EMPRESAS
Programas no atienden las necesidades reales del empresario colombiano
El estudio del Observatorio de Articulación para la Competitividad Empresarial, revelado este jueves en el Congreso de Confecámaras, encontró una serie de brechas entre los programas existentes para atender al empresario colombiano y las necesidades que estos demandan.
Durante el Congreso de Confecámaras este jueves se presentaron los resultados del Observatorio de Articulación para la Competitividad Empresarial, con el cual se buscó identificar las brechas existentes en el país para generar una articulación que permita a las empresas ser más productivas y competitivas, así como ayudar al crecimiento económico del país.
El estudio detectó que el acceso a mercados internos, la investigación, calidad y comercio exterior son los factores a los que menos importancia le están dando los empresarios del país, pese a que son primordiales para generar bienes y servicios con valor agregado y con mayor posibilidad de inserción en cadenas globales de valor. “Es curioso que si son factores claves para crecer, no sean factores apetecidos por los propios empresarios”, mencionó Julián Domínguez, presidente de Confecámaras.
Frente a los mercados internos, el informe del Observatorio encontró que los empresarios están dejando de lado la promoción de su empresa o productos en ferias, ruedas de negocios, etc., espacios que les permiten su visibilización y crear relaciones con potenciales inversionistas. Asimismo, no cuentan con asesorías para fortalecer su estrategia comercial o de mercadeo. “Las regiones se comportan como ciudades feudales, para vender in situ y no en otras ciudades”, afirmó Domínguez.
Con relación a la investigación y desarrollo de nuevos productos, la situación no mejora. De acuerdo con Confecámaras, en Colombia los empresarios se están aislando de las universidades u otras organizaciones para generar nuevos productos o aumentar el valor agregado de los que ya produce.
Los estándares de calidad también están siendo objeto de olvido en los negocios colombianos. De acuerdo con el estudio, cada vez más empresas están dejando de lado las asesorías para obtener certificaciones de calidad, licencias o registros sanitarios.
Otro de los retos importantes está en materia de exportación. El Observatorio encontró que los empresarios no cuentan con asesorías para sofisticar o diversificar la oferta de exportaciones de su empresa y para evaluar las posibilidades de exportación .
“Esto genera un desajuste entre programas que impactan esos factores, y lo que está ocurriendo. Debe existir entonces una agenda pública para que el empresario entienda que estos aspectos son fundamentales.
Contrario a esto los empresarios colombianos están demandando y colocando como prioridad la financiación y la formación de capital humano para dar valor agregado a su compañía.
Para la primera de ellas, según el estudio, los empresarios colombianos demandan y están centrando su atención en fortalecer su capital de trabajo y en adquirir o modernizar los activos fijos.
Por su parte, los empresarios están demandando programas de desarrollo de liderazgo y habilidades gerenciales. Asimismo, demandan más capacitaciones para sus empleados como diplomados, cursos de actualización y adopción de mejores prácticas.
Muchas brechas y poco impacto
El Observatorio encontró que en el país hay 868 instrumentos dispuestos para apoyar a los empresarios colombianos a fortalecer su desarrollo empresarial. De estos, 603 son a nivel regional y 265 a nivel nacional
Pese a esta cantidad de iniciativas, Confecámaras señaló que existe una brecha entre los factores necesarios, y demandados por ellas, para que las empresas crezcan y la oferta de programas para el fortalecimiento empresarial en el país.
De acuerdo con el informe, la mayoría de la oferta está enfocada en fortalecer temas de innovación, emprendimiento y transferencia de conocimiento, mientras que financiación - siendo una de las necesidades más demandadas por los empresarios - es la menos priorizada tanto a nivel nacional como territorial. Adicional a esto, solo el 2,5% de los programas de formación están orientados a fortalecer capacidades de liderazgo y habilidades gerenciales.
De igual manera, se encontró que los programas ofrecidos no están focalizados en solucionar una necesidad en especial, sino que abarcan un grupo genérico de necesidades lo que impide un real apoyo al empresario. Según el análisis 307 de los programas mapeados reportaron querer solucionar 5 o más grupos de necesidades en simultáneo.
“En la mayoría de los departamentos estudiados, los programas que se ofrecen a los empresarios no responden a una estrategia regional definida. Falta alineación entre los Planes Regionales de Competitividad, las Agendas Departamentales de Competitividad y los Planes de Desarrollo”, cita el informe.
Al respecto, el presidente de Confecámaras aseguró que los impactos de estos programas son genéricos y la oferta existente no está llegando de una manera adecuada a las empresas.
Adicional a esto, los programas no están segmentados para emprendedores o por tamaño de la empresa. El estudio detectó que un 46% de los instrumentos se dirige a 4 o más tipos de beneficiarios.