¿Qué es lo que más le preocupa a los jóvenes durante la pandemia?

Muchos jóvenes que en otras circunstancias deberían estar viviendo los momentos más emocionantes de su vida ahora están encerrados en sus casas y con muchas restricciones. Buscando conocer el impacto de esta situación en este sector de la población, Profamilia realizó un estudio en el que indagó sobre sus necesidades, experiencias y prácticas resilientes.

El informe, financiado por la Alianza para la Salud de la Madre, el Recién Nacido y el Niño de la Organización Mundial de la Salud, reveló que las mayores preocupaciones que han aquejado a los jóvenes entre 18 y 29 años, en el marco de la pandemia, están relacionadas con la imposibilidad para recibir atención médica por enfermedades distintas al coronavirus, el padecimiento de ansiedad o depresión, la seguridad alimentaria y la baja empleabilidad.   

A través del análisis de 1.287 encuestas se encontró que: el 87 por ciento de las mujeres y el 75 por ciento de los hombres manifestaron estar preocupados porque alguien de la familia pueda tener una emergencia de salud y no reciba atención médica oportuna.

En cuanto a la salud mental, el 67 por ciento de las mujeres y el 56 por ciento de los hombres están preocupados por sufrir ansiedad o depresión. 

Para Diana Zuleta, psicóloga especializada en esta generación, es claro que la pandemia está generando cuadros parecidos a los depresivos: "Están tristes, irritables, apáticos, no se están arreglando. Algunos también presentan cuadros de ansiedad importantes por la incertidumbre que es tal vez el sentimiento que más ansiedad genera porque uno siente que no tiene la vida bajo su control". 

Con respecto a empleabilidad, la encuesta reveló que el 23 por ciento de las mujeres y el 21 por ciento de los hombres que estaban empleados perdieron sus trabajos durante la pandemia. Adicionalmente, el no contar con computadores o acceso a internet para recibir y participar activamente de sus clases virtuales también es una de las mayores preocupaciones identificadas por el estudio, afectando al 11 por ciento de las mujeres y al 13 por ciento de los hombres consultados.  

La pandemia, según el estudio, también ha impactado en la calidad de la comida, en algunos casos por falta de recursos, adolescentes y mujeres jóvenes dejaron de comer carne y otros alimentos ricos en proteínas o tuvieron que reducir las porciones para asegurar que los menores pudieran alimentarse.  

Así mismo, pusieron en evidencia las barreras en el acceso a servicios de salud y salud sexual y reproductiva, al percibir que las instituciones prestadoras han limitado la atención a urgencias, afectando la prestación de consultas para especialidades como la ginecología y la endocrinología.  

"Este estudio, además de hacer un acercamiento a la problemática, avanza en sugerir rutas de acción basadas en las experiencias vividas por las mujeres y los hombres entrevistados para hacer frente a las consecuencias, a corto y largo plazo, del estigma y la discriminación, la violencia contra la mujer y las repercusiones socioeconómicas en las poblaciones vulnerables", explicó Marta Royo, Directora Ejecutiva de Profamilia.