NACIÓN

Sin celulares, sin minifaldas y a colaborar con el aseo: medidas impuestas por un rector del Huila a sus estudiantes

En la institución educativa Roberto Suaza Marquínez, a partir de este año, se les prohibió a los alumnos el ingreso de celulares. A las estudiantes se les restringió el uso de minifalda y a los hombres, de aretes.

28 de enero de 2020
De acuerdo con el rector, las restricciones como el uso del celular no son nuevas, pues se encuentran descritas en el manual de convivencia de la institución. | Foto: Archivo particular

En el colegio del municipio de Hobo, Huila, se tomaron medidas que resultaron polémicas. A los casi 1.500 estudiantes que hacen parte de las seis sedes del colegio Roberto Suaza Marquínez les tocará acatar las normativas que entraron en vigencia desde el día de ayer.  

Una de las decisiones que generó mayor controversia fue la de restringir el uso de celulares al interior de la institución. Para William López, rector del colegio, “son aparatos inteligentes que no ayudan al desarrollo de las habilidades mentales”

Esta medida pone nuevamente sobre la mesa el debate de si se deberían prohibir los celulares en el aula de clase. El Congreso ha discutido un proyecto de ley para prohibir los celulares, con el fin de que los alumnos mejoren sus condiciones académicas y eviten distracciones, en conformidad con una tendencia mundial que busca reglamentar el uso de estos dispositivos electrónicos.

Francia, por ejemplo, fue el primer país en aprobar una ley que restringe el uso de los dispositivos en los salones de clase. Esta medida que busca ser implementada en Colombia, entró en vigencia en el país europeo a principios del año escolar 2018-2019. Otro de los países que tomó medidas con respecto a los dispositivos fue Australia. En el estado de Victoria, con el fin de evitar el acoso escolar y las continuas distracciones, se prohibió el uso de celulares en las aulas. A partir de este año, los estudiantes deberán dejar sus celulares en un casillero y recogerlo al final de la jornada. 

En su momento, la iniciativa del proyecto de ley fue impulsada por el legislador Rodrigo Rojas, quien logró que avanzara en los dos primeros debates. Sus argumentos se basaron en estudios científicos que corroboraban el impacto negativo que tienen los dispositivos en el aprendizaje de los alumnos. 

“En lo que se refiere al desarrollo educativo de nuestros niños, el London School of Economics hizo un estudio donde demostró que niños que han sido sometidos a esta restricción del uso de dispositivos en sus escuelas mejoraron el rendimiento en cerca del 7% frente a otros que sí utilizaban sus celulares”, explicó Rojas. 

Los estudios a nivel internacional también han añadido al debate los argumentos que instituciones y países han usado para tomar medidas en contras de su uso en los espacios académicos. El National Institute of Health de Estados Unidos, publicó en el 2018 un estudio que advierte que los menores que hacen uso de pantallas más de siete horas al día presentan una reconfiguración de la estructura del cerebro, una especie de adelgazamiento de la corteza del mismo.  

Para los padres de familia de los estudiantes en el municipio se trata de una medida positiva. Señalan que sus hijos se distraen en continuas ocasiones con los dispositivos y que no obedecen a sus docentes, por lo que la decisión permitirá un cambio positivo en su proceso de aprendizaje. Algunos estudiantes también han recibido la decisión con buenos aires. Como explicó una de las alumnas, la restricción le ayudará a mantenerse concentrada en sus clases, ya que el celular contribuía a su dispersión. 

Otra de las medidas fue la prohibición del uso de minifaldas en las niñas. Para el rector, las niñas deben utilizar una falda con las medidas exactas, “no una minifalda ni una maxifalda”.  

López también aprovechó para decir que busca que los estudiantes poco a poco comiencen a contribuir con el aseo de la institución. Según explica, se trata de un control disciplinario para que los estudiantes sean mejores ciudadanos.