Bogotá y Lund, las ciudades que mejor enfrentan el cambio climático

Bogotá amaneció nublada el 31 de mayo, como suele hacerlo desde que la llamaban Bacatá, y con los cerros de Monserrate y Guadalupe aún tapados de pies a cabeza, debajo de las “cobijas” grises de su habitual cielo matutino.

La capital colombiana, sin embargo, parecía verse azul y blanco, como el firmamento en horas soleadas, al ser protagonista de una noticia mundial que, incluso para sus ocho millones de habitantes, podría tratarse de un meme, o la más reciente publicación de alguno de los portales de noticias falsas, pero irónicas, inspiradas en la vida real, que bien podrían ser titulares en la capital del país del realismo mágico.

Bogotá amaneció siendo una de las dos ganadoras del Desafío de Ciudades (OPCC), convocado por el Fondo Mundial por la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés), y disputado por 280 urbes de 50 países, para determinar las de mejor política pública frente al cambio climático.

Carolina Urrutia, secretaria distrital de Ambiente, aceptó el reto de dar la cara para enfrentar el cambio climático, y en dos años consiguió que la capital colombiana fuera vista en el mundo como solución, a pesar de la contaminación que ha causado desde el mismo día de su fundación.

Así lo reconoció un jurado de 21 expertos ambientalistas del planeta, tras dos años de evaluación a la ciudad que da nombre a uno de los ríos más contaminados del mundo; tercera con peor calidad de aire de América Latina, detrás de Lima y Medellín, y donde se redujo en dos años la expectativa de vida de sus habitantes, según un estudio de la Universidad de Chicago (2017), por respirar a diario aire negro, el del humo de fábricas, tractomulas, camiones, buses, busetas, colectivos, taxis, motos y rutas escolares que se mueven por las vías de la ciudad.

El Desafío OPCC reconoció a Bogotá, junto a Lund, una de las ciudades más antiguas de Suecia, como las de mejores ideas para cumplir los objetivos del Acuerdo de París (2015), adoptado por 196 naciones. No significa que, después del respiro del confinamiento por la pandemia, Bogotá haya dejado de ser la séptima en América Latina con peor calidad de aire. Eso sí sería humor negro.

Acuerdo de París

Firmado el 12 de diciembre de 2015 en la Cumbre por el Clima COP21 en la capital de Francia, fue adoptado por 196 países con el objetivo de limitar el calentamiento mundial 1,5 grados centígrados.

El desafío

The One Planet City Challenge (OPCC), o Desafío de Ciudades, se realiza cada dos años, y las participantes reportan su inventario de emisiones de gases efecto invernadero, además de los planes adoptados para mitigar sus consecuencias.

Por Colombia

Junto a Bogotá, las 18 ciudades colombianas que participaron fueron Busbanzá, Corrales, Tópaga y Mongua (Boyacá); Medellín, Envigado, Itagüí(Antioquia); Cartagena de Indias (Bolívar); Cúcuta (Norte de Santander); Florencia (Caquetá); Manizales (Caldas); Montería (Córdoba); Pasto (Nariño); Pereira (Risaralda); Cali (Valle del Cauca); Villavicencio (Meta) y Yopal (Casanare).

Capital de la cicla

El Plan de Ordenamiento Territorial ‘Bogotá Reverdece’ fue reconocido por priorizar espacios para bicicletas y peatones, y trazar objetivos de transporte masivo limpio: cinco líneas de metro, dos trenes regionales, siete cables y un sistema de buses cero emisiones, para reducir la huella de carbono y aportar al cumplimiento de las metas de mitigación.

Empleo verde

Diseñado para mujeres entre 18 y 65 años, madres, cabezas de hogar sin empleo y sin estudios, ‘Mujeres que reverdecen’ ofrece un salario de 560.000 pesos al mes, aprendiendo y poniendo en práctica jardinería y limpieza de espacios verdes; huertas y agricultura urbana; siembra, excavación de tierra, corte de ramas, poda, creación y mantenimiento de viveros. 5.000 mujeres se benefician desde 2021.

‘Nuevos aires’

Además del ‘Plan Aire 2030’, para la gestión integral de la calidad del aire, la renovación de la flota de transporte público fue reconocida por los expertos: 1.480 buses eléctricos estarán circulando por las calles a finales de 2022, para suplir a los de combustible diésel que irán a los patios de jubilación.

‘Peligro’

PM 2,5, material particulado respirable presente en la atmósfera, es el principal causante de enfermedades de tipo respiratorio. Las localidades en donde más se concentran los niveles de polución por estas partículas contaminantes, generadas por el diésel, son Ciudad Bolívar, Bosa y Kennedy.

Respiro, económico

‘Sembradoras por la reactivAcción’, convenio entre la Alcaldía Mayor y Naciones Unidas, acompañado por el Jardín Botánico, pretende generar 1.070 empleos para control y manejo de especies exóticas, así como mantenimiento de jardines y huertas. Por este trabajo, mujeres en condición vulnerable recibirán un salario de 916.000 pesos y un bono de productividad.