CLAUDIA AL AIRE

A pesar de las críticas la colombiana Claudia Trejos se consolida como una de las periodistas <BR>latinas con mayor proyección en la televisión norteamericana.

11 de octubre de 1999

ace un par de semanas Claudia Trejos acaparó la atención de los principales medios de
comunicación de Estados Unidos. A diferencia de muchos latinos que figuran en los titulares de la prensa
norteamericana debido a actos violentos, en esta oportunidad el único atrevimiento que cometió la
colombiana fue haber aceptado el reto de presentar la sección de deportes de KTLA-TV, el canal
independiente de habla inglesa más visto en la costa oeste. La osadía de la periodista de 30 años fue
suficiente para que CNN, Los Angeles Times, Los Angeles Daily News y The New York Times, entre otros
medios, se interesaran en ella y pusieran en tela de juicio sus habilidades como reportera. Para los
comentaristas deportivos era inaudito que una mujer venida de quién sabe dónde hubiera sido capaz de
reemplazar al legendario Ed Arnold, un curtido presentador con más de 20 años de experiencia en el oficio y
a quien la mayoría consideraba un gurú en lo que a temas deportivos se refiere.A pesar de ser reconocida en
el medio hispano por su trabajo como presentadora y productora en Fox Sports y KWHY, el segundo canal
latino con mayor audiencia en Los Angeles, los televidentes norteamericanos no tenían referencias sobre las
aptitudes profesionales de Claudia y las críticas sobre su elección no se hicieron esperar.Uno de sus
jueces más severos ha sido Larry Stewart, columnista de Los Angeles Times, quien en declaraciones a
SEMANA aseguró que Claudia aún no está preparada para enfrentarse al público angloparlante. "Nunca ha
trabajado en un medio en inglés. Desconoce los términos y técnicas que se emplean aquí y, aunque tiene
talento, le hace falta experiencia", agregó. Algunos comentaristas, como Tom Hoffart, de Los Angeles Daily
News, han sido más agudos y aseguran que la pronunciación de la colombiana es incomprensible y que su
ingreso al canal obedeció simplemente a razones de rating pues Los Angeles es el segundo mercado más
grande de Estados Unidos y una presentadora latina atrae más televidentes hispanos. A sabiendas de que
sus contradictores la acechan como buitres Claudia sigue firme en su decisión de quedarse y sostiene que
si ha llegado tan lejos es porque se lo merece. "Desde que estoy en Estados Unidos esta es la primera vez
que experimento el racismo. Ha sido una batalla diaria pero si Dios me puso aquí es porque puedo hacerlo.
Yo sé que a algunas personas les molesta que yo pronuncie los nombres latinos en español y no con acento.
Pero no voy a dejar de hacerlo pues no pretendo hacerme pasar por gringa porque no lo soy".Los directivos
de KTLA-TV han salido en defensa de su nueva empleada y consideran que Claudia sólo necesita un
poco de tiempo para adaptarse a los cambios. Así lo manifiesta Jeff Wald, director de noticias del canal,
quien no se arrepiente de haberla contratado. "Lo que sucede es que los televidentes no están acostumbrados
a ver a una mujer hablando de un tema aparentemente masculino como es el deportivo. Aquí la mayoría de
presentadores son simples imitadores y cuando llega alguien con un estilo innovador se resienten al cambio.
Estados Unidos es un país de inmigrantes y por lo tanto resulta irónico que ahora rechacen a alguien
simplemente por su origen", declaró a SEMANA.A pesar de que su nombre le ha dado la vuelta a Estados
Unidos lo cierto es que en Colombia pocos saben quién es ella. Lo anterior no es de extrañar si se tiene en
cuenta que esta caleña abandonó hace nueve años el país sin imaginarse siquiera que algún día
trabajaría en televisión. Su odisea comenzó en 1990, cuando decidió dejar todo a un lado y viajar a Los
Angeles a estudiar medicina. A los pocos meses de estar en California se encontró con un antiguo novio y en
un arrebato de amor contrajo matrimonio. Sin embargo ni la medicina ni la vida de casada resultaron ser lo
que esperaba. Tanto es así que en 1993 se divorció y en 1995 se retiró de la facultad. Para ese entonces ya
trabajaba como asistente en una pequeña productora de televisión, en donde realizaba toda clase de oficios,
desde servir tintos hasta editar notas. Su tenacidad fue recompensada al poco tiempo cuando la compañía
fue adquirida por Fox Sports Americas y ella pasó a ser la productora. "Desde que comencé en esto me he
preocupado por mostrar la otra cara del deporte. Más allá de los marcadores me interesa que el televidente
aprenda que detrás del tenis o el fútbol se esconden la historia y la cultura de un pueblo".Este interés por
romper esquemas ha tomado por sorpresa a sus propios críticos que, si bien no le perdonan la falta de
experiencia, han terminado por reconocer que Claudia ya dio el primer paso para triunfar en el exigente
medio norteamericano. Al menos eso es lo que opina Stewart, quien no tuvo reparo en afirmar: "Si ella
corrige pronto sus errores en un año todos estaremos hablando maravillas".