POLÍTICA
La receta de los candidatos frente a los líos de Bogotá
Bogotá está embarcada en un plan de megaobras que necesitan del apoyo del gobierno nacional. Adolece de problemas de movilidad, seguridad y desempleo, y hay debates sobre qué hacer con el medioambiente. SEMANA consultó a los aspirantes a la Presidencia sobre estos temas.
Movilidad: se aseguraría de que los recursos a los que la Nación se comprometió para financiar la primera línea del metro de Bogotá lleguen al Distrito. Además, apoyaría las construcciones de otras líneas subterráneas, elevadas y a superficie, articuladas a un TransMilenio con más cobertura y mejor calidad. Priorizaría la construcción de los 266 kilómetros de troncal que hacen falta en este sistema. La movilidad en la ciudad debe ser multimodal, donde el metro, el SITP, TransMilenio, la bicicleta, el taxi, las motos y los vehículos particulares tengan la infraestructura adecuada para operar.
Seguridad: lideraría personalmente los consejos de seguridad con la ciudadanía. La lucha contra el microtráfico sería su prioridad, así como desmantelar las organizaciones criminales dedicadas al hurto a personas. Bogotá tiene más de 350.000 consumidores de droga, por ello buscaría la prohibición de la dosis mínima: a quien porte droga en espacio público le será decomisada, al drogadicto buscaría rehabilitarlo; pero al jíbaro y al narcotraficante los llevaría a la cárcel. Endurecería las penas y castigaría ejemplarmente la reincidencia. Incrementaría el pie de fuerza por encima de los 300 policías por cada 100.000 habitantes. Y haría inversiones en cámaras, sensores de disparo y botones de pánico, para que la ciudad esté a la altura de las grandes ciudades del mundo en tecnología en vigilancia.
Ambiente: habría descuentos para vehículos eléctricos que no contaminen. Haría de los parques cinturones verdes interconectados en la ciudad para que no solo sean un pulmón para Bogotá, sino un espacio de distracción e integración para la ciudadanía.
Empleo: reduciría impuestos y mejoraría salarios para reactivar la economía. Prefiere empresarios contratando y generando empleos de calidad, bien remunerados que pagando impuestos elevados que los ahoguen y limiten la competitividad y la generación de empleo. Fomentaría también la economía naranja que generaría nuevas oportunidades laborales, capitales e inversiones importantes en la ciudad.
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Movilidad: reversaría el metro elevado y le daría continuidad al subterráneo que se propuso en su gobierno. Aunque el gobierno actual y el Concejo de Bogotá ya se comprometieron con el dinero para la realización de esta obra, desde su campaña se asegura que eso se podría retroceder porque a la fecha no se han conocido los estudios de factibilidad e ingeniería a detalle. Por la misma razón, otra de las obras que se detendría sería la de la troncal de TransMilenio por la Séptima. Priorizaría el transporte de energías limpias y además concedería subsidios de transporte para las personas de los estratos más bajos y que viven en la periferia.
Seguridad: según el candidato, la única forma para disminuir la inseguridad es a través de la reducción de la desigualdad. Esto se logra con el fortalecimiento de la educación. Así, los jóvenes no serían presa del microtráfico y las bandas delincuenciales.
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Ambiente: la apuesta mayor en Bogotá sería proteger la reserva Van der Hammen e impedir que sea intervenida. También buscaría comprar nuevos predios para el parque natural. Y habría un esfuerzo por desarrollar plantas de tratamiento de los residuos sólidos de Bogotá.
Empleo: el empleo y la disminución de la pobreza también se enfrentarían con la reducción de la desigualdad. Por eso llevaría salud a los territorios periféricos, haría mayores campañas para prevenir el embarazo adolescente y se aseguraría de que todos los niños tuvieran alimentación.
Movilidad: apoyaría la primera línea de metro elevado, pues considera que es un compromiso del gobierno nacional que debe ser respetado. En cuanto al proyecto de TransMilenio por la Séptima, considera que no es la opción, teniendo en cuenta que se trata de una vía emblemática. El sistema de transporte masivo debería incorporar una intervención urbanística con tecnologías sostenibles; con todo el rigor técnico y respetando la autonomía local liderarían la discusión.
