Inyectan $7.000 millones adicionales a línea de crédito de mipymes

Con esta inyección, la línea queda con un cupo total cercano a los $14.500 millones, por lo que continuará el apoyo a las mipymes que necesitan recursos para la reapertura de sus negocios y la implementación de los protocolos de bioseguridad.

La decisión se da tras el resultado que tuvo la primera etapa, que fue lanzada el pasado 19 de junio y que, en solo dos meses, desembolsó más del 90% del cupo.

Se les otorgaron créditos a 160 micro, pequeñas y medianas empresas, con plazos hasta de tres años y periodos de gracia de hasta seis meses.

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Durante la segunda etapa, mipymes de diferentes sectores económicos tendrán acceso a créditos hasta por $80 millones, que tendrán como objetivo la financiación de costos y gastos asociados a la implementación de los protocolos de bioseguridad.

Además de insumos y adecuaciones para que los colaboradores de las compañías queden protegidos, o procesos que tienen que ver con certificaciones y sellos que validen las prácticas de bioseguridad de la empresa.

“El resultado en los desembolsos que se han alcanzado con la Línea Reactívate nos motiva a seguir facilitando recursos a las empresas para que en sus cajas haya disponibilidad suficiente que les facilite el cumplimiento de las normas de bioseguridad y de esta forma garantizar la salud y la vida de sus empleados”, dijo el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo.

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Por su parte, para el presidente de Bancóldex, Javier Díaz Fajardo, “este cupo de crédito, uno de los que más rápidamente se ha colocado dentro del portafolio de apoyo durante la pandemia, ha demostrado ser oportuno en la atención para retomar la actividad productiva de las mipymes".

"Estos nuevos recursos asegurarán que más empresas puedan adoptar los protocolos de bioseguridad con celeridad para su pronta recuperación”, añadió.

Estos créditos tendrán un descuento mínimo de 2% en la tasa final que cobre el intermediario financiero en condiciones normales de mercado, un periodo de gracia de hasta seis meses y un plazo máximo de pago de tres años.

Durante la primera etapa, de las 160 mipymes mencionadas, el 54% se destinó a pequeñas empresas, mientras que otro 38% se dirigió a microempresas. El restante 8% correspondió a medianas compañías.

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Adicionalmente, el 83% de los créditos fue demandado fuera de Bogotá, con un alcance en regiones como Putumayo, Caquetá, Casanare y Arauca.

Del mismo modo, el sector comercio fue al que más recursos entraron, pues contó con una participación de 36,8%, seguido por la industria manufacturera, que representó el 18,1%, mientras que las actividades profesionales, científicas y técnicas pesaron 13,5%.