¿Cómo combatir el bullying en los colegios? Ministra de Educación responde

SEMANA: Tuvimos una ausencia en las aulas por la pandemia del coronavirus y en el regreso a clases se han presentado casos de violencia. ¿Qué está pasando?

MARÍA VICTORIA ANGULO: La situación que vivimos en los últimos dos años afectó de múltiples formas a todas las personas y también a la vida en comunidad, lo que se vive hoy en el entorno escolar es, sin duda, un reflejo del desafío que como sociedad enfrentamos. La realidad de la pandemia y el aislamiento ha dejado ver cómo las situaciones vividas por los niños, las familias, los maestros y la comunidad educativa en general generaron impactos emocionales que hacen que ahora, en el retorno, las acciones de prevención de la violencia y atención de los casos sean, más que nunca, prioritarios, para lo cual emitimos la Directiva 01 de 2022, a través de la cual se convoca a cada una de las autoridades territoriales y a los miembros de la comunidad educativa a actuar con celeridad en el marco del Sistema de Convivencia Escolar.

SEMANA: El bullying siempre ha existido, pero en 2022 han aumentado las denuncias. ¿Qué se puede hacer para mitigarlo?

M.A.: Debemos profundizar en las estrategias que favorezcan el desarrollo socioemocional y la convivencia escolar, en dos frentes fundamentales para la formación y el desarrollo de competencias socioemocionales y la implementación de protocolos para el abordaje de situaciones de riesgo, en el marco de la ruta de atención integral para la convivencia escolar. En este propósito, el Ministerio diseñó la estrategia de Entornos para la Vida, la Convivencia y la Ciudadanía, con la que pone a disposición de la comunidad educativa herramientas para implementar en los entornos escolar y familiar en los que interactúan los estudiantes.

SEMANA: Se conoció la posibilidad de hacer cambios a los manuales de convivencia en los colegios. ¿Cómo se haría ese ajuste?

M.A.: Los manuales de convivencia deben ser herramientas que permitan a cada institución educativa abordar de manera efectiva, desde sus contextos y realidades, las situaciones que se les presentan, y en ese sentido la normatividad existente es robusta. Aquí, el llamado urgente a las instituciones educativas es a trabajar de la mano de los padres de familia, los estudiantes, los maestros y directivos, en los ajustes que se requieran para que los mecanismos de denuncia y sanción cobren sentido, y sobre todo que el trabajo preventivo sea aplicado e interiorizado por toda la comunidad educativa. Los manuales de convivencia pueden ser actualizados en cualquier momento en el marco de la competencia que tienen los órganos del gobierno escolar.

SEMANA: ¿Se fortalecerá el tema con los docentes?

M.A.: Los docentes y directivos han sido fundamentales para que, como sector, lográramos la continuidad del servicio educativo y el retorno a la educación presencial y ahora, con los desafíos del regreso a las aulas, continuamos trabajando con ellos para cualificar las interacciones con estudiantes e incorporar en su planeación y práctica pedagógica el desarrollo de las competencias socioemocionales en los estudiantes. El propósito es fortalecer el desarrollo de las competencias en los adultos responsables de la formación de niños y jóvenes; su capacidad de autoformación y de transformación de las prácticas pedagógicas, promover el cuidado y autocuidado, la educación para sexualidad, el desarrollo sostenible, mejorar los climas de aula y las competencias ciudadanas y socioemocionales para el ejercicio de los derechos humanos.

SEMANA: En los últimos meses se viene hablando de una brecha académica entre privados y públicos por los resultados de las pruebas del Icfes. ¿Es real esta situación? ¿Esa brecha se le puede adjudicar también a la pandemia del coronavirus?

M.A.: El desafío en materia de aprendizajes, que ya se evidenciaba en las distintas pruebas y evaluaciones, se ahondó en la pandemia, haciendo urgente la definición de políticas públicas orientadas a reforzar y poner en marcha diversas estrategias que, de forma articulada, contribuyeron al cierre de brechas y aceleración de aprendizajes. El Ministerio inició la implementación de una política de carácter nacional, cuyo objetivo es contribuir a acelerar y mejorar los aprendizajes de los estudiantes más vulnerables matriculados en educación inicial, básica y media. Esta política contempla el fortalecimiento de capacidades a través de la Escuela de Secretarías y el Centro de Liderazgo de Directivos Docentes. En los diferentes programas del Ministerio y en el programa Todos a Aprender se aprovechará la información proveniente de los resultados de las pruebas Saber en los diferentes niveles y de Evaluar para Avanzar para analizar y precisar los desafíos a los que el sistema educativo se enfrenta en áreas como matemáticas, lectura y ciencias, y en competencias socioemocionales, con el fin de implementar estrategias efectivas que contribuyan a cerrar las brechas de aprendizajes que profundizó la pandemia y nivelar a los estudiantes de acuerdo con la etapa escolar en la que se encuentren. En este año, a partir de la estrategia de Evaluar para Avanzar, se implementará un conjunto de herramientas para apoyar y acompañar los procesos de enseñanza, seguimiento y fortalecimiento del desarrollo educativo en el sector oficial de todo el país.