| Foto: Bani Gabriel Ortega

EMPRENDIMIENTO

Con 8 años, Samuel es el niño emprendedor y genio de los pasteles

Samuel es un niño de 8 años que sueña con llevar su emprendimiento a lo más alto, a su corta edad ya ha llevado sus pasteles a la cocina de Buddy Valastro. Este es el segundo vídeo de nuestra serie "Grandes negocios de pequeños emprendedores".

15 de noviembre de 2019

Las grandes ideas no son exclusivas de los expertos o de los millonarios. La creatividad de un niño puede sobrepasar las expectativas de cualquier persona que se considere innovadora. Además de su determinación para llevar las cosas a cabo, los menores de edad tienen un espíritu libre, que desconoce lo imposible.

Este ímpetu ha generado que ellos mismos sean quienes logren hacerse un espacio en un mundo conquistado por adultos y que cada vez se reconozca más la necesidad de reforzar algunas habilidades que, probablemente, harán de su futuro uno mucho mejor.

Dinero quiso resaltar algunas historias inspiradoras de niños emprendedores colombianos que a través del arte, la tecnología y la gastronomía han logrado un éxito comparable al de grandes empresarios.

El pequeño Buddy

Samuel Araque se describe como un escultor de delicias y sí que lo es. Este pequeño de tan solo ocho años se ha convertido en una sensación en redes sociales y en el mundo pastelero, pues ha logrado cautivar a grandes y chicos con su técnica para preparar ponqués y decorarlos.

Según cuenta su padre, Víctor Araque, Samuel desde muy pequeño mostró una gran habilidad para la pastelería. “Es un niño común y corriente. En la semana va a su colegio, juega con sus amigos, le encantan los videojuegos. Los sábados se dedica a practicar la pastelería”, afirmó.

Cuando tenía tres años, Samuel Pastelerito sorprendió a su papá en el momento menos inesperado. Araque debía entregar un gran pedido de pasteles y, mientras trabajaba, el pequeño le quitaba algunos fragmentos de las tortas por lo que tomó la decisión de darle una pequeña para que él la decorara. Tal fue la sorpresa, que desde ese momento Samuel no ha dejado de crear delicias.

Es un niño de ocho años destacado en su colegio, es amante del fútbol, los videojuegos y claramente la repostería. Según contó ha hecho más de 200 pasteles y ha tenido la oportunidad de compartir cocina con grandes representantes de esta industria, como el estadounidense Buddy Valastro.

“Algo que me hace feliz es que mucha gente me dice que soy el Buddy pequeño, y yo quiero llegar a ser como él porque hace pasteles muy bonitos, con muñecos y cosas fantásticas”, dijo Samuel.

Este niño emprendedor, además de hacer pasteles con algunos pedidos, se dedica a dictar talleres a grandes y chicos, pues ha logrado desarrollar una de las habilidades más complejas en este mundo gastronómico: dominar el pastillaje.

Sin embargo, Samuel considera que, más allá de tener una empresa, dedicarse a esto hace parte de un juego, pues puede expresarse y divertirse haciendo cosas inimaginables. “Esto no es una empresa, todo esto es un juego porque puedo hacer muñecos que me gustan o que veo en la televisión, por lo que me divierto todo el tiempo en la cocina”, mencionó.

Este pequeño no solo aspira a convertirse en un gran chef y tener uno de los mejores restaurantes del mundo, también sueña con ser constructor y gamer. Los recursos que ha obtenido por su oficio están dedicados a un ahorro para que en un futuro pueda cumplir estos sueños.