Álvaro Cruz Vargas fue gobernador de Cundinamarca dos veces, de 2001 a 2003 y de 2012 a 2015. Fue condenado por la justicia penal, aunque no por hechos cometidos cuando fue gobernador. En agosto de 2015 renunció a la Gobernación cuando se descubrió un soborno de 700 millones de pesos que pagó en 2009 a concejales de Bogotá para adjudicar un contrato de pavimentación de vías a favor de ICM Ingenieros y de otra empresa. El contrato valía 24.000 millones de pesos. Del anticipo por el contrato habría salido el soborno. Un cuñado de Cruz Vargas, Jorge Ibán Rozo, era accionista de ICM Ingenieros. Cruz Vargas fue condenado a seis años de prisión en 2016 por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y cohecho por dar u ofrecer.
El soborno pagado por Cruz Vargas fue uno de los muchos que se registraron en el llamado carrusel de la contratación, por el cual están presos el exalcalde Samuel Moreno Rojas y su hermano, Néstor Iván Moreno Rojas. En 2021 se reveló que ICM Ingenieros era una de las cuatro empresas que formaron parte de la Unión Temporal Centros Poblados, la cual recibió un contrato oficial por un billón de pesos.
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Según fuentes de la Fiscalía, el polémico y extravagante mandatario seccional deberá responder por los delitos de extorsión y prevaricato. No terminó su gobierno libre.
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Álvaro Cruz Vargas pagó un segundo soborno cuando se descubrió el primero, en un intento de impedir la investigación penal. En 2018, al destituir e inhabilitar por 20 años al ex procurador judicial Ulpiano Hernán Jovel Muñoz por incremento patrimonial injustificado de 781 millones de pesos, señaló la Procuraduría General de la Nación que ese incremento “tiene origen en los 2 mil millones [de pesos] que recibió de parte de Álvaro Cruz Vargas, exgobernador de Cundinamarca, para que sobornara a funcionarios de la Fiscalía General de la Nación y lograra congelar el proceso penal que se adelantaba contra el mandatario, por el denominado carrusel de la contratación de Bogotá”.
Jovel Muñoz conocía a alguien que estudió en el Colegio Salesiano de Neiva con el entonces vicefiscal Jorge Fernando Perdomo. Ofreció ese contacto para frenar la investigación contra el gobernador. Jovel Muñoz conocía a Álvaro Cruz Vargas porque tuvo una relación con la cuñada del gobernador, es decir, con la hermana de su esposa. La cuñada, al igual que Jovel Muñoz, era funcionaria de la Procuraduría.
El ingeniero civil Álvaro Cruz Vargas nació en San Juan de Rioseco en 1949.
Los bienes que dos exgobernadores habrían comprado con dineros de la corrupción
La Fiscalía ocupó con finés de extinción de dominio los bienes que dos exgobernadores de Guainía, procesados por corrupción, tenían en Cundinamarca y Meta, avaluados en más de 22.000 millones de pesos.
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David Aljure Ramírez nunca fue elegido gobernador de Cundinamarca, pero ejerció el cargo entre mayo y diciembre de 1997 como encargado. La Corte Suprema de Justicia lo condenó en 2003 a siete años de prisión por el delito de peculado por apropiación a favor de terceros. Como gobernador tramitó un crédito por 58.000 millones de pesos para mejoramiento de vías. No se hizo licitación.
Se firmaron contratos no con empresas especializadas, sino con tres cooperativas que, a su vez, subcontrataron las obras.
Las tres cooperativas fueron Coinco, Codeter y Adcoopgualivá. Pero el origen de la condena no fue ese, sino un sobrecosto del 2 por ciento que Aljure Ramírez autorizó a favor de las cooperativas a título de administración, aunque ese concepto ya estaba incluido en las sumas pactadas. El sobrecosto ascendió a 1.148 millones de pesos. El entonces gobernador autorizó ese 2 por ciento después de adjudicados los contratos y “voluntariamente dispuso el incremento de unos precios para adelantar la contratación sin razón lógica ni jurídicamente atendible”, según la sentencia. “Se canceló en dos ocasiones el referido concepto de administración a las Cooperativas”.
