ENFOQUE
Alejandro Gaviria lanza duras críticas contra la “concertación” de la nueva reforma a la salud: “Las EPS se traicionaron a sí mismas”
El exministro Alejandro Gaviria asegura que la concertación entre el Gobierno y las EPS para una nueva reforma a la salud fue a puerta cerrada y que no mejorará el sistema. Advierte que las alertas siguen prendidas.
SEMANA: ¿Qué opina del anuncio sobre una reforma a la salud que está supuestamente concertada?
ALEJANDRO GAVIRIA: Tengo dos opiniones: una sobre la forma de la concertación, porque creo que tiene que ser más abierta, tiene que incluir a todos los agentes del sistema, tiene que contar la opinión de los médicos, de los pacientes, de la sociedad civil y de todos los involucrados. Esta concertación no se puede considerar como definitiva. La segunda es que yo esperaría que después de una concertación se hubieran introducido cambios y se hubieran corregido aspectos problemáticos de la reforma. Y lo que leí me lleva a pensar lo contrario. En el fondo, esta concertación llevó a un proyecto que en su esencia es similar al que negó el Senado.
SEMANA: Por el documento que se conoció se trata de una reforma muy similar, pero con menos artículos…
A.G.: Básicamente cambió las condiciones de la transición de las EPS a gestoras, será más fácil para ellas convertirse en gestoras y algunas de las funciones de las gestoras se cambiaron marginalmente, las hizo más claras. Pero las preocupaciones fundamentales que hemos tenido muchos y las que llevaron al Senado a hundir la reforma se repiten aquí. Por eso, yo no estoy tranquilo.
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SEMANA: ¿Entonces la tal concertación no existe?
A.G.: Lo problemático es que parece que de esa concertación va a salir el proyecto de ley, entonces dicha concertación ocurrirá en el ámbito del Congreso. Tengo entendido que el Gobierno la va a presentar el 1 de mayo y con mensaje de urgencia y eso es lo que me parece problemático.
SEMANA: ¿Qué preocupaciones tiene?
A.G.: La preocupación sobre la sostenibilidad; si usted va a hacer los CAPS (Centros de Atención Primaria en Salud), y va a construir infraestructura pública, y va a partir la UPC, y va a desfinanciar los medicamentos y procedimientos, no se sabe qué va a pasar. ¿De dónde vienen los recursos nuevos? Esa es la pregunta que hemos hecho siempre sobre el aval fiscal. Tampoco hay respuestas sobre la fragmentación de la atención entre la primaria y la de mayor complejidad, esa coordinación entre los CAPS y las redes. Esa preocupación permanece, yo veo incluso más fragmentación en esta versión de la reforma. Creo que esta reforma describe un sistema de salud que no es viable y que no es operativo.
SEMANA: En varias ocasiones, ministros y exministros han pedido un diálogo, pero el Gobierno no les han respondido…
A.G.: Ha habido dos tipos de diálogos que ha promovido el Ministerio de Salud: uno cuando hicieron las audiencias públicas, que eran básicamente puestas en escena con personas que apoyaban la iniciativa y dos o tres voces disonantes. Y estas conversaciones a puerta cerrada, que se hicieron con un agente del sistema. Me parece contradictorio y paradójico que hace apenas unas semanas estaban diciendo que las EPS eran ladronas y que mataron a 323.000 personas en los últimos años y hoy se sientan con esos mismos agentes y dicen: “Aquí está el proyecto definitivo”. Eso es inaceptable.
SEMANA: Hay quienes dicen que estas EPS fueron a la concertación porque están quebradas. ¿Es así?
A.G.: Dicen en el comunicado que hay unas conversaciones que van a proseguir a partir del 2 de mayo sobre los temas de liquidez y más coyunturales. Pero el caso es que están negociando en una posición de debilidad. Uno esperaría que en esa negociación se pensara en el bienestar general y en un sistema que funcionara para la gente.
SEMANA: En las marchas del 21 de abril también le hablaron al Congreso, pero se aprobó la reforma pensional en segundo debate. ¿Servirá la movilización para el tema de la salud?
A.G.: Espero que sí. Cuando marché estuve acompañado de trabajadores de la salud, de las diferentes sociedades científicas, de asociaciones de pacientes, y ellos siguen descontentos. He hablado con algunos de los senadores que votaron en contra de la reforma y dicen que sus convicciones están firmes.
SEMANA: El presidente Petro anunció que aumentará el umbral para la pensional en la Cámara e incumplió un acuerdo con los liberales y la U. ¿Cumplirá la palabra el presidente en esta concertación de la salud?
A.G.: Sí, eso me sorprendió porque había un acuerdo en el pilar de cuatro salarios mínimos para bajarlo a 2,3, y creo que muestra que no hay mucha consistencia en esos acuerdos. Este caso es un poco distinto porque aquí las EPS no lograron nada en el fondo. Lo que hicieron fue una especie de adhesión al proyecto del Gobierno, entonces, no tiene mucho que perder. Así que si les incumplen, las EPS ya se traicionaron a sí mismas y decidieron sumarse a las ideas de la reforma del Gobierno Petro.