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Equipo de seguridad del Príncipe Harry y su esposa Meghan denuncia que persecución en automóvil “pudo haber sido fatal”
“Al final de la persecución nadie resultó herido y la pareja llegó sana y salva, pero temblando de miedo al departamento donde se hospedaban”, relató a CNN el integrante del equipo de seguridad de los duques de Sussex.
Un miembro del equipo de seguridad que protege al príncipe Harry y su esposa Meghan Markle describió una persecución “caótica” en Nueva York que involucró a fotógrafos paparazzi, la noche de este martes, y denunció que el incidente pudo haber terminado con varias muertes.
“El duque y la duquesa de Sussex y la señora Ragland (madre de Meghan Markle) estuvieron involucrados en una persecución automovilística casi catastrófica a manos de un grupo de paparazzi muy agresivos”, había informado más temprano este miércoles el portavoz de Harry y su esposa a los medios de comunicación.
En declaraciones exclusivas a la cadena de noticias CNN, Chris Sánchez aseguró que el duque y la duquesa de Sussex fueron perseguidos por fotógrafos luego de salir de la ceremonia de entrega de los premios Women of Vision Awards, que tuvieron lugar en el Ziegfeld Ballroom de la Gran Manzana.
En la gala, la actriz había sido honrada por la Ms. Foundation for Women por “su defensa global para empoderar y abogar en nombre de las mujeres y las niñas”.
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De acuerdo con el relato de Sánchez, al final de la persecución nadie resultó herido y la pareja llegó sana y salva, pero temblando de miedo al departamento donde se hospedaban esa noche pues durante las dos horas que duró la persecución temieron un peor desenlace, dijo.
“Nunca he visto, experimentado algo como esto. Lo que estábamos tratando era muy caótico. Había alrededor de una docena de vehículos: autos, motonetas y bicicletas”, dijo Sánchez a Max Foster de la cadena CNN.
“El público estuvo en peligro en varios puntos. Podría haber sido fatal. Saltaban bordillos y semáforos en rojo. En un momento bloquearon la limusina (que transportaba a la pareja) y comenzaron a tomar fotografías hasta que pudimos salir”, agregó el miembro del equipo de seguridad.
La policía dijo que el incidente fue “desafiante”, pero no hubo colisiones y nadie resultó herido.
De acuerdo con el relato de Sánchez, “estaba preocupado por los protagonistas (el príncipe Harry y Meghan) pero más por el público porque ellos (los paparazzi) estaban siendo muy erráticos. La gente estaba en las aceras y cruzando calles y los (paparazzi) estaban cruzando semáforos en rojo. Hicimos todo según la letra de la ley”.
Después del incidente, el duque y la duquesa de Sussex estaban “asustados, exhaustos, pero aliviados de estar de regreso”, agregó.
Una vez conocido el hecho, el Departamento de Policía de Nueva York informó que había estado ayudando al equipo de seguridad privada de los Sussex el martes por la noche y que “había numerosos fotógrafos que dificultaron su transporte”.
“El duque y la duquesa de Sussex llegaron a su destino y no se informaron colisiones, citaciones, lesiones o arrestos al respecto”, dijo Julian Phillips, comisionado adjunto de Información Pública de la policía de Nueva York.
La muerte de Lady Di
Este hecho hizo recordar de inmediato la muerte de la princesa de Gales Diana Spencer, quien murió precisamente en París, la medianoche del 31 de agosto de 1997, a causa de las heridas producidas en un accidente automovilístico ocurrido en el interior del túnel del Alma, mientras el conductor del vehículo en el que se movilizaba la princesa junto a su novio Dodi Al-Fayed intentaba esquivar a gran velocidad a los paparazzi que los perseguían.
Lo más doloroso de aquella noche es que, pese a la trágica escena bajo el puente del Alma, un grupo de transeúntes quiso linchar a los paparazzi que seguían disparando sus cámaras fotográficas sin tregua, en lugar de ayudar. Todo esto mientras la princesa Diana aún estaba con vida. Ella murió horas más tarde en el hospital debido a un paro cardíaco.
Para ese entonces, los hijos de la princesa, William y Harry, tenían 15 y 12 años, respectivamente.
Ambos han expresado en varias ocasiones el dolor que sintieron tras perder el cariño de Lady Di y el peso de asumir el compromiso de continuar su legado. Sin embargo, hasta cuando la BBC emitió el documental Diana, 7 Days, una década más tarde, hablaron de la rabia que despertaron en ellos los paparazzi, los cuales persiguieron esa noche a su mamá e influyeron decisivamente en el accidente.
“Una de las cosas más duras sobre este hecho es que la gente que la persiguió en ese túnel fue la misma que tomó fotografías de ella muriendo en el asiento trasero del auto”, declaró Harry en el documental.
“William y yo lo sabemos, nos lo han dicho muchas veces... Ella tenía una herida muy grave en la cabeza, pero estaba a salvo en el asiento trasero. La misma gente que había provocado el accidente, en lugar de ayudar, estaban tomando fotos de ella muriendo... Y luego, esos fotógrafos qué hicieron... regresaron a sus mesas de trabajo en sus países”, expresó el menor de los príncipes sobre aquella noche.
Por su parte, William confesó cuál fue su más grande preocupación tras la partida de Diana: “Cuando algo tan traumático, como la muerte de tu madre, te sucede a los 15 años te rompe, no iba a permitir que me quebrara. Quería que ella estuviera orgullosa de la persona en que me convertiría, no quería preocuparla o que el legado que nos dejó a Harry y a mí se destruyera por completo, todo el trabajo, el amor, la energía que nos dio cuando éramos muy jóvenes...”.