Con todas las de la Ley

A propósito del papel de las firmas de abogados como gestoras de negocios, Luis Fernando López, director del departamento de Derecho Financiero y Bursátil de la Universidad Externado de Colombia, planteó los factores de éxito en esta actividad profesional. “Depende mucho del estilo de firma y del mercado que pretenda atender –dice–, pues ante los clientes extranjeros que están viniendo, las de mayor tamaño y amplio portafolio de servicios legales tienen mayor probabilidad de éxito, dado que ofrecen servicios en diversas áreas, lo cual es muy positivo para quienes desean tener un solo proveedor de servicios legales. En ellas, además, el manejo del inglés –y de otros idiomas– resulta absolutamente necesario para ser exitosas”, enfatiza. Las firmas ‘unipersonales’, conformadas generalmente por abogados de amplia trayectoria, son fuertes en la solución de asuntos complejos y problemáticos, dado el conocimiento, manejo y experiencia de sus socios, y se estima que seguirán siéndolo pues estos problemas son cíclicos y requieren atención. “Allí radica su factor de éxito; y desde luego, en la medida en que sean bilingües serán más competitivas que sus pares. Y, por su parte, las firmas intermedias –boutiques– serán exitosas si logran hacer una combinación de las fortalezas de las dos anteriores”, concluye.

Aunque el ritmo de la economía viene desacelerándose y se espera un crecimiento menor este año, los negocios y las controversias jurídicas se mantendrán. ¿Cuáles serán los ejes?

El ritmo de la economía viene desacelerándose y la tasa de crecimiento para este año, según el consenso encabezado por el Banco de la República, estará por debajo de 4%. Sin embargo, la dinámica que trae el sector de las firmas de abogados al parecer no se reducirá. Varios ejes marcarán los negocios y las controversias.

Por el lado de los negocios se espera que cristalice la anunciada venta de 57% de Isagen que está en manos del Gobierno y cuyo valor asciende a $5,2 billones. También, por el lado petrolero el mercado está a la expectativa de la desinversión que hará Ecopetrol de las participaciones minoritarias que tiene en la Empresa de Energía de Bogotá, Interconexión Eléctrica S.A. (ISA) e Invercolsa, movimientos que le generarían a la estatal petrolera ingresos por cerca de $2 billones. 

Además está por verse qué nuevos movimientos se podrían gestar al interior de Ecopetrol tras la definición de su visión estratégica para el futuro que generaría nuevos movimientos, como por ejemplo alguna operación –búsqueda de socio estratégico o salida a Bolsa- de Cenit, la empresa que maneja los oleoductos, u otras desinversiones para concentrarse en negocios más rentables.

Pero tal vez la mayor expectativa está por el lado de la infraestructura. Antes de noviembre de este año deben quedar listos los cierres financieros de los 9 proyectos de la Primera Ola, cuyo valor supera los $10 billones, y avanzan los procesos de adjudicación de la segunda y tercera ola. Adicionalmente, se esperan nuevas propuestas de Alianzas Público-Privadas que se unan a las cuatro ya aprobadas. También el desarrollo de la navegabilidad por el río Magdalena, los nuevos puertos que se están gestando, la ampliación de aeropuertos y la construcción de nuevas pistas.

Aunque emisiones de acciones anunciadas fueron canceladas –como la del Grupo Argos– se mantienen las expectativas por operaciones de empresas colombianas en el exterior en el sector financiero, de servicios públicos e industrial. Más aún ahora que con una tasa de cambio favorable para los exportadores se busque capitalizar los acuerdos comerciales y llevar marcas colombianas al exterior.

También se espera una definición en torno a la apertura del proceso por el Tercer Canal de televisión que anunció el Gobierno.

La llegada a Colombia de fondos internacionales, con recursos que superan los US$4.200 millones, listos para adquirir empresas e invertir en su desarrollo son movidas que también tienen muy activos a los bufetes de abogados. Además, la transformación de Bancoldex y la búsqueda de US$700 millones en el proceso de capitalización que adelanta –como lo hizo el año pasado la Financiera de Desarrollo Nacional– también está en la agenda.

Por el lado de las controversias, en el sector real se esperan ajustes en las participaciones de grandes empresas familiares, mientras en el sector de telecomunicaciones están por definirse tribunales de arbitramento en torno a la reversión de activos que tienen que hacer Claro y MoviStar, que se suman a la expectativa en torno a una nueva subasta de espectro. Además, las controversias recientes sobre cargos asimétricos y los pagos que se deben generar entre los operadores móviles también se han convertido en conflicto jurídico.

De otra parte, el papel protagónico que ha tenido en los últimos años la Superintendencia de Industria y Comercio, con investigaciones sobre presuntas cartelizaciones en diferentes sectores, ha disparado las consultas en materia de competencia en el mercado colombiano.

Las asesorías también serán claves en materia de impuestos, tras la reforma que fue aprobada a final del año pasado y la que se espera llegue tras las propuestas que haga la Misión de Expertos designada por el Gobierno, y en la implementación de las normas contables internacionales, en especial para las pequeñas y medianas empresas.

Así, a pesar de la desaceleración de la economía, este seguirá siendo un año muy movido para los abogados en Colombia.