David Aljure Ramírez nació en Bogotá en 1935.
San Francisco: un pueblo atrapado en el tiempo
Solo hace poco el municipio de San Francisco, Cundinamarca, ha visto algunas ayudas de la gobernación. No son suficientes para resolver las necesidades de sus habitantes. Por Daniel Galvis.
A 60 kilómetros de Bogotá se encuentra el municipio de San Francisco de Sales. Más de 9.000 habitantes viven en este pueblo combinando su parte urbana y rural, siendo uno de los 116 municipios del departamento de Cundinamarca. Al entrar en su casco urbano, una primera impresión es inevitable: una enorme polisombra negra cubre lo que alguna vez fue el parque principal, el centro económico y turístico del pueblo, remodelado por última vez de manera estructural en 1999.
Lo anterior se debe a obras de remodelación del parque principal que empezaron en octubre de 2021 y se espera que terminen a finales de agosto de 2022. Esta mejora tiene un costo total de 1.966.706.631 pesos, gracias a recursos de la Gobernación de Cundinamarca y la Alcaldía de San Francisco.
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Para la adjudicación del contrato se presentó un solo oferente, al cual se le pagó casi el doble por los productos que ofreció. La Personería municipal investiga el caso.
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A pesar de las buenas intenciones y en busca de hacer más atractivo para el turismo, esta obra no ha dejado de ser un motivo de inconformidad para los negocios alrededor del parque. Fran Armando Torres Díaz, un joven de 21 años, trabaja en un local de celulares, explica que el cierre del parque en diciembre de 2021 fue catastrófico para el comercio en época navideña.
“Empezaron a romper el parque para las obras y así quedó en los últimos meses del año. Eso afectó a todos los comerciantes”, explica Díaz, quien considera que había otras necesidades más apremiantes para San Francisco, como la educación, debido a la falta de un instituto de educación técnica o universitaria.
La inconformidad de los habitantes del municipio respecto a la remodelación del parque también se debe a que fue removida la multicancha ubicada ahí, uno de los principales escenarios deportivos para la comunidad. Actualmente, la Gobernación de Cundinamarca y la Alcaldía de San Francisco adelantan la construcción del Polideportivo Fernando Augusto González Pacheco. Este nuevo centro recreativo tendrá un costo de 1.424.926.907 pesos, de acuerdo con datos proporcionados por el Instituto de Infraestructura y Concesiones de Cundinamarca (ICCU).
Blanca Olivia Moreno, coordinadora de la emisora comunitaria y parroquial San Francisco F. M., suma su inconformidad con el parque al rezago en infraestructura, especialmente la malla vial y las entradas al pueblo. La principal y más moderna entrada al casco urbano es la vía Alto de las Minas: una carretera de casi 4 kilómetros que conecta al municipio con la vía Bogotá-La Vega. Según ella, “los recursos se pierden porque hay una falla geológica, no importa cuánto dinero se le da a esa obra, igual siempre se va a dañar”. Por los daños constantes, esta vía hoy es de solo una calzada, donde vehículos provenientes de ambas direcciones se turnan para cruzar, estando aún el cartel de la Gobernación de Cundinamarca de 2020 y de cómo se va a intervenir la obra para arreglarla definitivamente.
Sin embargo, esta no es la primera vez que se interviene; 55 millones de pesos fueron adjudicados por la gobernación para mantenimiento en 2007 y 137.500.000 en 2009 para mejoramiento vial. Sumando las cifras anteriores junto con arreglos y mantenimientos menores, de 2010 a 2018 han ascendido a 236.330.000 pesos, de acuerdo con la sumatoria de contratos ubicados en el Sistema Electrónico para la Contratación Pública (Secop). La cifra anterior se encuentra dentro de los 489.304.316 pesos invertidos en vías departamentales para San Francisco desde 2011 a 2022, según datos proporcionados por la ICCU.
