El banco caribe, Serfinanza, adopta la 'zeta'

Serfinansa asume su nueva imagen de banco y pasa a llamarse —tras los trámites marcarios de rigor— como Serfinanza, adoptando la zeta, que ahora acompañará a la entidad como el primer banco que se constituye en la región Caribe en los últimos 60 años. No en vano la entidad, que en sus orígenes perteneció al entonces Grupo Santo Domingo, cumple cuatro décadas en el mercado.

El cambio no será solo cosmético, sino que también incluye la construcción de un nuevo portafolio para sus clientes, donde están no solo los habituales productos de consumo, representados sobre todo por la reconocida tarjeta Olímpica, sino también sus servicios de captación, que busca fortalecer en esta nueva etapa.

El camino inició cuando la asamblea aprobó en marzo de 2016 el cambio de financiera a establecimiento bancario, lo que fue autorizado por la Superintendencia Financiera en diciembre de 2018 y cuya conversión legal tuvo lugar en febrero de 2019. Justamente, tres años después, el proyecto se concretó.

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Este banco costeño, según su presidente, Gian Piero Celia, busca crecer más que todo entre sus clientes en una región cuya economía ha crecido por encima del promedio nacional y con arraigo en Barranquilla, la gran sede no solo del accionista principal, cadena de tiendas Olímpica (85%), sino de sus dueños en últimas, la familia Char.

“Para nosotros este es un negocio de personas que requieren tener inclusión financiera, que están en los estratos medios o bajos y que los grandes bancos no suelen tener en cuenta”, dijo sobre su público objetivo Celia, durante el acto de lanzamiento de la nueva marca ante la prensa de la capital atlanticense este miércoles.

De hecho, la misión es que 15% de las personas naturales que abran algún tipo de servicio con la compañía, trátese de tarjeta de crédito, cuenta de ahorros o corriente, lo hagan por primera vez en el sistema financiero.

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Por lo pronto, las utilidades netas de la naciente entidad en el año 2018 ascendieron a $25.347 millones, lo que significó un crecimiento de $1.315 millones, es decir, una variación de 5,5,% con respecto del año anterior.

Cartera

Con corte a diciembre de 2018, el 62% de las operaciones de colocación del nuevo banco corresponde a créditos de consumo para personas naturales, aumentando la participación de este renglón en 400 puntos básicos, acorde con las estrategias de la entidad.

Su producto estrella, Tarjeta Olímpica, fue obtenida por 175.463 usuarios en 2018, de las cuales 36% (62.334 plásticos) corresponden a la franquicia Mastercard.

Para el año pasado estaban vigentes 717.923 tarjetas de la firma, con un incremento anual del 7%, mientras que el crecimiento promedio del mercado fue del 2,6%, lo que puso a Serfinanza en la octava posición entre las entidades financieras emisoras de tarjetas en Colombia.

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La cartera bruta de consumo a diciembre de 2018 tuvo un saldo de $966.750 millones con un incremento anual de 19,6%, superior al de los bancos y al del sector financiero que fueron del 8,8% y el 9,2%, respectivamente.

El 38% restante corresponde a cartera comercial enfocada en unos 1.800 clientes empresariales en todo el país, aunque más que todo caracterizados como medianos y pequeños, localizados en la región Caribe.

Por su lado, el principal destino de las captaciones del banco está en los CDT. El 85% son renovados y el 93% de esos clientes son personas naturales, que tienen inversiones por $1,1 billones.

Operación

Celia definió a Serfinanza como “un banco pequeño con una red grande”. Si bien cuenta con alrededor de 25 oficinas propias en todo el país, su fortaleza está en las las sedes que operan al interior de las tiendas Olímpica.

Desde luego, el banco sigue de cerca el patrón de esa cadena de retail: 60% de sus puntos de atención están ubicados en la región Caribe y 40% en el resto del país, llevándose Bogotá el 15% de la torta.

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En el caso de Olímpica, el 50% de sus más de 350 almacenes está en el interior del territorio nacional. En principio, en 70 de ellas se apuntalará la presencia de Serfinanza, que ya cuenta con alrededor de 1.000 empleados, una cifra que ha venido duplicando junto con la de sus activos cada 3,5 años.

“Buscamos un crecimiento que no dependa tanto de la sucursal física, sino que sea a través de plataformas digitales. Que no sea un crecimiento en ladrillos, que los clientes usan cada vez menos”, advirtió Celia.

El nuevo portafolio contará con cuenta corriente, tarjeta débito que permitirá retiro en puntos propios y en la red de cajeros de Servibanca, y ofrecerá un plan de ahorro de “cero costos” que entre sus atractivos permitirá programar compras en la cadena de tiendas Olímpica.

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Mantendrán la tarjeta de crédito propia y la Mastercard (“hay otras franquicias que nos coquetean”, dijo Celia), así como ofertas de de microseguros, ahorro tradicional y CDT. En una segunda etapa se plantean ingresar al segmento de los créditos hipotecarios.