Gente
Carla Giraldo se destapó sobre dura experiencia que atravesó en el Bienestar Familiar: “Hoy en día me doy látigo todavía”
La presentadora comentó cómo vivió esta situación desde su perspectiva personal, hace años.
Carla Giraldo, con el pasar del tiempo, conquistó al público colombiano y desarrolló una conexión especial con miles de personas, precisamente a raíz de su talento y su trabajo en la televisión. Desde muy joven mostró la vena artística que corría por su cuerpo, despertando reacciones con los papeles que realizaba en la pantalla chica.
La paisa logró llamar la atención con su carrera profesional, además de ciertos detalles que salieron a la luz sobre su vida personal e íntima. La artista no escapó de la polémica, pues terminó protagonizando titulares relacionados con sus parejas, las peleas que tenía con otros famosos en formatos de entretenimiento y las respuestas que solía dar en redes sociales para defenderse de ataques.
Sin embargo, Carla Giraldo le dio un giro gigante a su presente, abriéndose camino en un nuevo proyecto tras ganar MasterChef Celebrity. Su retorno a RCN se dio en La casa de los famosos, en que se ubicó como una de las presentadoras de cada gala.
Con esta nueva oportunidad, la celebridad buscó transformar la imagen que existía de ella en los medios, probando ideas diferentes y salidas de lo común. Al mostrar el cambio que logró, muchos quisieron saber sus secretos, los recuerdos del pasado que cargaba en su vida y las anécdotas que marcaron su realidad.
Lo más leído
Por tal motivo, en una reciente entrevista, Carla Giraldo llamó la atención de más de uno con unas declaraciones que brindó, en las que relató un poco de cómo fue su experiencia en una entidad del Estado. La famosa no dudó en describir lo duro que fue para ella en ese entonces, pues todo ocurrió cuando tenía solo 14 años.
En una charla con María Camila Diaz, periodista, la conductora del formato de RCN desmintió rumores y versiones que rodeaban su niñez, contando realmente cómo había sido todo cuando huyó de su casa y se escondió en varios lugares. La antioqueña fue contundente al negar que tuvo problemas de drogas o alcohol, pues sus temas eran más afectivos y psicológicos.
“Yo trabajé toda mi vida con una fundación, y cuando me voy de mi casa, ellos me abren las puertas para poder vivir allá. Tenía muchos problemas, no de drogas, sino psicológicos, conmigo misma, vacíos afectivos, inestabilidad emocional... Mis problemas eran mentales, eran otra cosa”, dijo al inicio.
“Me volé de mi casa y me quedé donde una amiga, pero los menores de edad son un problema para cualquier persona, pues nadie quiere tener ese problema en casa por más que te quieran y te amen, porque sus papás deben saber dónde está su hija y me convertí en una niña problema, además de mis problemas, era un problema para todo el mundo”, reveló, explicando lo malo que hizo al no pensar bien las cosas.
Sin embargo, Carla Giraldo se centró en cómo fue su paso por el Bienestar Familiar de aquella época, teniendo en cuenta que había otros manejos y métodos. La actriz no fue feliz y enfrentó una serie de sucesos que la hicieron replantearse su vida.
“En esas veo el comercial que dice: ‘Los niños buscan su hogar’. Pues yo voy a buscar el mío, y me fui para allá. Qué duro es esa entidad. Siempre he pensado que los niños buscan su hogar, no sé si ese es el lugar tan correcto para los menores. Me encontré con un mundo muy difícil donde te alimentan de bienestarina todo el día. Nos levantaban a las 4:00 a. m. a bañarnos con agua fría. Donde había niñas de cinco a seis años completamente desarrolladas por problemas de abuso”, indicó, reviviendo detalles.
En sus planteamientos, la colombiana cuestionó mucho la forma en la que se acogía a los menores, pues la idea era brindarles un lugar seguro y cómodo para encontrar un hogar. “¿Por qué no tenemos el apoyo que deberíamos tener? Somos niños, deberíamos tener algo de diversión, poder descansar, ver televisión, tener otros recursos. Me ponían a hacer pan, a hacer artesanías y no está mal porque te enseñan a vivir, la vida no es fácil para nadie”, dijo.
“No lo digo por mí, después de mi pasó sentí que mi vida era una maravilla y lo agradezco, pero cuando hay niñas que vienen de un proceso tan difícil, por qué debemos hacer que todo sea más difícil, por qué no darles felicidad en medio del llanto, por qué no darles una golosina”, agregó.
No obstante, la artista ‘se dio palo’ por no cumplir algo que quiso desde hace mucho tiempo, afirmando que le había fallado a una iniciativa que llevaba internamente.
“Siempre dije que me iba a volver una abanderada de esas niñas y nunca lo he hecho y es algo en lo que hoy en día me doy látigo todavía, porque meterse con una entidad del Estado no es fácil... Pero sí siento que le falta más consideración con esos niños; sí les dan techo, pero no sentí amor. Eso lo viví a mis 14 años, ya tengo 37″, concluyó.