El emprendimiento paisa que prueba que el teletrabajo sí funciona

Las oficinas siempre serán consideradas por muchos el espacio donde debe funcionar una empresa. Sin embargo, el ecosistema emprendedor está revolucionando este concepto pues muchas nuevas compañías están apostando por el home office o teletrabajo. 

Tal es el caso de Alegra, un emprendimiento 100% colombiano que ofrece un sistema de gestión empresarial para pequeñas y medianas empresas. Esta compañía ha logrado que más del 100% de su fuerza laboral realice sus actividades sin estar concentrados en un solo lugar físico. 

De acuerdo con Jorge Soto, cofundador y CEO de este emprendimiento, este modelo les ha permitido mejorar sus índices de productividad y encontrar el mejor talento no solo en Colombia sino a nivel mundial. “Más que como empleados nosotros vemos a nuestro equipo como colaboradores y les damos la oportunidad de que demuestren su talento sin necesidad de estar vigilandolos”, afirmó Soto. 

Soto explicó que uno de los mitos que han logrado romper es el de la falta de compromiso de los trabajadores remotos. Cuenta que este tipo de modalidad ha hecho que sus empleados sean más comprometidos, entreguen sus tareas a tiempo y participen activamente en las decisiones que toman con sus equipos de trabajo. 

“Decir que el trabajo remoto vuelve a los trabajadores más perezosos e irresponsables es mentira. En Alegra hemos corroborado que brindarle esa confianza a los trabajadores los motiva a ser mejores y a entregar todo de sí para crecer”, señaló Soto. 

Y esto queda en evidencia al hablar con su trabajadores. Según Duván, ingeniero de desarrollo zipaquireño, antes de ingresar a este emprendimiento estaba buscando la posibilidad de trabajar. Sin embargo todas las ofertas que recibía eran para trabajar en Bogotá lo que lo llevaría a dejar su familia y cubrir algunos gastos extras para vivir en la capital. “Cuando entré juraba que tenía que irme de Zipaquirá a Medellín y cuando me dijeron que podía quedarme en casa, con mi familia, no lo podía creer y claro representó un reto para mí porque requería más compromiso”, afirmó.

Carolina, líder de Alegra Contador, es venezolana y también vio una gran oportunidad para trabajar de manera remota. “Esta opción laboral generó en mí muchas expectativas porque era la primera vez que trabajaba de una manera diferente. Era un tema experimental y el responder a ese voto de confianza me ayudó a organizarme de tal manera que pudiera responder con todo”, dijo. 

Carolina y Duván explicaron que la metodología de trabajo también los impulsa a ser más productivos. Cuentan que tienen un sistema de gestión que los ayuda a ordenar sus actividades y saber qué hace todo el equipo, adicional consideran que desde el trabajo remoto no hay elementos distractores por lo que están 100% enfocados en trabajar. 

“No estamos encima de ellos, no les medimos sus tiempos, manejamos una cultura donde depositamos la confianza en el trabajador y eso es lo que nos ha dado buenos resultados”, afirmó Soto. 

Actualmente Alegra cuenta con 120 empleados, más de 10.000 usuarios y en seis años de operaciones ha contribuido al crecimiento de más de 250.000 mipymes a lo largo de 18 países, en los cuales ha desarrollado versiones personalizadas que cumplen con la legislación tributaria en países como Argentina, Chile, Costa Rica, España, México, Panamá, Perú, República Dominicana y Estados Unidos con una versión en español para público hispano.

Pero esto tuvo un gran reto: pensar en una nueva estructura y cómo lograr llevar a cabo una cultura alrededor del trabajo a distancia. De acuerdo con Soto, esto los llevó a repensar la forma en la que contrataban y cómo harían para que sus empleados se sintieran parte de la organización y no dejaran de tener interacción con sus compañeros. 

“El mundo virtual nos hace ser mucho más estrictos en el proceso de selección porque tenemos que asegurarnos que esa persona es la que necesitamos”, dijo Soto. Así el proceso de búsqueda de talento es netamente digital y está compuesto por una serie de pasos como por ejemplo diligenciar un formulario brindado algunos datos como nombre, experiencia laboral, etc., enviar un video presentándose y contando sus habilidades, luego una entrevista (que puede ser presencial o vía remota) y al ser elegido realiza un proceso de inducción que es netamente digital y en el que participan todos los nuevos actores.

“Gracias a esto tenemos equipo en Florencia (Caquetá), Valledupar (Cesar), Pamplona (Norte de Santander). Y a nivel internacional nos han llegado perfiles de Nigeria, Venezuela y Centroamérica, lo que nos permite tener un equipo diverso”, afirmó Soto. 

El CEO de este emprendimiento aseguró que los trabajadores cuentan con sus sueldos y beneficios que todo empleado en contratación tradicional tiene, además de contar con la oportunidad de acceder a más conocimiento a través de la ‘universidad’ que han creado para ayudar a la formación de sus empleados. “Hemos cambiado vidas y eso es lo que más nos apasiona de lo que hacemos”, concluyó Soto.