Vivir con un salario mínimo en Colombia: estos son consejos de expertos para optimizar la plata

No es desconocido que los ciudadanos colombianos con ingresos correspondientes al salario mínimo a menudo enfrentan dificultades para cubrir sus gastos mensuales. A pesar del aumento anual de este salario, los costos de los productos básicos también aumentan en paralelo. Junto a esto, se agregan las erogaciones por arriendo, servicios, indumentaria, educación y colegiatura en caso de tener dependientes menores. Inclusive, las obligaciones financieras, incluyendo deudas, generan múltiples compromisos económicos que en ocasiones pueden resultar desafiantes de abordar plenamente.

Esta situación puede volverse aún más complicada si se considera la posibilidad de incurrir en gastos superfluos que terminan impactando de manera significativa en el estado financiero. Conforme a los resultados de una encuesta llevada a cabo por la entidad de reparación crediticia ‘Resuelve tu Deuda’ a finales de 2022, un 53 % de los encuestados admitieron carecer de control y conocimiento sobre los desembolsos destinados a actividades de entretenimiento, como restaurantes, cine y reuniones, entre otros.

Estos gastos menores, conocidos como “gastos hormiga”, se refieren a las compras recurrentes de pequeñas sumas de dinero que, a lo largo del tiempo, pueden tener un impacto sustancial en el presupuesto personal. En el contexto de un salario mínimo y las apremiantes responsabilidades financieras, si alguien tiende a perder de vista hacia dónde se dirige su dinero después de cubrir las obligaciones básicas, los siguientes consejos podrían ser útiles para mejorar la administración financiera e incluso para ahorrar una pequeña porción, en caso de lograr estirar el salario mensual al máximo.

Es importante registrar cada gasto

Aunque esta práctica podría parecer meticulosa, mantener un registro detallado de cada gasto, especialmente aquellos de menor cuantía, facilitará el análisis de su verdadera necesidad y su efecto en el presupuesto mensual. Según lo señalado por Juan Pablo Herrera, decano de la Facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia, esta medida puede proporcionar una visión más precisa sobre la esencialidad de los gastos y su impacto financiero mes a mes.

“En primer lugar, es necesario ser consciente del impacto que tienen los denominados gastos hormiga para nuestras finanzas, por lo cual, se sugiere llevar control de cada gasto realizado diariamente y así, dimensionar su magnitud en un periodo semanal, mensual o incluso anual”, afirmó Herrera.

Mantener un presupuesto

Conocer tanto los gastos regulares como los eventuales de cada mes proporcionará una base sólida para establecer un presupuesto que se ajuste mejor a sus necesidades. Esto le permitirá comprender en qué áreas puede gastar su dinero y en cuáles no, en caso de que haya conseguido prolongar su salario después de cumplir con sus compromisos financieros. Para llevar un registro ordenado, puede optar por utilizar una agenda o una hoja de cálculo en Excel, si prefiere herramientas digitales. Esto le permitirá mantener un control sobre sus ingresos, asignar estimativamente los fondos para cada pago y posiblemente trazar un modesto plan de ahorro.

La consideración de las tendencias de consumo le brindará la capacidad de tomar decisiones más efectivas en sus compras. Además, se sugiere elaborar un presupuesto de gastos que requiera un monitoreo constante, según indica la página oficial de Rankia Colombia, una entidad de asesoría financiera.

Evitar las deudas innecesarias

A pesar de que en ocasiones se pueda requerir de apoyo financiero adicional, como créditos o asistencia externa, para realizar ciertas adquisiciones como comprar una casa o cubrir matrículas universitarias o técnicas, existen deudas que, aunque no sean esenciales, al contraerlas pueden afectar adversamente la estabilidad financiera.

Según la información proporcionada por el portal del Banco BBVA, es más recomendable evitar este tipo de compromisos de endeudamiento y tratar de vivir dentro de los límites económicos actuales. Esto es crucial, ya que embarcarse en deudas innecesarias podría resultar en dificultades y complicaciones en el presupuesto si en algún momento los ingresos no son suficientes para cubrirlas.