomas, vale la pena sentarse y preguntarles si sienten que están siendo acosados, ya sea vía Internet o en la vida real. Es importante asegurarles que pueden confiar sin sentirse amenazados o juzgados, y que se estará ahí para ayudarlo/a a resolver cualquier problema que esté experimentando.

Una vez que se identifique el problema, se puede acercar consejos claros sobre cómo solucionarlo. En el caso de un bully virtual, por ejemplo, bloqueando y reportando el contenido. En segundo lugar, concientizar sobre la importancia de la privacidad, explicar por qué no deberían hablar con usuarios que no conocen en la vida real y cómo su perfil debería ser solo visible para sus amigos.

Una gran opción para el cuidado de los niños son las aplicaciones de control parental, las cuales permiten filtrar el contenido que los niños pueden ver, denegando el acceso a imágenes y videos inapropiados que podrían ser enviados por acosadores cibernéticos.

También permiten filtrar las aplicaciones según la edad del niño. Además, el control de uso restringe la cantidad de tiempo que tienen los niños para usar sus dispositivos, lo que puede ser un elemento clave para mitigar serias amenazas cibernéticas. Limitar el tiempo de uso puede ayudar a prevenir la adicción a Internet, brindar a los jóvenes una perspectiva más amplia y evitar que se sientan abrumados si se enfrentan al ciberacoso.

Puede encontrar alternativas de este tipo en el sitio web de Digipadres: https://digipadres.com/