El duro debate en Estados Unidos que enfrentó a Duque y Petro

El primer debate presidencial en el que Iván Duque y Gustavo Petro se enfrentaron en un cara a cara se dio a 4.000 kilómetros de Colombia. Quizás por eso, la caldeada conversación que tuvieron entre los dos, en la Universidad de Columbia en Nueva York, pasó casi desapercibida. En el encuentro, al que también asistió Humberto de la Calle, se dió quizás el mayor contrapunteo entre ambos en los últimos meses.

La conversación comenzó con una seguidilla de preguntas programáticas sobre las propuestas para ayudar a los colombianos que viven en el exterior, la relación de Colombia con Estados Unidos en tiempos de Trump, la migración de venezolanos y la reforma a la justicia, en la que Duque propuso unificar las cortes. Sin embargo, el debate se elevó de tono cuando llegó un punto controversial: el trino del expresidente Álvaro Uribe contra Daniel Coronell. En este, el expresidente había asegurado que si Duque llegara a la presidencia, las licitaciones de los espacios de televisión se manejarían con "transparencia". La afirmación levantó una enorme polvareda pues por un lado, Uribe hablaba en nombre del candidato y por otro sugería que podría quitar la concesión de Noticias Uno. 

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El candidato del uribismo contestó de manera parca y reiteró que él es un "defensor de la de la libertad de prensa". En ese momento, De la Calle lo cuestionó: “¿Por qué el doctor Uribe anuncia cual va a ser su comportamiento desde la Presidencia de la República? ¿Usted cómo valora esa afirmación?”. Duque respondíó que él no es un “interprete de trinos”.

Petro aprovechó ese momento para también increpar a Duque. “Entonces la pregunta es: si (Uribe) lleva 16 años pensando que puede gobernar por interpuesta persona a uno de los cuales llamó traidor, ¿usted sería un traidor en caso de no hacerle caso en su insinuación de cerrar el canal de Daniel Coronell?”.

Desde ese momento, Petro enfocó su discurso en el uribismo. Habló de los falsos positivos y de las violaciones a los derechos humanos que le adjudican a ese gobierno.  Frente a esas afirmación, Duque también contestó. De los falsos positivos, aseguró que todos los miembros de las Fuerzas Militares que hayan deshonrado el uniforme merecen una sanción severa. Después, le pidió a Petro hablar con evidencias y no “atacar al presidente Uribe para ganarse aplausos en un debate”.

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En el intermedio de las preguntas de los moderadores que tenían planeada una agenda temática sobre el sistema de salud, el medioambiente y la economía, los dos candidatos aprovechaban para contestarse. En ese vaivén Petro le dijo a Duque que cuando su padre, Iván Duque Escobar, era gobernante él había sido torturado por ese gobierno, achacándole parte de la responsabilidad de ese hecho al entonces ministro de Minas y Energía, quien falleció hace dos años.

“Hablar de algo cuando yo tenía 6 años es un ataque bajo. Tildar a mi padre o insinuar que mi padre fuera un torturador. No doctor Petro, no acuda a ese tipo de prácticas porque mi padre fue un hombre honorable”, respondió el candidato con contundencia.

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Petro no calló y volvió a insistir en la idea de la tortura. “No soy bajo porque me torturaron (…) usted trajo a colación mi pasado y pensó que yo había entrado a la violencia porque sí. No, nos llevaron a la violencia gobiernos como este, al cual hay que perdonar pero evaluar históricamente”, dijo Petro. 

El debate se dio justo la semana en que tres encuestas le otorgaron a Duque el primer lugar en intención de voto. En la última encuesta de Invamer, el candidato pasó de 9,2 por ciento a 45,9, una disparada poco común con la que se apoderó del liderato de la carrera. Petro subió también, pero quedó en el segundo lugar. Todavía quedan dos meses y los debates presidenciales, como los conocen los colombianos, aún no han comenzado. Este encuentro es una buena muestra de lo que podría venir.