Un sector en auge

Hoy por hoy el sector de la seguridad viene en un crecimiento constante, entre otras razones por la creación de nuevas industrias, la llegada de empresas extranjeras, y con ella de personas que requieren algún tipo de protección especializada; la percepción de aumento de la inseguridad en las principales ciudades del país, y la necesidad de los clientes de mejorar los mecanismos convencionales por sistemas más novedosos. 

Según las estadísticas del Ministerio de Defensa, en Colombia funcionan 856 empresas de seguridad privada, de las cuales 582, el 68 por ciento, ofrecen vigilancia con armas.   

Para Carlos Aguilera, gerente general de Guardianes Seguridad Avanzada, aunque el sector está centrado en los vigilantes, la apuesta de las empresas está orientada a poner en práctica tecnologías de punta y a desarrollar alianzas con la fuerza pública. 

De hecho, entre 2013 y lo que va de 2014 se han establecido 24 alianzas entre las empresas privadas de seguridad y la Policía Nacional, con el fin de disminuir conjuntamente los índices de inseguridad en diferentes partes del país que de alguna manera están en riesgo. 

Y es que si se analizan las cifras de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada, en Colombia hay 233.814 vigilantes y 170.000 policías, para un total de 403.814 personas, que si se organizan de manera adecuada, pueden ser mucho más efectivas contra la delincuencia. 

Según la última Encuesta de Percepción y Victimización de la Cámara de Comercio de Bogotá, 17 por ciento de los consultados aseguró haber sido víctima directa de un delito en el segundo semestre del año pasado, dato que es superior en tres puntos al del primer semestre, y en siete puntos a las cifras registradas en 2012. Además, 52 por ciento de las personas consultadas por la Cámara consideraron que la inseguridad en la capital del país aumentó el año pasado. 

Ante este panorama, mientras se estructuran las nuevas políticas y entran en marcha los cambios que en materia de seguridad se buscan en el país, las empresas privadas están fortaleciendo sus sistemas convencionales. “Con la demanda actual, las compañías no podemos tener falencias en asuntos como el personal, además, tenemos que buscar la diferencia a través de las nuevas tecnologías”, explicó Aguilera.