Fallo
¿De víctima a victimario? Así ganó Johnny Depp el juicio contra su ex esposa
Luego de un largo juicio, Johnny Depp obtuvo la victoria legal sobre Amber Heard. El pleito dio un giro en el que la víctima se convirtió en victimaria.
El famoso actor Johnny Depp y la también actriz Amber Heard, su exesposa, se enfrentaron durante casi seis semanas en un mediático juicio por difamación, que ha significado un antes y un después no solo para los litigios de las celebridades, sino también en la vida de cada uno de los involucrados.
El matrimonio de los dos artistas no duró mucho. Un año después de su gran boda, celebrada en el Caribe, Heard inició el proceso de divorcio, acusándolo de violencia y abuso durante el corto tiempo que llevaban casados.
Sin embargo, la verdadera erupción de este volcán mediático llegó en 2018, cuando ella publicó una columna en el diario estadounidense The Washington Post en la que hablaba de la violencia contra la mujer y hacía referencia implícita a la agresiva y compleja relación que vivió con Depp.
En esta columna, y en sintonía con el auge del movimiento de lucha por los derechos de las mujeres #MeToo, Heard se definió como “una figura pública que representa el abuso doméstico”.
Lo más leído
A partir de aquí, ambos se vieron envueltos en una serie de idas y venidas por los estrados judiciales, que terminaron en el juicio, finalizado esta semana.
La primera parte del litigio, celebrado en Fairfax, estado de Virginia, en Estados Unidos, estuvo dominada por las acusaciones de Heard y su equipo legal en contra de Depp. Durante estos episodios, ella argumentó ser la víctima de serios casos de maltrato por parte del actor, que se defendió de manera hábil.
Heard hizo explícita referencia a los problemas que tenía Depp con el alcohol y otras sustancias psicoactivas, como el éxtasis, la cocaína y la oxicodona. En uno de los episodios descritos por la actriz, Johnny habría, presuntamente, abusado sexualmente de ella con una botella de vodka.
En este punto, y por la gravedad de las acusaciones en su contra, la opinión pública daba por ganadora a Heard, que parecía tener acorralado al actor.
Posteriormente, le llegó el turno al equipo de Depp, que volteó por completo la situación y devolvió el argumento de la actriz: si había abuso, la víctima era él, no ella. De ser la víctima de la historia, la actriz pasó a ser la victimaria directa de una serie de increíbles y graves acusaciones.
Hay que resaltar que el equipo de Depp, liderado por una abogada con raíces colombianas llamada Camille Vásquez, jugó un rol central en cambiar la perspectiva de los jurados del juicio a favor de Johnny.
Mediante hábiles estrategias legales, de imagen y comunicativas, este equipo de abogados logró proyectar a Depp como una persona con problemas personales, pero respetuosa de su relación. Como un individuo atormentado más que un tormento.
Durante esta fase del juicio, subieron al estrado desde celebridades amigas de Depp –cuyos testimonios fueron decisivos– hasta psicólogos y psiquiatras que diagnosticaron a Amber con trastorno límite de la personalidad, una enfermedad caracterizada por la crueldad, el miedo a la soledad y la búsqueda de atención.
Las acusaciones y pruebas en contra de Heard empezaron a llover como dardos envenenados, que no solo destruyeron el relato que había montado durante la primera parte del juicio, sino que también lograron cautivar el corazón de los jurados.
El equipo de Depp presentó al jurado una serie de fotografías y videos en los que se ven las presuntas aventuras que habría mantenido Amber con James Franco –amigo íntimo de Depp–, el magnate de Tesla, Elon Musk, y la actriz y modelo Cara Delevingne. En este último presunto amorío, al jurado le presentaron unas fotos en las que aparecían Musk, Delevingne y Heard en un ascensor, a altas horas de la noche.
Las fotos y las incisivas preguntas del equipo de Depp sobre este episodio fueron decisivas para el resultado final.
Asimismo, varios famosos presentaron testimonios en el juicio. El más importante fue el de la modelo Kate Moss, expareja de Depp y quien lo defendió de una acusación de agresión física. Este testimonio fue central no solamente porque una expareja de Depp negó cualquier tipo de violencia durante la relación que mantuvieron, limpiando su nombre como compañero sentimental, sino también por la química que acusado y testigo tuvieron entre sí.
Cuando Moss era interrogada acerca de su relación con Johnny, ni ella ni el propio actor podían evitar sonreír de manera cómplice y amorosa, un hecho que no pasó desapercibido ni para los jurados ni tampoco para los espectadores del juicio.
Por último, otro de los episodios decisivos, y tal vez uno de los más grotescos del juicio, fue la serie de pruebas fotográficas en las que se mostraba la manera en que Heard presuntamente habría defecado sobre la cama de Johnny.
El episodio, según lo relatado, ocurrió luego de una fuerte pelea que ocasionó que Depp se fuera de su casa. Acto seguido, Amber habría defecado en el lado de la cama de Johnny, quien no volvió sino hasta unas semanas después y se enteró del acontecimiento por unas fotos enviadas por su personal de limpieza.
Cuando Heard fue cuestionada sobre esto, afirmó que los culpables habían sido los perros, una respuesta que ni Johnny, en su momento, ni el jurado, después, quisieron creer.
En este punto es clave recordar que, en primer lugar, fue un jurado conformado por civiles –y no jueces– quienes deliberaron y dieron el veredicto.
Y, en segundo lugar, que el juicio adelantado era por difamación, por lo tanto, no se estaba juzgando la culpabilidad de los involucrados en los acontecimientos presentados como pruebas, sino que estas sirvieron, más bien, como insumos para determinar si Depp había difamado a Heard o viceversa.
La decisión del jurado fue, y lejos de los pronósticos iniciales, que Johnny Depp no había difamado a Amber Heard. Por el contrario, fue ella quien difamó y acabó con la carrera del actor. El jurado estaba conformado por cinco hombres y dos mujeres.
Depp, quien no estuvo presente durante el resultado final de la audiencia, deberá recibir 15 millones de dólares en indemnizaciones. Mientras tanto, Heard recibirá solamente 5 millones debido a que un antiguo abogado de Depp la difamó al decir que sus acusaciones de abuso sexual eran fa.lsas.
En este caso mediático, crudo y que generó fuertes opiniones y divisiones, Heard pasó de víctima a perpetradora de una serie de increíbles actos, que le costaron mucho dinero y, probablemente, su carrera y futuro como actriz.
“Desde el inicio, el objetivo de realizar este caso fue el de revelar la verdad, sin importar el resultado”, escribió Depp en una nota, compartida por medio de sus redes sociales luego del veredicto.
“Me siento en paz al saber que por fin lo logré”, sentenció el actor, quien salió victorioso de este episodio, que podría ser el guion de una de sus nuevas películas.