Pensiones
¿Cuáles son las tres modalidades para pensionarse en Colombia?
Cada una tiene sus beneficios y requisitos.
En el ámbito del sistema de seguridad social en Colombia, la temática de las pensiones sigue siendo un tema de relevancia y debate constante. El desconocimiento sobre las distintas modalidades y los requisitos para acceder a ellas ha generado inquietudes entre los colombianos, quienes en muchas ocasiones no tienen claridad frente a los requisitos y beneficios que los rodean frente a este tema en el país.
Expertos de Colfondos hablaron recientemente sobre las pensiones y resaltaron las tres modalidades esenciales para pensionarse en el país, destacando la importancia de entender las diferencias entre ellas y sus requisitos particulares.
La primera de estas modalidades es la “Pensión de vejez”, que representa la opción más tradicional para jubilarse. Para acceder a esta pensión, se requiere alcanzar la edad establecida por la ley, que usualmente es de 57 años para mujeres y 62 años para hombres. Sin embargo, la edad no es el único factor determinante.
Además, es necesario haber cotizado un mínimo de semanas y haber alcanzado un porcentaje específico del Ingreso Base de Liquidación (IBL), que es el promedio de los salarios devengados durante los últimos diez años de cotización. Es fundamental prever este proceso, comprender sus requisitos y planificar con anticipación para asegurar una jubilación adecuada.
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En segunda instancia, se encuentra la “Pensión de invalidez”, destinada a quienes han perdido su capacidad de trabajo debido a enfermedades o discapacidades. Acceder a esta pensión implica cumplir con requisitos médicos y de cotización. Es preciso haber cotizado un mínimo de semanas y presentar una invalidez total y permanente que imposibilite el desempeño de actividades laborales.
Este tipo de pensión busca brindar apoyo económico a quienes, por razones de salud, se ven imposibilitados de continuar trabajando. Es esencial comprender los términos y condiciones de esta modalidad para garantizar el respaldo financiero en casos de invalidez.
Por último, la “Pensión de sobrevivientes” constituye otra modalidad fundamental en el sistema pensional colombiano. Diseñada para beneficiarios de personas afiliadas al sistema de seguridad social que han fallecido, esta pensión se dirige a cónyuges, compañeros permanentes, hijos menores de 18 años, hijos con discapacidad y otros dependientes económicos. La pensión de sobrevivientes busca ofrecer apoyo económico a quienes dependían económicamente del afiliado fallecido, asegurando su sustento y bienestar.
Vale la pena destacar que cada modalidad de pensión tiene requisitos y criterios específicos que deben ser comprendidos para tomar decisiones informadas, puesto que el desconocimiento en esta área puede llevar a una falta de planificación que afecte la calidad de vida en la jubilación o en situaciones de invalidez o fallecimiento, teniendo siempre presente la meta de lograr una vejez con ingresos dignos cuando se cese la vida laboral.
¿Qué pasa si cotiza más semanas de las debidas?
Una de las dudas más frecuentes que surge entre la gente está relacionada con el caso de todos aquellos que cumplen las semanas requeridas antes de tener la edad, puesto que deben seguir cotizando y es aquí donde se preguntan qué pasa con ese dinero que entregan de más al sistema pensional, desconociendo que esto trae diferentes beneficios.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que en el panorama de la jubilación en Colombia, cada semana de cotización cuenta significativamente para el monto final de la pensión. Cada 50 semanas adicionales a las 1.300 iniciales representan un incremento del 1,5 % en la pensión. Este sistema de bonificación por semanas de cotización extra ofrece un estímulo directo para que los trabajadores aseguren una vejez financiera más sólida.
El punto de referencia clave en este proceso es la marca de las 1.300 semanas de cotización. En este punto, el afiliado tiene el derecho de pensionarse con el 65 % de su Ingreso Base de Liquidación (IBL). El IBL es el ingreso sobre el cual se calcula el monto de la pensión, y este porcentaje representa una parte fundamental de la seguridad económica durante la jubilación. A medida que los afiliados continúan cotizando más semanas, el porcentaje de la pensión aumenta gradualmente, asegurando un retiro más confortable.
Sin embargo, hay un punto de inflexión en este proceso de acumulación de semanas de cotización. Al llegar a las 1.800 semanas, lo que representa el 80 % del límite establecido, el monto de la pensión deja de incrementarse. A partir de este punto, la bonificación por semanas adicionales se detiene, marcando un límite máximo en el aumento de la pensión. Este sistema de incentivos y límites busca equilibrar el esfuerzo de los trabajadores con un beneficio proporcional y sostenible en el tiempo.