Ingreso Solidario: ¿se podría terminar el beneficio por la caída de la reforma tributaria?

Una advertencia hecha hace un mes por el entonces viceministro de Hacienda, Juan Alberto Londoño, podría estar cerca de hacerse realidad.

Para ese momento, el Gobierno acababa de radicar la reforma tributaria en el Congreso y las discusiones en el país apenas comenzaban. Eso sí, el rechazo de la sociedad y los partidos políticos ya era evidente y se materializaría unas semanas después con el inicio del paro.

A pesar de lo anterior, durante varias semanas el equipo económico de la administración de Iván Duque se dedicó día y noche a defender la iniciativa, sobre todo por el componente social que tenía incluido.

En medio de esta titánica tarea, el exviceministro Londoño lanzó una alerta, que para ese entonces pasó inadvertida. En un foro de ProBogotá dijo que de no aprobare la reforma durante el primer semestre del año, el Ejecutivo tendría que cortar de lleno el programa Ingreso Solidario.

“Si no hacemos esta reforma social sostenible, lo que estamos diciéndoles es que a partir de junio los tres millones de hogares que reciben Ingreso Solidario no lo van a recibir. Si no hacemos esta reforma le estamos diciendo a los hogares de Familias en Acción que les vamos a reducir los ingresos a la mitad”, señaló el exfuncionario.

Lejos de ser un comentario suelto, lo dicho por Londoño anticipó una realidad, que hoy el país puede estar cerca de vivir.

Hasta junio

No hay que olvidar que el programa Ingreso Solidario se creó a pocas semanas de empezar la cuarentena general en Colombia, con el fin de mitigar el golpe del confinamiento en los hogares más vulnerables y que estaban por fuera del radar del Estado.

Su creación estuvo en manos del Departamento Nacional de Planeación (DNP), que diseñó esta iniciativa de transferencias monetarias, con la cual a cada personas beneficiaria se le entregan $ 160.000 mensuales.

El programa se creó y puso en marcha durante la primera emergencia económica decretada por el presidente Iván Duque. Posteriormente, al conocer que la pandemia duraría más de lo pensado, se extendió hasta diciembre del año pasado. Y hacia mitad del 2020, el Ejecutivo lo volvió a ampliar, de tal modo que se entregara hasta junio de 2021.

Actualmente, esta política de subsidios está a cargo de Departamento para la Prosperidad Social (DPS), pero, como se mencionó previamente, su duración está limitada hasta el próximo mes.

Si el Gobierno desea ampliar en el tiempo el Ingreso Solidario tiene dos salidas: una, decretar una tercera emergencia económica, lo cual le daría potestad de expedir leyes o reformar las ya existentes. La otra sería tramitar un proyecto de ley en el Congreso, de tal modo que el programa sea prorrogado.

Este era justamente uno de los puntos que se buscaba con la reforma tributaria, que fue presentada por el exministro Alberto Carrasquilla. En el articulado, el Ministerio de Hacienda fijaba que el Ingreso Solidario quedaría como un programa social permanente y se entregaría según el número de personas del hogar y el nivel de Sisbén que tuvieran.

Dicha idea, como se sabe, quedó descartada cuando el Gobierno retiró la tributaria del Congreso, y ahora se está evaluando cómo proceder. Por lo pronto, el nuevo ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, sigue barajando las cartas sobre la reforma que se presentará.

No obstante, a la fecha no hay un nuevo documento presentado ante el Legislativo, lo que limita las posibilidades para que se apruebe en menos de un mes, tiempo que le queda a la actual legislatura del Congreso.

En todo caso, en entrevista con SEMANA, el jefe de la cartera adelantó que el futuro de esta iniciativa deberá hacer parte de las discusiones que se realicen al construir el texto de la reforma tributaria 2.0. Sin embargo, en esta ocasión podría no quedar como un programa permanente.

“Debemos hacer un análisis de cuál debería ser una renta básica de emergencia óptima, si es un programa de qué dimensión y con qué nivel de temporalidad. Claramente, hay que acompañar a las personas afectadas en el marco de la pandemia y apoyarlas con estos recursos (...)”, indicó.

Y agregó: “Está claro que sin recursos no hay programas sociales; se necesitan los recursos para los programas, así como para estabilizar las finanzas públicas”, señaló Restrepo.

Ahora, si el Ejecutivo logra aprobar la tributaria en el segundo semestre del año, podría fijar que se entregue el Ingreso Solidario de manera retroactiva a julio, que es cuando dejaría de entregarse. Algo similar sucedió cuando se extendió el subsidio a la nómina para empresas, pero todo dependerá de lo que aprueben los senadores y representantes.