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Dolly Parton donó un millón de dólares para desarrollar la vacuna, y aún no la ha recibido
La principal representante femenina de la música country en Estados Unidos, quien acaba de cumplir 75 años, dijo que no se va a saltar la fila sólo por su generosa donación.
Su carrera de más de cinco décadas como cantante, compositora, actriz, productora, escritora, empresaria y filántropa, le ha dejado premios Grammy, nominaciones al Globo o al Emmy, y grandes satisfacciones personales por su ayuda a causas sociales. Ocupó el sexto puesto en el ranking de los artistas más poderosos de 2020 con un patrimonio de 500 millones de dólares.
La estrella de películas como Nine to Five (Cómo eliminar a su jefe) es famosa, no solo por su talento sino por su gran corazón. Y acaba de dar prueba de ello. A medida que avanzaba la pandemia se empezó a preocupar por la solución, y en una noche de desvelo se dijo: “Tengo que hacer algo para tratar de ayudar a encontrar una vacuna”.
Y como nunca nada la ha detenido, contactó al grupo de científicos de la Universidad Vanderbilt de Nashville, en su Tennessee natal. “Son personas maravillosas, han sido muy buenas con mi gente en tiempos de enfermedad”.
Ella, quien se define como una persona de fe que ora “para que Dios me guíe en la dirección correcta y me permita hacer lo que hago”, les preguntó si podía donarles un millón de dólares para la investigación de una vacuna. No es difícil adivinar la respuesta.
Desde el inicio de la cuarentena se unió a todas las campañas para que sus seguidores se cuidaran. Cuando la cantante de folk Brandi Carlile la nominó en las redes para el reto #IStayHomeFor publicó su foto con un cartel y escribió, “Me quedo en casa para USTEDES, todos los hermosos fanáticos. Esto es muy importante en este momento para protegerse a sí mismo, a su comunidad y al mundo”. Y nominó a su vez a la cantante Carrie Underwood, la actriz Reba, la periodista Hoda Kotb y a su ahijada Miley Cyrus “para compartir con quién se quedan en casa también”.
“Creo que recibo mucho más crédito del que merezco, pero me hace feliz ser parte de eso en cierto modo”, dice. Y esa parece ser la principal razón de su generosidad, la felicidad. Porque a pesar de tener la edad para hacer parte de las primeras líneas de vacunados, aún no la ha recibido. Fue enfática al decir que no va a ponérsela hasta que más gente haya recibido la suya. Con la sonrisa que siempre la ha caracterizado, aclaró que prefiere esperar, porque no quiere que crean que se está saltando la fila sólo porque donó dinero.
“A mi edad habría podido ponérmela la semana pasada. Iba a hacerlo en mi cumpleaños, pero pensé: ‘No, no hagas eso. Parecerá que es puro show’”. En todo caso, la intérprete original de I Will Always Love You prometió que el día que vaya a vacunarse lo hará frente a las cámaras para alentar a la gente, “y les diré la verdad si tengo síntomas”.
El pasado 19 de enero, día de su cumpleaños, en lugar de hacer el show, como dijo, les agradeció todo su amor a los cerca de cuatro millones de seguidores de su cuenta en Instagram. Les contó que este año siente un llamado a la bondad. “No podemos simplemente esperar un día más brillante, tenemos que trabajar por un día más brillante. Con demasiada frecuencia, el amor queda enterrado en un mundo de dolor y miedo. Tenemos que trabajar para desenterrarlo y compartirlo con nuestra familia, amigos y vecinos”.
Cuando le preguntaron cómo se siente tener 75 años, respondió, con su estilo descomplicado, que su plan es estar en la Tierra mucho más tiempo: “No tengo planes de parar, porque los números dicen que debo hacerlo. No le presto atención a eso. Todos los días me despierto con nuevos sueños. Trato de aprovechar al máximo cada año que vivo. Lo he hecho desde pequeña, lo haré hasta que me desplome. Con suerte eso no será en un futuro cercano”. Ojalá reciba pronto la vacuna.