SANCIONES
Las millonarias sanciones contra operadores de telecomunicaciones en Colombia
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) ha impuesto millonarias sanciones en lo corrido del año en contra de los grandes operadores de telecomunicaciones en Colombia, que podrían sumar hasta $3.658 millones.
En la mañana del pasado miércoles, Claro recibió una sanción de la Superintendencia de Industria y Comercio por más de $980 millones, luego de comprobarse que la empresa vulneró el derecho de libre elección de sus usuarios a terminar sus contratos.
Esta es solo una de las millonarias multas que han recibido empresas como ETB, Movistar o DirecTV durante el segundo semestre del año.
En lo corrido de este año, Dinero encontró que estas empresas han recibido multas por cerca de $3.658 millones, principalmente por vulnerar los derechos de los consumidores, los datos personales e incumplir sus obligaciones, de acuerdo con las autoridades.
Entre julio y octubre, la Superintendencia ha emitido cuatro multas en contra de estas compañías. A continuación, un recuento de las principales sanciones en 2020:
- La primera data del 27 de julio, cuando se impuso una sanción de $1.366 millones a la ETB "por la vulneración del derecho de libre elección que les asiste a los usuarios, así como por no atender las solicitudes de terminación de contrato en los términos previstos en la regulación". En este caso, la SIC estableció que ETB no tramitó las solicitudes de terminación de contratos que presentaron sus usuarios y, en su lugar, continuó prestando y facturando el servicio. Asimismo, se encontró que en 18.424 casos la empresa no finalizó la prestación de los servicios que solicitaron los titulares.
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Las sanciones contra Claro y ETB
Es importante mencionar que las multas tienen recursos a los que las empresas pueden recurrir para defenderse y varios de estas sanciones aún se encuentran en procesos legales.
Otras polémicas
En julio se conoció una "pelea" entre Claro y Telefónica por un contrato con el Banco Agrario por cerca de $100.000 millones para proveer servicios de internet y seguridad. Ambas empresas se lanzaron acusaciones de competencia desleal, ya que Claro señaló que el Banco presuntamente filtró información a su competidor para favorecerla en el proceso; mientras tanto, Telefónica acusó a Claro de tener "un reprochable comportamiento empresarial". Al final, el contrato fue otorgado a Telefónica, al haber obtenido un puntaje mayor en la licitación.