Alberto Linero habla sobre la infidelidad: “Perdono una vez, pero dos no”

Alberto Linero, el conocido cura católico que decidió dejar sus votos y su vida como sacerdote luego de 25 años de dedicar su vida al cristianismo, sigue siendo protagonista por sus consejos y opiniones. Hoy, desde su rol de periodista, escritor, docente y conferencista, se convirtió en una voz con varios seguidores que están pendientes de él desde que era un representante de la iglesia.

Las enseñanzas de Linero y sus opiniones sobre diversos temas que para él, cuando se retiró de su vocación, eran nuevos desde un ámbito personal, siguen siendo noticia y generando muchas opiniones.

En medio de una conversación de Linero con Blu Radio, se le indagó sobre las diversas vivencias y situaciones que viven las parejas cuando deciden entablar una relación sentimental, entre ellas la infidelidad, un acto que pese a que es uno de los principales motivos por los que las relaciones amorosas llegan a su fin, sigue estando muy vigente en la sociedad.

Cuando le preguntaron a Linero si él perdonaría una infidelidad, el conferencista respondió haciendo una breve reflexión sobre el perdón, indicando que la falta de perdón conlleva a la amargura, la tristeza y el dolor, y por lo tanto, alguien que vive sin perdonar no puede ser feliz.

“A mi gusta separar bien entre perdonar y reconciliarse. Yo creo que si perdonar es recuperar la paz perdida, si perdonar es recordar sin dolor, yo creo que todo se tiene que perdonar (...), si no perdonas el corazón se te va a llenar de amargura, de tristeza, de dolor, y no vas a ser feliz. Por eso, para mí, es importante entender que el perdón hay que darlo siempre”, señaló.

Sin embargo, Linero dijo que donde él veía una dificultad era en la reconciliación: “Ahí no soy capaz de decir si sí o si no. Si tú me preguntas si me reconciliaría con mi pareja después de una infidelidad, yo tendría que decirte que depende. Hay que analizar bien las cosas, hay que analizar bien de qué se trata.”

Al respecto el escritor comentó que él propone dos elementos básicos: el arrepentimiento y las condiciones objetivas de que hay un proceso de cambio en la vida de la persona que cometió la infidelidad. Según Linero, si la persona no está arrepentida del hecho o no muestra señales de cambio real lo mejor es alejarse de ella.

Además de esto, también indicó que el proyecto de vida que ha construido la pareja también ejerce un papel importante, dado que en esta situación es importante determinar si el peso de lo que se ha construido en la relación realmente vale la pena para darse una nueva oportunidad.

Pese a estas premisas, que podrían conllevar a que la infidelidad pueda ser perdonada, Linero dijo que de perdonar un acto de estos por parte de su pareja de acuerdo a lo anteriormente descrito, perdonaría una infidelidad, dos no.

“Perdono una, dos no. (...) Una sola vez y por eso digo que no soy capaz de responder si sí o si no, depende”.

Linero concluyó el tema diciendo que para él y de acuerdo a lo que piensa hasta hoy, el amor de pareja exige exclusividad: “no quiero compartir el amor de mi pareja con nadie más”.