Blanca Olivia Moreno administra la emisora comunitaria hace 15 años. Resalta que a San Francisco se le ha querido dar un impulso turístico, en especial para el glamping –una actividad que combina acampar con las comodidades de un hotel–, pero sin buenas vías esto es imposible. Moreno concluye que en estos 30 años no se han visto grandes obras de la gobernación para el municipio. Sara Moreno, empleada de un restaurante, considera que “falta más apoyo a San Francisco por parte de las autoridades, las dos vías de acceso están en condiciones desmejoradas, falta un interés en el mejoramiento de la malla vial”.
El Hospital San Francisco de Sales es el único puesto de salud del municipio. Unos dicen que ha mejorado; otros, lo contrario. Para Édgar Zabala, constructor de profesión de 35 años, el servicio hace años era “pésimo, en especial para aquellos que venían de las veredas (...) Ahora ha mejorado, en especial en urgencias, te atienden más rápido”. Amparo Blanco considera que la institución ha decaído en calidad, en especial en “cierres de algunas áreas de atención, como el laboratorio”.
Corrupción en Cundinamarca: ¿Cuál es la relación de los escándalos del Carrusel de la contratación y Centro Poblados con Álvaro Cruz, exgobernador del departamento?
Uno de los mayores escándalos en la historia de Bogotá es el llamado Carrusel de la contratación, un enorme entramado de corrupción a través de contratos, sobornos y favores. Uno de los condenados por estos hechos fue Álvaro Cruz, gobernador de Cundinamarca de 2012 a 2015. Conozca aquí la relación de este exgobernador con uno de los mayores hechos de corrupción en el país.
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Lizeth Murcia, subgerente del hospital, comenta que algunos servicios han cerrado para hacer mejoras y cumplir con los estándares nacionales de salud y que paulatinamente se han abierto desde 2018. “Esta administración asumió el año pasado, en agosto de 2021, y a partir de ahí se han desencadenado una serie de proyectos para beneficio de la comunidad.
Resaltó de manera importante el proyecto de consulta externa”. La funcionaria destaca la inversión en la actual y anterior Gobernación de Cundinamarca. Lo anterior se ha reflejado en que servicios como psicología, consulta externa y odontología fueron reabiertos entre 2018 y 2022; 500 millones han sido invertidos desde 2021 por la actual gobernación para el E. S. E. Centro de Salud San Francisco, según datos de la ICCU.
El expárroco de la iglesia San Francisco de Sales, Luis Eduardo Orjuela Baracal, ha vivido en el municipio desde mediados de los años setenta. Le nombro uno por uno los 11 gobernadores que ha tenido el departamento de Cundinamarca en 30 años. Comenta que los gobernadores pasan, pero todo sigue igual.
Orjuela, quien fue párroco de 1996 a 2016, comenta que “la fuerza de San Francisco ha estado más en la gente que ha llegado, porque es un pueblo eminentemente turístico. Llega mucha gente a comprar sus casitas chiquitas y construyen sus casitas muy bonitas y elegantes”.
El alcalde de San Francisco, Gonzalo Alonso González Herrera, explica que entiende las críticas por la remodelación del parque, pero que una vez terminado puede hacer aún más atractivo el turismo en San Francisco. Destaca la inversión en el centro de salud, junto con los planes para construir un centro para el adulto mayor y una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), en alianza con la Corporación Autónoma Regional (CAR) Cundinamarca.
Destaca también las placas huellas –vías diseñadas para las comunidades rurales– con inversión de la Gobernación de Cundinamarca de 977.900.000 pesos en beneficio para ocho veredas. El alcalde concluye que el municipio se encuentra “en su mejor momento de desarrollo, en el mejor de su historia, en medio de la pandemia y la ola invernal”.
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