ENTREVISTA
"Nada pasa más rápido que la belleza"
La modelo Catalina Maya, 22 años, llega como practicante a la oficina de prensa de la Casa de Nariño. ¿Qué va a hacer allí?
SEMANA: Usted es glamour, espectacularidad, foco de miradas. ¿Qué hará en la sede de un gobierno que se dice serio, sobrio?
Catalina Maya: Aprender. Con sencillez y humildad aprovecharé al máximo esta oportunidad para crecer y empezar a recorrer el camino de mi futuro como periodista.
SEMANA: ¿Pero usted llega a Palacio a desfilar?
C.M.: No. Llego a hacer unas prácticas. Soy estudiante de séptimo semestre de comunicación social de la Universidad Bolivariana. Las prácticas son un requisito para graduarme, eso es lo que voy a hacer: unas prácticas.
SEMANA: ¿Cómo hacer para que en la oficina de prensa el trabajo siga su curso cotidiano y no la conviertan a usted en el centro de las noticias?
C.M.: Imagino que en los dos o tres primeros días habrá algunas notas de televisión, fotos o algo así, pero después la gente volverá a su rutina. Yo seré una periodista más.
SEMANA: ¿Pero es difícil que su belleza pase inadvertida?
C.M.: Nada pasa más rápido que la belleza. Lo importante es construirse uno como persona, como profesional. La belleza se va. Al final queda son las cosas que uno ha hecho como persona.
SEMANA: Es posible que usted se convierta en objeto de chistes, de rumores. ¿Está preparada para eso?
C.M.: Por supuesto. Creo que hay pocos oficios como el modelaje, en el que se inventan tantas cosas, se busca hacer tanto daño, se juega tanto con la honra de las personas. Llevo en este oficio nueve años. En este tiempo he formado una coraza que me permite pasar por alto lo que la gente dice y seguir adelante.
SEMANA: Después del episodio de Monica Lewinsky con el presidente Bill Clinton las practicantes en las sedes de gobierno son una tentación para los caricaturistas y humoristas. ¿Es consciente de eso?
C.M.: Naturalmente. Pero vuelvo y repito: aunque soy muy joven por mi oficio he construido alrededor mío un blindaje que hace que todas las cosas que se digan con mala intención me resbalen sin que mi corazón la sienta.
SEMANA: La defensa del gobierno en Palacio es inquebrantable. ¿Usted se va a sumar a esa causa?
C.M.: Yo ya estoy en esa causa. Desde cuando era candidato yo defendía incondicionalmente a Alvaro Uribe. Ahora lo hago más porque es el Presidente que Colombia necesitaba para salir adelante.
SEMANA: En ese orden de cosas, ¿usted también defiende a Fernando Londoño?
C.M.: Es el Ministro del presidente Uribe. Mientras él lo respalde, es obvio que yo también lo defienda.