La maldición de Bolívar

Pareciera que a los actores que alguna vez interpretaron a Simón Bolívar los persiguiera una maldición. Es conocido el caso de Pedro Montoya, quien quedó tan marcado con su personaje que llegó a creer y hasta proclamar que él era el Libertador. Montoya cayó en el alcoholismo y sólo hace unos años consiguió su recuperación. Incluso cuando sufrió una embolia estuvo internado en el hospital Simón Bolívar. Su última incursión bolivariana la acaba de hacer en una colección de audiolibros, en la que él lee textos y las proclamas del Libertador.

Algo similar le pasó a Luis Fernando Montoya. Aunque él nunca se creyó Bolívar (de hecho, también representó a Antonio Nariño en la miniserie histórica de televisión Crónicas de una generación trágica), de igual modo se dejó atrapar por la bebida y los televidentes sólo lo recordaban como Bolívar, hecho que le cerró muchas puertas en la actuación. La semana pasada le cayó la roya. Fue capturado en Miami con 100 empaques pequeños de heroína y podría ser condenado a 10 años de prisión.