Los delincuentes utilizan esta modalidad para contactar a sus víctimas con motivo de otorgarles un crédito por montos supuestamente preaprobados por la entidad bancaria.

ESTAFAS

¡Pilas! Grupo Aval alerta sobre nueva modalidad de estafa

Por medio de una falsa empresa denominada “TU MANO AVAL”, delincuentes están ofreciendo créditos a nombre de la entidad.

30 de junio de 2021

No son cosa del pasado las llamadas telefónicas, los mensajes y los correos que buscan estafar a las personas, pidiéndoles información personal y financiera, ofreciendo supuestos servicios o productos de entidades bancarias o alertando sobre fallas inexistentes con sus cuentas de banco, entre otras modalidades.

Esta vez, según alerta el Grupo Aval, personas inescrupulosas estarían engañando a los ciudadanos, entregando supuestos créditos a través de redes sociales y otros medios. Lo anterior por medio de una falsa empresa a la que denominan “TU MANO AVAL”.

Sin embargo -¡y ahí la trampa!- aseguran que es necesario que antes les realicen una consignación de determinada suma de dinero para cubrir los “seguros obligatorios” o destrabar y consignar los desembolsos.

Por esta razón, el Grupo Aval informa a los ciudadanos de esta situación y aclara que la entidad no cuenta con ninguna empresa o línea llamada “Tu Mano Aval” o “Tu Mano Financiera Aval”, o algún nombre similar.

Asimismo, informan a los usuarios, los Bancos Aval (Banco de Bogotá, Banco de Occidente, Banco Popular y Banco AV Villas) no se comunican con los clientes solicitando sumas de dinero con la excusa de asignar o desembolsar créditos de ninguna clase.

De igual manera, no es cierto que dichas entidades bancarias exijan “consignaciones con el fin de destrabar o perfeccionar préstamos”, explica en su comunicado.

Por ello hacen un llamado para que las personas que han recibido estas comunicaciones hagan las respectivas denuncias ante las autoridades. Además, invita a los ciudadanos a estar atentos a estas modalidades de estafa para evitar ser víctima de los delincuentes.

El Grupo Aval es claro en su recomendación para los usuarios: no entreguen datos personales o financieros, ni realicen ningún tipo de consignación, por razón de supuestos trámites. Si duda de la veracidad de dicho trámite y/o solicitud de información, comuníquese con los canales de atención oficiales de los Bancos Aval o, en su defecto, de la empresa en cuestión.

La compañía líder en detección proactiva de amenazas ESET explicó cuáles son las modalidades de estafa más comunes en las que suelen caer los adolescentes, muchas de ellas tienen lugar en Internet. | Foto: 123RF

La compañía líder en detección proactiva de amenazas ESET explicó cuáles son las modalidades de estafa más comunes en las que suelen caer los adolescentes, muchas de ellas tienen lugar en Internet.

Por un lado, están las estafas en redes sociales, a través de las que mandan enlaces con artículos de noticias sensacionalistas o sobre temas relacionados con grandes personalidades. “Por la curiosidad murió el gato”, reza el dicho, y es que cuando las personas abren estos enlaces son redirigidas a sitios web maliciosos.

Algunos estafadores atrapan a sus víctimas con temas más delicados como la familia, la salud o la educación. No son desconocidos los casos del primo que fue detenido, del hermano que tuvo un accidente o del amigo que tiene problemas en otra ciudad o con un paquete.

De igual forma, hay quienes se aprovechan de los estudiantes que están buscando ayudas financieras u oportunidades de estudio, informa ESET, ofreciendo falsas becas, en las que se le solicita al interesado una tasa de registro, por citar un ejemplo.

O, también, quienes crean supuestas ofertas laborales que, a la larga, resultan siendo trampas para obtener la información personal de las personas para luego utilizar dichos datos con fines maliciosos, como falsificar documentos, solicitar servicios a nombre de la víctima, abrir cuentas bancarias para actos ilícitos, entre otros.

Por ello, es importante tomarse dos minutos -o tal vez un poco más- para revisar con cuidado las páginas que consulta, los mensajes que recibe en redes sociales, los correos institucionales, así como intentar contactar a las personas directamente a las personas que están supuestamente en problemas o a las entidades que necesitan actualizar su información.