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¿El sexo webcam mató el porno? Lo que piensa Aída Cortés de Esperanza Gómez
La estrella colombiana en la plataforma de contenido para adultos OnlyFans habla de la famosa actriz, también colombiana, y de las diferencias que hay en el trabajo de ambas. Entrevista en video. “El contenido de ella es muy carnal... Ella es una versión antigua de a lo que yo me dedico”, dice.
OnlyFans es una de las plataformas que se han convertido en un éxito en el mundo virtual tras la pandemia. Aída Cortes, la santandereana que se ha convertido en la reina de esa plataforma, le contó a SEMANA en detalle cómo funciona ese negocio y cuál es su historia de vida allí.
Según ella, las cifras que se manejan en el contenido digital para adultos son impresionantes. “100 millones de pesos o mucho más. El dinero es ilimitado, dependiendo del trabajo que se haga en la plataforma”, relató.
Cortés puede ser la colombiana a la que mejor le va en OnlyFans. Esta plataforma, que funciona como un servicio de suscripción, les permite a los creadores subir sus contenidos y ganar dinero gracias a que los usuarios pagan por verlos.
El portal fue fundado hace cuatro años por Timothy Stokely y funciona como una red social tradicional, pero cuenta con un muro de pagos. Aunque los usuarios pueden encontrar todo tipo de publicaciones relacionadas con temas de salud, alimentación o fitness, su auge ha sido gracias al material para adultos.
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Por eso, Aída Cortés explica que no se trata de prostitución ni de una forma tradicional de hacer pornografía. “Ese público es más de otros países porque la cultura en Colombia es diferente, es más de tacto, no aprecia tanto lo virtual; pero en otros países la gente casi no tiene amigos, trabaja todo el día, tiene la tarjeta de crédito ahí quieta, casi no ha conocido una mujer. Hay de todo”, relata.
Para ella, su trabajo es muy diferente al que hacen, por ejemplo, estrellas del porno como Esperanza Gómez. “Yo siento que la historia de ella y la mía son muy diferentes. Me parece que el contenido de ella es muy carnal, que no lleva nada de psicología, ni interacción con el público, ni negociación”, asegura.
Cortés agrega que “simplemente ese contenido se sube”, mientras que en OnlyFans existe una conexión entre la persona y el público. “Ella estuvo en el ‘raye’ cuando comenzó en el porno, pero el modelaje webcam mató el porno, porque ya son personas en vivo que pueden interactuar con los usuarios. Entonces es como una versión antigua de a lo que yo me dedico. Pero, obviamente, por el trabajo y el reconocimiento, sí la admiro y respeto”, agrega.
Las dos, en todo caso, están en la cumbre del contenido para adultos en Internet, así como en las redes sociales. Esperanza Gómez, por ejemplo, tiene 5,2 millones de seguidores en Instagram, y Aída Cortés, 2 millones.
Vea la entrevista completa en video
Cortés cuenta que en OnlyFans hace “contenido sin censura, videos eróticos, desnuda; creo contenido personalizado, hago amigos, lives, y ahora quiero hacer una serie erótica para cambiar la monotonía”. En su charla con Vicky Dávila narró el día a día de su trabajo en esa plataforma. Lo que le piden sus clientes y los límites que no ha querido cruzar.
Entre esas anécdotas, habló de uno de los usuarios que le “tocó el corazón” cuando era modelo webcam. “Me veía cansada de tanto transmitir y me decía: vamos a un privado, pero se supone que en un privado ellos pagan por minuto para verlo a uno desnudarse y resulta que él me decía: duerme, descansa”, narra.
La joven agregó que ese hombre “dejaba pasar cada minuto que le estaban cobrando durante una hora para que yo descansara y volviera al show en público”. Además, relató que también hubo otros que “me pagaban por leer un libro o jugar Guitar Hero, por peinarme, por pintarme las uñas, para que les diera órdenes, por jugar con mi nariz”.
Contó que ha tenido experiencias muy desagradables, como una vez en que un hombre le pidió cumplir una fantasía: que ella matara a un gato con un tacón. Ella lo bloqueó de inmediato y, por supuesto, ni se le pasó por la mente cumplir ese deseo.
Por otro lado, relató que nunca ha parado de trabajar, ni siquiera los meses que estuvo embarazada. En ese tiempo hizo contenido más con su rostro. “Ahí me di cuenta de que el entretenimiento para adultos no solamente es sexual, entonces mi cara jugó muchísimo, mis expresiones, hablarles, cantarles y lograr sostener la atención solo con la cara”, dijo.
Al final, aseguró que no hace ese trabajo pensando en el qué dirán. Contó que sus padres la apoyan y que, aunque en el pasado escondió esa actividad, hoy siente el respaldo de su familia y sus seres queridos.
“Ser bonita no es un pecado, y todo es un negocio. No soy prostituta, pero si hay una prostituta que sea exitosa, créanme que no es solo por prostituta, sino porque ha trabajado mucho en eso. Si es millonaria, es porque le ha metido mucho esfuerzo. No soy prostituta, sino creadora de contenido digital”, asegura.
Frente a quienes vetan su actividad, quizá con alguna creencia religiosa asegura: “Solo Dios puede juzgarnos, y que aquí hay una cosa que dice la Biblia y es que Dios odia lo tibio. Dios es caliente o frío, y pues yo soy caliente”.