Recomendaciones para conseguir buenos descuentos y no caer en estafas en el Día sin IVA y el Black Friday

La jornada de Black Friday es el escenario en el que cientos de personas aprovechan para intentar conseguir descuentos especiales en los productos y servicios que desean comprar.

Por ello varias empresas con presencia en las plataformas digitales suelen aprovechar para sacar sus mejores descuentos y que los usuarios puedan adquirir sus productos en este día a través de todo tipo de anuncios publicitarios.

Por tradición, el Black Friday en EE. UU. se lleva a cabo inmediatamente después del Día de Acción de Gracias, festividad que se celebra el último jueves de noviembre y en la cual los estadounidenses suelen reunirse para cenar con sus familias.

El nombre de Black Friday se dio en Filadelfia a mediados de 1960, cuando se utilizaba para describir la alta cantidad de tráfico de personas y vehículos que transitaban en las calles el día siguiente a la celebración de Acción de Gracias.

Precisamente, ese alto nivel de tráfico hacía que los comercios aumentaran sus ventas, impulsando así la competencia entre estos por medio de descuentos en varios de sus productos. Así nació la tradición que ya se ha expandido y se celebra en más de 50 países de todo el mundo.

No obstante, denuncian consumidores que algunos comerciantes son inescrupulosos y usan las plataformas digitales para fabricar ofertas aparentemente increíbles que en realidad son un engaño, pues el producto nunca llega al comprado o venden artículos a un precio similar al que este tenía meses atrás.

Sin embargo, frente a la preocupación de los empresarios respecto al cierre de año y sus ganancias en un contexto económicamente difícil, el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal afirma: “Normalmente en la temporada de diciembre, las ventas del comercio sobre los meses anteriores aumentan alrededor de 30 o 35 %, digamos que los meses de finales de noviembre, diciembre y principios de enero, muchas veces es donde el comercio hace las utilidades”.

1. Nunca hacer los pagos directamente con el comercio: para evitar el fraude es recomendable emplear una pasarela de pago para hacer las compras por internet. Gracias a este sistema el usuario puede proteger la información de su tarjeta de crédito o cuenta bancaria. Además, queda un soporte en caso de que se produzca algún problema con la transacción.
2. Revisar las condiciones de garantía y devoluciones: los comercios digitales seguros suelen contar con una política clara sobre los términos y condiciones en las que aplica la garantía por fallas en el artículo comprado y el procedimiento que se debe realizar para solicitar un cambio o devolución de la compra.
3. Realizar una lista de compras y comparar precios en varios comercios: antes de comprar es aconsejable crear una lista de productos a adquirir, posteriormente se aconseja comparar el precio de un mismo artículo en diferentes comercios electrónicos. Esta acción ayuda a ubicar el mejor costo posible y también permite detectar posibles fraudes, pues una oferta demasiado baja es una clara evidencia de que se trata de un fraude.

1. Nunca hacer compras desde una red wifi pública: al conectar un dispositivo a una red pública se corre el riesgo de que los datos privados del usuario puedan quedar en manos de terceros, por lo tanto, no es prudente hacer transacciones con una tarjeta de crédito, pues la información bancaria del usuario podría ser robados.
2. No comprar desde un enlace de una oferta que llegó vía mail o SMS: los estafadores suelen suplantar la identidad de tiendas reconocidas, pues de esta manera se ganan la confianza de los compradores y así pueden robar el dinero de sus víctimas. Es recomendable ingresar desde el navegador al sitio web del comercio y desde allí buscar los posibles descuentos en los artículos de interés para el usuario.