Reforma a la salud: estas son las agudas preocupaciones de los pacientes sobre el futuro del sistema

De acuerdo con la Encuesta de la Salud de los Colombianos, realizada por la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), en alianza con el Invamer, el 73 % de la población colombiana califica como bueno el servicio de salud colombiano.

Muchos reconocen los elementos positivos del sistema, por lo que de cara a los cambios propuestos para el futuro, en el marco de la propuesta de reforma a la salud, surgen diferentes preocupaciones de los pacientes sobre su atención en salud.

Precisamente, este martes 19, durante el Foro Salud de SEMANA, los representantes de diferentes organizaciones de pacientes y usuarios del sistema hicieron visibles sus retos, necesidades y algunos reparos frente a las transformaciones que se proyectan para el modelo actual.

Frente a la propuesta de reforma a la salud, María Inés Delgado, directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de Enfermos Hepáticos y Renales, aseguró que los usuarios tienen muchas preocupaciones frente al proyecto, pues “busca destruir lo que hemos construido en 30 años”.

Según Delgado, no hay claridad frente al financiamiento de la reforma, por lo que “hay un caos” y se avecina “una destrucción del sistema”.

El respeto por los derechos de los pacientes –contó– es otro de los miedos de estas organizaciones, ya que “quienes van a sufrir son las personas pobres y vulnerables del país”. Con este panorama, Delgado destacó la labor de los senadores en la búsqueda de “una reforma que realmente responda a las necesidades de los pacientes”.

“Afortunadamente, en el Senado de la República escucharon la voz de los pacientes”, aseguró.

Por su parte, Carlos Márquez, vocero de Pacientes Colombia y gerente de proyectos de la Fundación Diabetes Colombia, advirtió que la reforma deja “desprotegidas las enfermedades crónicas del país y arranca de una premisa falsa al proponer un modelo de prevención”.

“Con las enfermedades preexistentes, parece que la reforma deja unos pacientes de primera, de segunda y de tercera categoría. Los de atención primaria están cobijados,mientras que aquellos con enfermedades crónicas quedan de últimos en la financiación”, aseveró Márquez, al señalar que la distribución de recursos se enfoca en “Caps, infraestructura y atención primaria”.

La discusión

Para Gloria Quiceno, presidenta de la Asociación de Usuarios de Sanitas, el problema que actualmente atraviesa el sistema de salud es la polarización de la discusión. “Convirtieron la salud de 50 millones de colombianos en izquierda o derecha. Y a cualquier persona que levante la mano, dependiendo del grupo que lo ataque, como las bodegas petristas, la empiezan a amenazar y atacar”, reveló Quiceno durante el Foro.

“Aquí no estamos hablando de la salud de los colombianos. La reforma se concentra en el manejo de la plata y no en el paciente, ni en lo que tenemos hoy para mejorar el sistema”, añadió Gloria Quiceno, quien reconoció que el sistema de salud nunca será perfecto, pero “tiene cosas buenas”.

El mensaje de la representante de los pacientes para el Gobierno nacional fue “a unirse construir sobre lo que está”.

Al respecto, Delgado contó: “Lo que reina en los pacientes es la incertidumbre” porque no tienen claridad frente a la información que se transmite desde el Gobierno nacional. “El paciente está en una angustia, que incluso van a aumentar las enfermedades mentales porque no sabemos qué nos espera y qué futuro vamos a tener con nuestro sistema de salud”, añadió.

De hecho, según Quiceno, desde las diferentes asociaciones de pacientes han buscado acercarse para concertar con el Gobierno nacional. “Aquí hemos hecho derechos de petición, hemos hablado con el viceministro Urrego. Hemos buscado sentarnos y hablar. El clamor de los pacientes es que el Gobierno se siente, mire el problema y le diga la verdad al país, no discursos”, enfatizó.

Finalmente, para Márquez, “la reforma a la salud se debe caer porque es regresiva en derechos”, ya que contó que “se están perdiendo las rutas de atención integral en salud porque el paciente tendrá un paso tortuoso por un nuevo modelo, del cual no conoce la ruta de navegación”. Es irresponsable, según él, que pase una proyecto que afecta “toda la cadena de servicio y valor que hoy tenemos en salud”.

El vocero de los pacientes se refirió también a los senadores de la Comisión Séptima, diciendo que el llamado “a los ocho firmantes de la ponencia negativa es que, por el bienestar de los pacientes del país, mantengan firme su voto y decisión”.