Motola es un elefante asiático que ha vuelto a caminar gracias a una nueva prótesis. En 1999 este animal ayudaba a los madereros a arrastrar madera, hasta que pisó una mina antipersonal en la frontera entre Birmania y Tailandia, donde perdió parte de su pata delantera izquierda.Tanto Motola como Mosha, otro elefante, perdieron sus piernas cuando todavía eran pequeños y ha tenido que usar varias prótesis que se han ido ajustando a medida que se han hecho más grandes. Cuando sufrieron el accidente cada uno pesaba alrededor de 600 kilos, pero ahora cada uno pesa más de dos toneladas.Los cirujanos de la Fundación de Amigos de los Elefantes Asiáticos en Lampang (Thailandia), donde se trataron los dos elefantes, han asegurado que cuando el animal crece es necesario cambiar la prótesis porque de lo contrario puede sufrir daños como curvaturas en la columna y esto podría producir la muerte.La región fronteriza entre Birmania y Tailandia contiene numerosas minas antipersonales que quedaron de los enfrentamientos entre los rebeldes de minorías étnicas y el ejército birmano.La población de elefantes asiáticos se ha reducido a 50.000, debido a la caza furtiva y la pérdida de hábitat.