VENTA DEL GEB

¿En qué quedó la venta del Grupo Energía de Bogotá?

Uno de los movimientos más esperados en el mercado accionario era la venta de las acciones del Grupo Energía de Bogotá (GEB). ¿Qué tan buen negocio resultó?

24 de julio de 2018

Este lunes, 23 de julio, salieron los resultados de la segunda etapa de la venta de acciones de Grupo Energía de Bogotá (GEB), evento que dejó un crecimiento de 60% en los nuevos accionistas (personas naturales) llegando a 7.000 inversionistas que participaron con un precio por acción de $2.018.

Aunque hay aún un debate en torno al precio de la acción, la democratización, entre otros, se calificó el movimiento como exitoso pues, según agentes cercanos a la operación, la venta superó las expectativas de la banca de inversión. Cabe mencionar que en un inicio el Distrito había ofrecido un 8% del GEB, pero con la posibilidad de poder ampliar ese porcentaje hasta el 16% conforme a la demanda de las acciones.

Si bien, efectivamente se superó ese 8%, la demanda no alcanzó a llegar sino hasta un 10,4% de los 16% que se tenían contemplados. La sobredemanda fue de 1,2%. Es decir, que de las 743 millones de acciones ofrecidas, se demandaron poco más de 950 millones por un total de $1,9 billones.

Al respecto surgen muchas preguntas, por ejemplo: ¿Por qué se bajó el porcentaje de democratización de 20% al 16%? En este caso la compañía manifestó que el porcentaje se redujo porque las bancas de inversión, antes de salir a cada oferta pública, hacen un análisis del mercado en ese momento específico. Y para este caso en concreto, con base en ese análisis y la realidad del mercado, se consideró reducir el tamaño de la transacción: 8% ampliable a 16% si existía sobredemanda, como ocurrió en esta segunda etapa.

La autorización del Concejo de Bogotá no fue por un monto fijo de acciones sino por un porcentaje máximo de hasta el 20% de las acciones del GEB. Lo que le permitió al Distrito contar con la flexibilidad necesaria para adecuar el proceso a las condiciones de mercado.

Hay que decir que, de acuerdo con la Ley 226 de 1995, los procesos de democratización se desarrollan en varias etapas, por lo que la cantidad de acciones ofrecidas en cada etapa se determina atendiendo los análisis técnicos que elaboran los asesores financieros del proceso. Así, la cantidad de acciones a ofrecer resulta de un análisis técnico/financiero, tomando en consideración las condiciones de mercado y la expectativa de demanda en un momento específico. Según el GEB, estas condiciones son por esencia dinámicas y cambiantes.

Visite: Cambio extremo en la Empresa de Energía de Bogotá

Para la empresa distrital, vender menos acciones ha resultado un proceso eficiente para Bogotá, dado que se accedió a recursos para el desarrollo de sus proyectos y conservó la mayoría accionaria (65,68%) de la empresa, mientras que al iniciar la democratización tenía el 76%.

“Se demostró que fue acertada la decisión de no ofertar hasta el 20% de las acciones del GEB, toda vez que en esta segunda etapa no se alcanzó el tope máximo del 16%”, señalaron analistas independientes que pidieron no ser citados.

Debate por el precio

Otra crítica que sobresalió en este proceso de venta fue el precio. Ya que algunas entidades, inversionistas y hasta miembros del Distrito aseguraron que el precio por acción fue muy ‘barato’, pero el precio mínimo de la Segunda Etapa del Proceso de Democratización se sustentó en un estudio técnico de valoración hecho por el consorcio de Bancas de Inversión integrado por BTG Pactual Comisionista de Bolsa, Inverlink y Merrill Lynch, Pierce, Fenner & Smith Incorporated. Adicionalmente, la compañía realizó un estudio independiente (fairness opinion) para revisar la razonabilidad de los parámetros, supuestos y metodologías utilizadas en el estudio técnico de valoración.

“De tratarse de un precio bajo se habría superado el monto de acciones ofrecidas, y lo cierto es que en la segunda etapa no se alcanzó el tope máximo del 16% (solo se enajenó el 10,4%)”, explicó el analista.

Agregó que “el precio objetivo informado por los analistas de mercado es un valor indicativo que corresponde a una proyección a futuro sobre una expectativa de valorización o rentabilidad de una acción que puede o no realizarse. Por el contrario, un estudio técnico de valoración tiene en cuenta el valor actual de una compañía considerando variables técnicas, operacionales, comerciales que afectan los resultados de las empresas como la rentabilidad de sus inversiones (Ebitda), efectos de los cambios regulatorios y el valor comercial de los activos y pasivos”.

GEB vs Ecopetrol

Estas son las diferencias entre los procesos de venta de acciones entre el Grupo Energía de Bogotá y Ecopetrol:

En su momento, el proceso de Ecopetrol consistió en una capitalización para aumentar el patrimonio de la petrolera mediante la emisión de nuevas acciones. En cambio, la democratización del GEB es un proceso de enajenación parcial de las acciones en circulación a un número amplio de personas naturales y jurídicas.

Otra diferencia que separa ambos procesos es que, al momento de su capitalización, Ecopetrol no contaba con accionistas privados ni personas naturales, pues el Ministerio de Hacienda era el propietario del 99,99% de las acciones. En cambio, desde el 2008, las acciones del GEB se encuentran inscritas en la Bolsa de Valores y desde 2011 realizó su primera oferta pública de acciones. 

Otra discrepancia radica en que la capitalización de la petrolera buscaba financiar el plan de inversiones de la empresa, cosa que no busca la compañía del Distrito. El proceso de democratización busca dotar de recursos al Distrito para implementar proyectos del Plan de Desarrollo Distrital.

¿Qué dicen los analistas?

