Farmatodo busca abrir mercado en Cali, Medellín y Bucaramanga

A pesar de la pandemia, los planes de Farmatodo pasan por continuar con su expansión en el país, después de 12 años de haber aterrizado en Colombia, según le comentó a Dinero el presidente de la cadena, Teodoro Zubillaga.

El directivo indicó que aunque 2020 empezó con grandes expectativas, la pandemia tuvo un impacto importante en la operación de la marca, pues aunque algunos productos relacionados con el virus, como las mascarillas, los geles antibacteriales e incluso las vitaminas empezaron a venderse en mayor medida, otros bienes como los productos de aseo personal y de belleza tuvieron fuertes contracciones. 

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Entre los proyectos de Farmatodo estaba abrir mercado en Cali, Medellín y Bucaramanga, y expandir la red de droguerías que tienen en Bogotá actualmente; sin embargo, los efectos de las medidas de aislamientos aplazaron estos planes, aunque ahora Zubillaga espera que en los próximos tres años se pueda completar el plan de 30 nuevas tiendas en estas ciudades. 

Con estas inversiones, que rondan los $70.000 millones, la empresa espera crear cerca de 500 empleos directos y más de 1.000 indirectos en todo el país.

Una de las apuestas de la empresa es abrir la primera tienda en Bucaramanga de manera virtual y no física, para que los usuarios puedan hacer pedidos a través de la aplicación y reciban los domicilios en un promedio de 35 minutos, que es lo que manejan actualmente. 

Mercado digital impulsó la marca en pandemia

El presidente de la marca señaló que aunque Farmatodo viene trabajando desde hace varios años en la digitalización, este segmento se fortaleció en medio de la cuarentena. 

"Una de las primeras cosas que hicimos para remediar la situación adversa fue que rápidamente pasamos a asignarles más recursos a las ventas en línea, que fue un pilar fundamental para revertir la tendencia y ahí empezamos a crecer", explicó Zubillaga, quien agregó que, cuando se levantaron algunas medidas en Bogotá, empezaron a ver un mejor comportamiento en las ventas. 

Antes de la pandemia, las ventas digitales de Farmatodo representaban entre un 10% y un 20% del total de facturación, mientras que ahora este canal genera más del 20% de los ingresos de la cadena.

Otro de los puntos que identificó la cadena fue que la gente quería encontrar muchos productos en un mismo lugar, por lo que empezó a ampliar su catálogo, con el fin de ofrecerles un portafolio más amplio a los clientes.

Sin embargo, el directivo señaló que en estos meses han notado que las droguerías tradicionales o de barrio siguen siendo muy fuertes entre los consumidores, debido a que están ubicadas muy cerca de las casas y en este momento la gente no quiere salir mucho. Entonces, han adquirido relevancia, aunque apunta a que el consumidor evolucione a un formato más amplio, cómodo y moderno.

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Por último, el ejecutivo se refirió a la regulación de los precios de los medicamentos en Colombia, que ha impactado tanto a las farmacéuticas como a las droguerías. "El mercado colombiano es muy regulado, aunque hay que reconocer que el Gobierno está haciendo un esfuerzo importante para tener los precios más justos para los consumidores, lo cual nos mete presión financiera, pero es algo que tenemos que solucionar para que los consumidores paguen los precios justos".