Salario mínimo: gobierno Petro se contradice y aún no tiene una posición oficial

Saber de cuánto será el aumento del salario mínimo en Colombia es sin duda una de las mayores preocupaciones de cientos de hogares en todo el país, que requieren con urgencia un ajuste salarial, luego de que la inflación se tragara, a mitad de año, el incremento que había sido decretado en 2021. Tanto sindicatos como empresarios tienen hasta el 30 de diciembre para ponerse de acuerdo.

Muchas han sido las propuestas hasta este momento sobre lo que debería ser este ajuste salarial, las cuales han llegado incluso a contemplar un crecimiento del salario mínimo, que dejaría este indicador en 1.250.000 pesos para 2023. Por ahora las propuestas entre centrales obreras y los gremios están distantes, ya que mientras unos piden proteger el crecimiento económico, otros señalan que los hogares están asfixiados, económicamente hablando.

Organizaciones como la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) han dicho que más allá de definir un monto o un porcentaje de aumento en el salario, consideran que es necesario acordar con el Gobierno una estrategia que permita que el aumento que se defina, no se pierda en dos o tres meses, como ya se vivió este año. También pidieron analizar analizar los diferentes factores a parte de la cifra que están golpeando el bolsillo de los colombianos.

Por otra parte, gremios como la Andi han manifestado que el incremento del salario mínimo debe estar orientado a mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, pero sin afectar la capacidad de maniobra y crecimiento de las empresas, que en últimas son las principales generadoras de empleo en el país.

La mesa de concertación salarial se instalará formalmente el próximo lunes 5 de diciembre y desde ese momento los empresarios y sindicatos destaparán sus cartas frente a lo que deberá ser finalmente el aumento del salario para el otro año, explicando sus razones y motivos, para luego analizar la pertinencia de las mismas de cara al futuro del país.

No obstante, durante los últimos días ha venido ocurriendo algo curioso al interior del gobierno Petro, puesto mientras desde el Ministerio de Hacienda se hacen proyecciones y se dan estimados sobre cómo quedaría, en el Ministerio de Trabajo advirtió recientemente que aún no hay una posición oficial desde la Casa de Nariño y que solo hasta la otra semana dejarán conocer parte de sus intenciones.

Un primer pronunciamiento fue el del viceministro de Hacienda, Diego Guevara, quien aseguró esta semana que actualmente hay un consenso que ubica el aumento en 15 % para el otro año, aunque dejó en claro que por ahora todo es materia de análisis. Así las cosas, el sueldo mínimo que deberían ganar los colombianos quedaría en 1.150.000 pesos. Esta cifra se da, basados en el incremento actual de la inflación.

Por otra parte, ayer miércoles la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, resaltó que “el Gobierno nacional todavía no contempla nada porque las cifras con las que se elabora la propuesta para el aumento del salario mínimo, deben ser las del último día del mes de noviembre donde se conocerá el costo de vida que es la inflación, más el proceso de la productividad. Después de eso, nos reuniremos en una mesa de concertación con el Gobierno y el cinco de diciembre empezará el forcejeo de la negociación”.

Sin embargo, el presidente de la República, Gustavo Petro abrió el debate, hablando de frente sobre la eficacia de un incremento salarial del 10, 15 o hasta 20 %. El mandatario cuestionó abiertamente el impacto de ese tipo de aumento. Petro Urrego manifestó que una de las tareas que debe tener su gobierno es la de encaminar medidas que permitan bajar la inflación de productos básicos para el consumo de los colombianos, como la carne.

“Por estos tiempos, y hasta cubrir el mes de diciembre, la prensa se dedica año tras año a hablar del tema del salario mínimo, cuánto va a subir, en qué porcentaje, hay discusiones de teorías económicas alrededor del crecimiento del salario mínimo”, dijo el mandatario nacional.

El presidente de la República agregó que “poco hemos visto qué eficacia tiene, si es del 10 %, o es del 15 % o es del 20 % qué afecta porque la persona que gana 100.000 pesos, por decir algo, por encima de lo que ha sido el salario mínimo en el año, no sube en la misma proporción que el salario mínimo necesariamente”.

De esta manera, no se ve claro que en la Casa de Nariño se tenga por ahora una posición unificada como gobierno sobre el aumento que debería darse para el salario mínimo de 2023. Habrá que esperar que comiencen las negociaciones y que cada una de las partes destape sus cartas en la mesa.