Gatos Famosos
Los gatos más gruñones del mundo, ¿Cuál es tu favorito?
Estos son los felinos más malacarosos que el Internet haya podido conocer y hoy te contamos un poco más de sus vidas y por qué son tan famosos.
Popularmente los gatos tienen fama de muy gruñones, por sus actitudes odiosas y su evidente diferencia con los perros, que se desviven por dar amor a sus dueños y que son los primeros en estar en la puerta cuando llegas, así solo te hayas demorado cinco minutos.
La inmediatez de las redes sociales ha hecho que la información se viralice de una manera global, por lo que cualquier pilatuna animal está expuesta a la mirada de millones de personas que disfrutan de contenidos nuevos y diferentes.
Gracias a esta expansión, hoy en día todos los amantes de las mascotas tenemos la oportunidad de conocer los gatos más gruñones del mundo, que hacen promoción a su especie por medio de miradas y movimientos que nos despiertan muchas sensaciones.
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Una de ella es Tardar Sauce, la gata más famosa de las redes sociales por precisamente su expresión. Su dueña, Tabatha Bundesen, asegura que su fama se debe a la publicación de una fotografía en el 2012, que dejó ver su su inocente mala cara que se ha vuelto ejemplo para chistes y risas en todo el mundo.
La explicación que se le da su afamado rostro proviene de la enfermedad que padece, llamada enanismo felino, que produjo que su rostro sea plano, su cola corta, una pequeña deformidad en sus patas traseras y su evidente tamaño pequeño.
Pero, contrario a lo que pueda pensar cualquier seguidor de “Grumpy cat” (Gato gruñón), Tardar Sauce es descrita por sus familiares como un animal adorable, que lleva una vida muy tranquila en su casa, donde ama jugar con las cortinas y todas las cosas que le parecen curiosas a un gato normal. Asiste una vez a la semana a una sesión fotográfica y visita al veterinario frecuentemente para monitorear su salud.
Fotofrafías: Instagram @realgrumpycat
Además de esto, a Grumpy Cat, que no posee una raza en específico, la han invitado a diferentes shows de la televisión estadounidense, tiene libro y juegos propios con tan solo cinco años de edad, lo que nos deja esperanzas de tener la gatita amargada de las redes sociales por mucho tiempo más.
Otro de ellos es Tard, diminutivo de Tardar Sauce (Salsa tártara), hoy en día cuenta con más de dos millones doscientos mil seguidores sólamente en su Instagram, mientras que en Facebook la cifra alcanza los ocho millones setecientos mil personas.
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Gif: Giphy
Por estos días le ha salido una nueva competencia a Tard, que posee el doble de tamaño y también de pelo, pero el mismo carisma que parece ir en contra de la felicidad del mundo y que enamora a sus seguidores, a pesar de que en apariencia quisiera tener a cualquier espécimen viviente lejos de él.
Su nombre es Albert y se ha propuesto derribar el imperio mediático de su “archirrival” Dart. Y va muy bien, pues ya son más de 186 mil sus seguidores y son cada vez más. Su rostro no solo refleja un mal carácter, también da una sensación de querer dominar al mundo.
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La historia de este felino comenzó con más problemas que la de su hermosa contrincante, pues él tuvo que ser rescatado de un refugio donde Susan y Michael Singleton lo encontraron y se enamoraron de su amarga expresión.
Su nombre tampoco es accidental, pues sus dueños consideran que tiene un amplio parecido con el físico Albert Einstein, quien también posaba con una mirada directa y una melena evidentemente descontrolada.
¿No se sienten dominados por sus ojos? A su apariencia se le suma una alocada melena, que lo hace ver más amenazante, aunque también produce unas inmensas ganas de abrazarlo. Definitivamente tiene poder de convencimiento.
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Sus dueños también declaran que su apariencia es solo una muestra gráfica, pues en su interior es un gato absolutamente sumiso que ama la compañía de los humanos, jugar con los niños y bebe agua del grifo.
Aún así, seguimos sospechando que todos los gatos planean dominar el mundo y obligarnos a todos a consentir sus cabezas día y noche. Actualmente lo hacemos, pero no admitimos que ellos son nuestros dueños y no de forma contraria.
Fotografías: Instagram @pompous.albert