Alitas Colombianas le apuesta a la innovación para seguir creciendo

Cuenta Karen Hernández que en 2014 su padre Diomedes y sus hermanos Iván y Camilo se reunieron en una cena. Y en medio de una conversación familiar surgió la idea de crear una empresa.

El tema quedó sobre la mesa, pero tenían pocas expectativas de realizarlo. Sin embargo, un día sus hermanos llegaron de sorpresa con un dinero y retomaron la pregunta ‘Y entonces, ¿qué es lo que vamos a crear?’

Así y tras una serie de discusiones, llegaron a que la mejor opción era emprender en el mundo gastronómico, el cual conocían de cerca y bastante bien gracias a la amplia trayectoria que la familia tenía en este sector. “En ese momento llega Henry Ruíz, CEO de la compañía y creador de la receta, y se juntan con mi papá para crear lo que hoy es Alitas Colombianas”, contó Hernández. Ella es la directora de comunicaciones y mercadeo de la compañía.

Alitas Colombianas es uno de los emprendimientos más exitosos que ha tenido el país en los últimos años en el sector gastronómico. Al trasladar el modelo de bajo costo al sector de las comidas rápidas y su autenticidad en recetas, logró conquistar a más de un ciudadano en medio de una competencia con grandes cadenas internacionales.

Hernández asegura que cuando iniciaron su principal objetivo fue presentar un producto fresco y saludable, a un costo accesible y con un equipo de trabajo feliz. “Como nosotros trabajamos en el sector como meseros y bartenders, siempre pensamos en no repetir lo que veíamos o en las malas experiencias que se daban en otros establecimientos”, afirmó.

Y fue precisamente esta estrategia la que los llevó a sonar en las grandes ligas de este segmento en menos de cinco años, gracias a la apertura de sus 20 puntos en Bogotá y al voz a voz de los clientes. “Solo teníamos dos grandes competencias que nunca nos vieron como tal y hoy en día estamos en ese segmento con un producto que recoge el sabor colombiano y les recuerda a los consumidores el valor de comer saludable”, destacó la directora de comunicaciones.

Diariamente la cadena compra cerca de 18.000 alas al día, esto representa unas 40 a 50 toneladas al mes. Atienden entre 3.500 y 4.000 personas diarias y el consumo promedio en uno de sus locales alcanza $18.900. Su crecimiento es a doble dígito y cerraron 2019 con ventas aproximadas de $13.000 millones.

Alitas Colombianas planea iniciar su expansión en el país en 2021.

Grandes apuestas

Además de una celebración en sus locales que vendrá con una serie de sorpresas para sus clientes, la compañía prepara una apuesta que marcará su rumbo en el mercado.

A pesar de su éxito y rápido crecimiento, Alitas Colombianas ahora enfrentará el futuro y con él nuevos retos para seguir conquistando más consumidores en el país. Esta tarea está en manos de Santiago Lopera, nuevo gerente general de la compañía.

Para Lopera, la empresa está en un momento crucial donde necesita apoyarse en la innovación para no quedarse estancados. “Alitas Colombianas es una empresa que está cumpliendo cinco años y le ha llegado el momento de transformarse en muchos temas, especialmente en su producción. El negocio que inició en ese tiempo funcionó muy bien pero hay que hacer algunos cambios”, resaltó.

Así, para cumplir la meta de alcanzar este año ventas superiores a $19.000 millones, la cadena entrará en un proceso donde tendrá como actor presente a la innovación y donde dejarán quietos sus planes de expansión por un tiempo.

Según explicó Lopera, la estrategia de innovación estará enfocada en dos temas. El primero de ellos será presentar a los consumidores nuevas opciones en su menú, por lo que a finales de febrero la cadena pondrá en su carta seis productos nuevos que ampliarán su target de consumidores.

“Hemos sido muy exitosos con las alas pero vemos la necesidad de tener otros productos en el portafolio, para así aumentar la frecuencia con la que nos vistan nuestros clientes”, aseguró el gerente general.

La segunda apuesta de la compañía consiste en mejorar sus procesos y su calidad, por lo que en el segundo mes del año trasladarán su operación a una planta nueva ubicada en Bogotá que les dará la capacidad de triplicar sus puntos de venta, mejorar su rentabilidad y ayudarlos a cumplir el sueño de llegar a ciudades como Medellín, Cali, Barranquilla, Montería y Bucaramanga en 2021.

La compañía ha invertido $500 millones en planta, equipos y procesos de innovación. “De los resultados de todo lo que estamos haciendo en este arranque de año dependerán muchas de las estrategias y de los sueños que tenemos a futuro”, afirmó Lopera.

Otros de los sueños que esperan cumplir es el cambio de imagen en los locales físicos y mejorar sus canales de domicilios, que actualmente representan 10% de sus ventas, porcentaje que esperan duplicar en el futuro cercano.

Culminando con sus planes, para este año la compañía está contemplando el ingreso en el mercado de las cocinas ocultas. Según Hernández, esta opción les permitirá llegar a zonas de alta demanda pero en las que no cuentan con cobertura. Así las cosas, esperan cerrar el año con dos ubicaciones de este tipo en la zona norte de la capital.

“Ahora que nos hemos convertido en un punto de referencia para nuevos emprendedores, se nos convirtió un reto para mantener los estándares y seguir avanzando. No queremos dejar de ser ejemplo", afirmó Hernández, quien con su empresa ha demostrado que la familia que come unida no solo permanece unida, también hace buenos negocios.