Del 2 al 7 de enero de 2025, Pasto celebrará su tradicional Carnaval de Negros y Blancos, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2009. Este evento es un reflejo de la diversidad cultural de Colombia y un emblema de la identidad pastusa. Hoy, más de dos siglos después de su inauguración, el Carnaval de Negros y Blancos sigue siendo un símbolo de convivencia, arte y cultura.

El programa de esta versión promete emocionar a locales y turistas con sus eventos emblemáticos. El Carnavalito, el 2 de enero, dará inicio a la fiesta con comparsas infantiles llenas de imaginación y color. El 4 de enero, la llegada de la Familia Castañeda inundará las calles de humor y tradición. Los días 5 y 6 de enero se celebrarán el Día de los Negros y el Día de los Blancos, respectivamente, con desfiles vibrantes que invitan a la participación activa de todos los asistentes, y como broche de oro, el Gran Desfile Magno exhibirá carrozas impresionantes elaboradas por artistas y artesanos locales, mostrando lo mejor de la creatividad y el talento nariñense.

Es importante llevar efectivo, si planea participar en el Carnaval de Negros y Blancos, ya que muchos comerciantes y vendedores ambulantes que ofrecen comidas típicas, bebidas tradicionales, artesanías y souvenirs no cuentan con medios electrónicos de pago. Además, el ambiente festivo invita a disfrutar de pequeños gastos en la calle, como el alquiler de trajes tradicionales o la compra de pinturas y espumas para interactuar en las celebraciones. Por lo tanto, tener efectivo a la mano garantiza una experiencia más fluida y completa durante esta colorida festividad.

Pasto cuenta con 21 cajeros automáticos de Servibanca, disponibles tanto para los asistentes al carnaval como para los residentes. Estos cajeros permiten retirar efectivo, consultar saldo y pagar servicios públicos. Están ubicados en puntos estratégicos de la ciudad, facilitando el acceso a servicios financieros durante el evento y asegurando que los asistentes puedan disfrutar de la celebración sin preocuparse por la falta de efectivo.