¿Cómo se graba ‘MasterChef’? Estos son todos los secretos detrás de cámaras

MasterChef Celebrity está por terminar. La temporada 2023 ha tenido momentos inolvidables y los televidentes estarán pendientes el próximo domingo 8 de octubre de conocer al ganador. ¿Quién será?

Después de varios meses, el premio quedará en manos de Carolina Acevedo, Nela González, Natalia Sanint, Daniela Tapia o Adrián Parada. Alguno de ellos podrá quedarse con el jugoso premio de 200 millones de pesos.

A medida que fueron pasando los capítulos, la audiencia pudo notar momentos de tensión, graciosos y nostálgicos. Sin embargo, hay cosas que el público no puede conocer, dado que hay varios secretos que se esconden detrás de cámaras.

¿Qué hay atrás de todo? El chef y jurado del programa, Nicolás de Zubiría, le contó a SEMANA algunos detalles que pasan inadvertidos para el público.

En primer lugar, señaló que el equipo de producción lo recogía a las siete de la mañana.

Al llegar a la sede, él iba al camerino para “dejarse consentir” del equipo de maquillaje, donde tenía tiempo para conversar con los otros jurados y saludar a los participantes en los pasillos.

“Lo que hago ahí es tomarme unos buenos tres cafecitos mientras se habla paja con Jorge y Cris sobre las noticias de la mañana. Siempre estamos ahí para compartir un ratito y uno de los tres les hace el café a los otros. Ahí podemos hablar carreta porque es tiempo muerto. Imagínate, son cuatro meses conviviendo 12 horas con ellos”, declaró de Zubiría.

Aquellas charlas se hacían en el tiempo muerto, el cual era antes de iniciar las grabaciones de lleno. Sobre las 9:00 a. m., todos iban a set para iniciar el reto en cuestión, el cual debía acabar antes de la una de la tarde. Después, en la tarde, volvían al set para grabar otra parte.

En los capítulos es común notar algunos espacios en los que los participantes hablan sobre lo que estaba pasando. ¿En qué momento se grababan esas cápsulas?

De Zubiría respondió que en los tiempos muertos, como luego de cocinar: “Cuando ellos terminan de cocinar, se los llevan a hacer entrevistas. Nosotros ahí entramos con cuchara en mano y vamos probando de la olla, nunca del plato”, explicó.

Un detalle particular de la producción radica en la cantidad de veces que se graba el final de la competencia. Como mantener esa información oculta es sumamente difícil, el ganador es solamente conocido por el jurado y la delegación de la rifa.

En ese orden de ideas, se graban celebraciones para cada uno de los finalistas con diferentes planos. Esto se hace para que la felicidad al final sea verídica y no se corra el riesgo de revelar al ganador. Por lo tanto, ninguno de los participantes sabe quién fue en verdad, sino hasta la transmisión del episodio.

Otro punto importante en las grabaciones radica en los momentos que tocaba decir algo, ya fuera el eliminado o las bonificaciones.

Sobre ese asunto, De Zubiría señaló: “Algunas veces uno convence a los otros dos, entonces es un trabajo que nos tomamos muy a pecho, a conciencia y con rigurosidad para analizar todos los aspectos del plato; jamás teniendo en cuenta a la persona que lo preparó ni la historia del plato”.

Además, afirmó que en diferentes oportunidades puede que la relación del plato con la historia diera puntos para el participante, pero no era motivo para quitarle puntos. Para resolver las dudas, ellos tenían líneas de prioridad, las cuales tenían que ver con el emplatado, la composición técnica del plato, la colorimetría y el balance de texturas.