Seguridad: aumentaría el pie de fuerza de la Policía en la capital. También habría mayores esfuerzos por aumentar las capacidades técnicas y operativas de todos los involucrados en operativos de captura y judicialización. Para enfrentar la inseguridad se enfocaría en la educación para impedir la entrada de los jóvenes al mundo de la criminalidad.
Ambiente: una de sus prioridades ambientales en la ciudad sería proteger la reserva Van der Hammen y desarrollar su potencial de parque urbano que se convierta en un referente incluso para América Latina. Su gran apuesta es desarrollar una agenda de innovación científica para promover conocimiento, conservación y el uso de la biodiversidad.
Empleo: su reto es generar 1,5 millones de empleos durante los cuatro años de gobierno. Empezaría por un plan de reactivación en los sectores que más jalonan empleos: infraestructura vial y educativa, turismo y ecoturismo, vivienda. Apoyaría las micro, pequeñas y medianas empresas que generan el 80 por ciento de los empleos, con un tratamiento tributario especial, reducción de trámites y la creación de un ventanilla única para facilitar la interacción con el gobierno. En la ciudad impulsarán centros de emprendimiento zonal, especialmente en las zonas más vulnerables de la capital.
Movilidad: garantizaría la construcción del metro de Bogotá, como eje y complemento al sistema de movilidad urbana. Apoyaría un sistema de transporte eficiente, sostenible y multimodal e impulsaría la infraestructura requerida para mejorar la logística de las empresas y la competitividad regional.
Seguridad: se aumentaría el pie de fuerza de la Policía y se mejoraría su efectividad. Eliminaría el Inpec y le entregaría sus funciones a la Policía Nacional. Trasladaría las cárceles Modelo y el Buen Pastor, y desarrollaría proyectos de renovación urbanística en estos terrenos. Así mismo, apoyaría la lucha contra la inseguridad en TransMilenio, implementaría mecanismos jurídicos para reducir los robos, en especial el de los celulares. Y se desarrollarán campañas contra el microtráfico en toda la ciudad.
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Ambiente: aseguraría la provisión de agua para Bogotá y la región en el mediano y largo plazo. Mitigaría los riesgos del cambio climático, velando por un aire puro para los capitalinos. Conservaría los cerros orientales, como fundamento de la sostenibilidad ambiental, económica y social de la ciudad. Y promovería una cultura de reciclaje y aprovechamiento de los residuos.
Empleo: apoyaría la creación y la sostenibilidad de las empresas en la formalidad. Fortalecería la productividad de las compañías con innovación y conocimiento. Y ampliaría las oportunidades de formación para los bogotanos.
Movilidad: el metro elevado es un proyecto que debe ejecutarse de una vez por todas. Con respecto al TransMilenio por la Séptima, no considera que sea la mejor solución. Por eso, invita al alcalde Peñalosa a considerar otras alternativas antes de comenzar su ejecución.
Seguridad: en la capital hay 238 policías por cada 100.000 habitantes, muy por debajo de la cifra recomendada por la ONU, que es de 300. En este sentido, se aumentaría el pie de fuerza, se daría apoyo a los alcaldes para que hagan un seguimiento permanente y exhaustivo del comportamiento del delito. Además, se crearían 5.000 nuevos cargos de comisarios y subcomisarios civiles de Policía, que estarán dotados de herramientas tecnológicas de comunicación e información, aunque no dispongan de armas.
Ambiente: su compromiso empieza con la revitalización y protección de la reserva Van der Hammen. Recuperaría la cuenca del río Bogotá y los humedales de la Conejera y Torca-Guaymaral. Además, pondría en marcha la transición hacia la electrificación del transporte público en Bogotá como un paso necesario hacia nuestro compromiso con el marco de la COP21. Y daría prioridad a Bogotá para disminuir la producción de residuos y aumentar la cantidad de material reciclado.
Empleo: dos de sus programas bandera para combatir el desempleo son el Servicio Social Remunerado (orientado a jóvenes profesionales desempleados) y las Brigadas Sociales (orientado a poblaciones consideradas inempleables); tendrán las zonas marginadas de Bogotá como uno de sus más importantes puntos focales. Su meta para estas dos poblaciones específicas es crear 100.000 empleos en los cuatro años de gobierno con estos dos programas.