Una nueva oportunidad para la parálisis canina

Una parálisis ocurre cuando se produce una pérdida parcial o total de la capacidad de movimiento en alguna o en varias partes del cuerpo, debido a trastornos graves que deben ser asistidos con el mayor profesionalismo.

Las causas de dicho padecimiento en los perros son múltiples y van desde procesos traumáticos y trastornos virales, bacterianos o parasitarios, hasta problemas degenerativos o tumorales asociados a la senilidad.

Una de las dolencias más comunes es la parálisis del nervio facial, la cual deja a los caninos con incapacidad para parpadear, labios caídos, excesiva salivación y dificultad para consumir alimentos.

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Otra parálisis recurrente, especialmente entre el cocker spaniel y el pequinés, es la provocada por una enfermedad degenerativa del disco, la cual se presenta con una ruptura de estructuras intervertebrales.

Una afección no muy común en Colombia y en Suramérica —pero que sí aparece con bastante frecuencia en Norteamérica— es la provocada por las garrapatas. El bicho inyecta una toxina en el canino y le genera trastornos en laringe y tráquea que se derivan en dificultad para ingerir la comida y respirar.

Las causas infecciosas de parálisis son muy lesivas para los perros. Incluso algunas pueden ser de grave repercusión para la salud pública, como por ejemplo la rabia, una enfermedad de alta letalidad, o el virus del moquillo o distemper canino.

Foto: 123 RF

¿Cómo reconocer una parálisis en un canino? Se identifica cuando hay incapacidad para mover las cuatro patas (tetraplejía) o dos miembros (hemiplejía), así como dificultad para orinar o micción descontrolada, problemas para defecar, insensibilidad en ciertas zonas, dolor localizado y desplazamiento irregular, entre otros.

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¿Hay alguna esperanza de recuperación para nuestros canes amigos afectados por una parálisis? Anteriormente, la eutanasia era la única opción. Pero, por fortuna, la medicina veterinaria ha alcanzado un nivel de especialidad que permite contar hoy con profesionales de alta experiencia y formación en ortopedia, neurología y fisioterapia que se encuentran día a día en busca de soluciones.

Nuevos desarrollos: prótesis caninas

La ingeniería biomédica y otras áreas vienen aportando procedimientos y aparatos diseñados para aliviar los trastornos asociados a la parálisis en miembros delanteros o traseros en los perros.

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Las órtesis, por ejemplo, son dispositivos externos que sustituyen la función del sistema músculo-esquelético como las sillas de ruedas adaptadas a la biomecánica de cada especie.

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La prótesis, de otro lado, reemplaza un miembro por completo luego de sufrir una amputación o de presentarse un desarrollo incompleto en la etapa fetal.

Estas últimas son muy funcionales y definitivamente apuntan a incrementar la calidad de vida de los caninos.

Lo anterior, sin embargo, no aplica para todos los casos y, en muchas ocasiones, el animal logra adaptarse a la ausencia de uno de sus miembros sin necesidad de que se sustituya su extremidad con una prótesis.

Preguntas de nuestros lectores

De un tiempo para acá, mi perro de dos años se orina en la cama. ¿A qué se puede deber este extraño comportamiento? ¿Tiene que ver con un problema de salud?

Es importante llegar a un diagnóstico definitivo, considerando que las causas pueden ser diversas. Por ejemplo, una infección crónica en vejiga o riñones, una hiperplasia prostática, trastornos comportamentales asociados a episodios de ansiedad, depresión, tumores u otras posibles causas. Definitivamente, debes llevar a tu perro al veterinario.

Tengo la sospecha de que mi perrita de 12 años de edad se está quedando ciega porque ya no enfoca la mirada como antes. Creo que tiene cataratas. ¿Cómo puedo descubrirlo?

Las cataratas en los perros son fáciles de identificar por la opacidad en el cristalino del ojo. Tienen un factor hereditario importante y muy relacionado con las etapas seniles en los caninos. Muchos se logran adaptar a su condición, pero en otros casos aparecen traumatismos y lesiones por golpes asociados a la pérdida de la capacidad visual. Si este es el caso, consulta a tu veterinario.

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Mi perro tiene muchos lunares y algunos han cambiado de tamaño. ¿Qué tan malignos pueden ser en los caninos? 

Los lunares en perros, al igual que en humanos, pueden ser benignos o malignos, siendo los segundos de necesario manejo profesional para evitar que avancen con consecuencias graves para la mascota. Los malignos son más comunes en animales mayores, con pieles y pelajes claros. Si observas un crecimiento acelerado con bordes irregulares, puede ser un indicador de malignidad.