El experto en mercado bursátil, Andrés Moreno, explicó que el Grupo Energía de Bogotá recuperó el nivel de socios que tenía la compañía generadora de energía hace casi cinco años. Además, Moreno rescató que, tras la democratización, el GEB mejorará su liquidez, acciones flotantes y participación en índices bursátiles.

Recomendado: Se vendieron más de 19 millones de acciones del Grupo de Energía de Bogotá en primera etapa

Por otro lado, Camilo Silva, analista financiero de Valora Analitik, explicó que lo más relevante del proceso es que siempre se mencionó una búsqueda de democratización y que esta meta se alcanzó. El Grupo logró aumentar en un 60% sus accionistas que estaban rondando los 3.200.

Silva recalcó que el aumento significativo de los accionistas lleva a concluir que la democratización fue exitosa. “En este momento el mercado accionario en Colombia está necesitando ese tipo de ejercicios porque las personas naturales han desaparecido. Entonces es una buena noticia para el GEB y para la misma Bolsa de Valores”, apuntó.

El analista subrayó que esta democratización fue el movimiento accionario más grande en Colombia en los últimos cuatro años y en Latinoamérica es el más grande desde abril de este año. Adicionalmente, destacó que este proceso le va a permitir a la acción ser más líquida, escalar dentro del Colcap, lo que la llevaría a estar en la mira de inversionistas internacionales.

En la misma línea, Marcela Ramírez, analista de renta variable de Acciones y Valores, afirmó que, aunque hubo una sobredemanda de las acciones, esta pudo haber sido mucho más alta, ya que solo fue de 1,2%.

Un dato que la analista resaltó fue el porcentaje de participación de personas naturales en la democratización. “Durante varios meses lo que se ha visto en el mercado de renta variable es que la salida de personas naturales ha sido pronunciada. Pero lo que se vio con el movimiento del GEB fue un aumento del 60% de inversionistas. Uno podría decir que frente a las expectativas operacionales del emisor estas personas vuelven a creer en el mercado accionario”.

En cuanto al precio, Ramírez indicó que sí pudo haber sido un poco más alto al colocado, aunque fue el mismo del sector solidario. “Consideramos que tiene una oportunidad de valorización bien importante, que tiene fundamentales y tiene cosas de coyuntura del mercado que podrían llevarla a niveles cercanos a los $2.200 - $2.250”.

De acuerdo con la analista, una nueva etapa de venta en 2019 dependerá del comportamiento de la acción en los seis meses que vienen. También hay que ponerle atención al proceso de rebalanceo en octubre próximo.

Las críticas

Uno de los mayores críticos del movimiento accionario fue el concejal del Polo Democrático Alternativo, Manuel Sarmiento, que calificó como un fraude la venta de las acciones del Grupo Energía de Bogotá.

“Con fundamento en análisis de economistas como Mauricio Cabrera y de las principales comisionistas de bolsa, la semana pasada advertí que Peñalosa vendería las acciones por debajo de su valor real, denuncia a la que los defensores del alcalde respondieron que el precio definido por el Gobierno era un mínimo que subiría debido a la puja que se presentaría en el mercado. Pues bien, el viernes terminó el proceso de venta y las acciones se vendieron al mismo precio fijado por Peñalosa, el valor de la acción no aumentó, por lo que resultó siendo falso que el precio aumentaría por la competencia en el mercado”, indicó el concejal.

El cabildante afirma que, mientras el precio de la acción, según los comisionistas de bolsa, superaba los $2.200, el alcalde Enrique Peñalosa vendió las acciones a $2.018, lo que "generaría un detrimento patrimonial superior a los $150.000 millones".

“Vendieron finalmente el 10% de la empresa por debajo de su valor real. Se cumplió entonces lo que se advirtió, hay un detrimento patrimonial muy grave contra la ciudad, se trata de una privatización corrupta”, destacó el representante distrital, quien además solicitó agendar un debate de control político.

Lea también: GEB ajusta su estrategia para obtener 35 billones en ingresos para 2025

Por otro lado, el concejal de la Alianza Verde, Jorge Torres, tildó de frustrante la democratización pues, según su criterio, el proceso que finalizó el pasado miércoles 18 de julio no tuvo la debida campaña de divulgación.

“Ahora que empieza la venta para grandes compañías e inversionistas calificados, serán ellos los que terminarán con el grueso del paquete accionario, y no los ciudadanos en general tal como se planteó y se aprobó en la discusión hecha en el Concejo de Bogotá”, resaltó Torres.

“El propio alcalde mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa, prometió la promoción y compra de las acciones a través de la factura de Codensa, la secretaria distrital de Hacienda, Beatriz Arbeláez, anunció la posibilidad de financiación a través de la red bancaria nacional y la gerente del Grupo, Astrid Álvarez, sugirió una línea de crédito directa en Codensa para facilidad de los ciudadanos. Prometieron canales para masificar la venta de dichas acciones, pero esto no se realizó”, recordó el concejal.

No obstante, critica Torres que, al cabo del tiempo estipulado para la venta, se cerró el proceso de compra de acciones al público en general y no hubo mayor registro de la difusión prometida en los recibos de luz, medios masivos de comunicación, y que el Distrito tampoco cumplió con montos accesibles para los bogotanos que un 87% es de estratos 1, 2 y 3.

“Si bien en recientes comunicados de prensa la Secretaría de Hacienda manifestó que dentro del trámite pueden participar personas naturales, en ningún momento mencionó un canal masivo en el que pudieran adquirir estas inversiones y, en cambio, se dejó a las comisionistas como única opción para adquirir paquetes mínimos de 5.000 acciones, lo que representa algo más de $10’000.000”, manifestó Torres. “Estas condiciones hacen más restrictiva la adquisición para el ciudadano de a pie”, concluyó el concejal.