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EMPRENDIMIENTO

El niño que sedujo a Shark Tank con su negocio de limonadas

Jack Bonneau se convirtió en la persona más joven en recibir inversión para su negocio en Estados Unidos. Su gran sueño es ayudar a más niños a cumplir su sueño de tener su propio negocio. Aquí su historia.

26 de septiembre de 2019

Cuando uno conoce a Jack Bonneau ve a un niño de doce años y se imagina que probablemente irá a la escuela, le gustará algún deporte y en sus ratos libres aprovecha para estar con amigos y con su familia. Pero, cuando se empieza a hablar con él, esta perspectiva cambia.

Bonneau sí es un niño de doce, pero habla como un empresario de más de diez años en el mundo de los negocios. A los ocho años de edad decidió montar su propia empresa, solo con una motivación: comprarse un Lego.

“Yo era un niño normal que le gustaba ir a la escuela, compartir con amigos, practicar karate, tocar el piano y jugar con legos. Pero mi vida y mi rutina básica cambió cuando empecé mi negocio”, contó Bonneau.

Este pequeño empresario es el creador de Jack’s Stands & Marketplaces, un emprendimiento que además de vender limonadas en épocas de verano, es un espacio para que todos los niños que tienen un negocio y quieren ofrecer en otras partes sus productos lo puedan hacer.

El negocio fue creado, en un inicio, para comprar un lego que Bonneau quería y que costaba más de US$400, dinero con el que no contaba. Sin embargo, la acogida fue tal que este pequeño luego de alcanzar su objetivo de comparar el juguete, decidió continuar con él e impulsarlo por todo el estado de Colorado.

“Mi primer día fue bastante intimidante porque antes de eso era muy tímido y me daba pena acercarme a la gente, además era solo un niño de ocho años que quería obtener un lego. Cuando logré comprar mi juguete, sentí que no podría parar. Sentía que debía continuar y ayudar a otros niños también a crear su propio negocio de la manera en la que yo lo hice”, afirmó.

En los stands de Bonneau los niños tienen la oportunidad de vender los productos de su propio negocio. Funciona como una franquicia mugs, galletas, juguetes, entre otros, todo esto fabricado por niños de la edad o menos de Bonneau.

Adicional a esto, Jack’s Stands & Marketplaces cuenta con una página web en la que los niños que tienen su negocio, o quieren iniciar uno, pueden interactuar, retroalimentarse y compartir experiencias de emprendimiento como la de Bonneau.

Actualmente, aseguró este pequeño emprendedor, su negocio está trabajando con más de una docena de niños que venden sus productos a través de franquicias y diariamente miles de ellos solicitan su colaboración para dar a conocer su negocio.

“Mi papá y yo somos la cabeza de la empresa, pero hay varios niños que se han inscrito para manejar algunas de las locaciones. Es una manera muy fácil de darnos a conocer y de que otros niños se sientan motivados a crear su propio negocio”, contó.

Bonneau creó su negocio con un préstamo que le realizaron sus papás de US$1.000 y luego solicitó un crédito al Young Americans Bank de US$5.000, préstamos que ya canceló. Según contó este negocio funciona muy bien en temporada de verano alcanzando un volumen de ventas de cerca de US$30.000.

Pero el negocio de este niño emprendedor no solo ha sido un éxito en ventas. También logró un hito: ser la persona más joven en recibir inversión de los grandes tiburones de Estados Unidos, en el programa Shark Tank donde recibió US$50.000 para su negocio.

“Shark Tank fue una gran experiencia y oportunidad. Fue hace más o menos tres años, yo estaba muy ansioso y emocionado de que ellos pudieran ver mi negocio y conocieran porqué lo había creado. Además, fue una oportunidad para que estos grandes inversionistas vieran que los niños también podemos pertenecer y hablar en un mundo como el de los negocios”, afirmó.

Y Bonneau no quiere parar. Su gran ingenio y todos los aprendizajes obtenidos en su recorrido como emprendedor, lo están llevando a desarrollar una nueva idea de negocio: crear una plataforma, muy similar a Rappi, dijo. “Este nuevo negocio lo estamos trabajando con mi papá y estamos en el proceso de presentar propuestas a inversionistas que ya me conocen para hacer posible este nuevo proyecto”, afirmó.

Bonneau asegura que entrar al mundo del emprendimiento le ha cambiado totalmente la vida. Dejó de ser un chico tímido y con poco gusto por hablar con la gente, a ser un personaje inspirador en el mundo del emprendimiento dictando conferencias y charlas; y diariamente busca, como él mismo dice, lograr un balance entre la vida de los negocios, su vida familiar, de amigos y la escuela.

Precisamente, en estos días este niño emprendedor se encuentra en Colombia para participar de la Cumbre Internacional de Emprendimiento Infantil y Juvenil que se realiza en Chía y en donde dictará una charla contando su experiencia y con la que espera, no solo motivar a más niños a crear su negocio sino también encontrar nuevas ideas, hacer relaciones y generar una retroalimentación que ayude a crecer su empresa. “Me gusta la idea de que en el CIE tengamos un espacio para hacer pitch donde cada uno podrá mostrar su idea de negocio en cinco minutos, que es básicamente lo que hice en Shark Tank, y me gustaría mucho ver qué proyectos habrán allí”, mencionó.

Este pequeño emprendedor aseguró que su más grande sueño es llegar a todos los niños del mundo a través de su negocio para enseñarles todas las herramientas que necesitan para cumplir su sueño de tener una empresa, sea cual sea la motivación que los llevó a crearlo.

“Mi mayor consejo para los niños que quieren emprender es que simplemente lo hagan. Cuando tuve la idea de obtener mi lego solamente lo pensé y lo hice. Así que, si tienen una idea de hacer cualquier negocio, apóyense en sus padres, en las personas que tienen a su alrededor, y realícenla”, dijo.